Querida mamá. [Editada]

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Querida mamá.

¿Sabes? Hemos hablado cada vez menos, y sé la razón. Sí, mamá, sé que hay una razón por la cuál estás así.

Estás enojada conmigo.

Diría que te comprendo, pero estaría mintiendo.

No soy como tú, estás consiente de ello. No puedo evitar decir cosas sin pensarlas; y lo peor, nunca me arrepiento de decirlas.

Así que perdón por ser directo contigo, pero tampoco voy a cambiar mi forma de pensar por algo así.

Lo siento, mamá, pero nunca dejaré de ver a los homosexuales como lo que realmente son.

Pero bueno, no quiero pelear contigo, así que te traeré una buena noticia que sé que te alegrará.

Sí, mamá, se trata de tu nuevo consentido homosexual.

Hoy intentaron golpear a tu querido, mas este no se dejo. La verdad, quedé sorprendido, y ni qué decir de los que estaban golpeándolo. Los perritos falderos de Mike intentaron hacerlo callar, pero Theo reaccionó peor.

Comenzó a gritar que lo dejaran en paz de una puta vez (sí, eso dijo) y que no volvieran a acercarse a él. Y por si fuera poco, comenzó a golpearlos de regreso.

¿Quién diría que ese pequeño cuerpito iba a acabar con 3 chicos completamente musculosos?

Vaya, tu pequeño ahora es un héroe.

¿Qué me dices de esto?

Att: Jordan, tu hijo.

Jordan terminó de escribir su carta y soltó un gran suspiro. Omitió un pequeño — o tal vez gran — detalle.

No mencionó que sintió un tremenda admiración por aquel chico al ver que este comenzó a defenderse.