Treinta y uno

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                                 Jaja. Supongo que todo esto significa mucho más que nada.

   Estaremos bien, lo presiente la parte mas ansiosa de mi cuerpo que me lanza a los fuegos del infierno al momento de rendir cuentas de lo hecho.

—Esto no significa nada—Dice Celeste al ver lo asqueroso sobre las mantas de la cama.

—Esto no está bien ¿Que harías si alguien se caga en tu cama?—Dice Mike dejandose caer al piso—Oh rayos.Amigo, creo que yo soy el de la ansiedad ahora.

—Jaja.No es momento para bromear ahora—Digo tratando de calmarme.

—Tienes razón—Dice el pidiendome ayuda para levantarlo, cosa que no se completa debido a su incapacidad de hacerlo—Mejor me quedo aquí unos  minutos, tu solo ve a ver que le ha pasado a mi casa.

—Ok. Tan solo esperemos que no falte el techo.—Digo con  una calma inquietante.

   Oh no. Oh no. Es que no se controlarme solo y ver todo esto es un infierno, y lo  peor es que me saca una risilla cuando al salir de la habitación la pista queda desvelada ante mis ojos.

—¿Que rayos hace una bicicleta sobre la mesa?...¿Eso es una rana gigante?—Muevo un montón de cajas apiladas  repletas de nieve y una voz ronca me asusta como respuesta.

— No hay pedo 'mano ¿Que pinches carajos quieres? Llamaré a seguridad nacional para que te echen a patadas de mi pocilga.

—Tan solo quería saber si quedaban taquitos 'mano.

—Pues llegaste tarde, mi amigo ya lanzó lo que quedaba de comida a la piscina.

—¿Estas de broma?

—Nunca lo estoy.

   Así que ahora la verdad sale a flote. El querido mexicano decía la verdad: Unos cuantos kilos de comida  s even como flotadores en una psicina que debe tener el agua mas congelada del estado !Brrrr, que frío!

—Vaya.

—Eso es demasiado—Dice Mike apareciendo con un vaso con agua y una pastilla a medio tragar en la garganta.

—No sé que decir.

—¿Acaso ese es mi equipo  reproductor de música?

—Sí, y está entre los cuadros rotos de tus padres  y un perro muerto.

—Diablos, no está muerto, solo debe estar durmiendo—Dice acercandose al preciado can del vecino de unas casas mas abajo.

—Vamos pequeño, despierta ya.—Aun tengo la esperanza.

                          Eclipsando el sol desde lo más profundo del océano.

—Shaaaa, 'mano, que no lo tomes a mal, pero ese perró ta're muerto wey. Si lo hubieras visto anoche !Lo ocupamos para pagar las apuestas de las grandes! El lamió  y mordió unas buenas canicas hum...

—Ya basta, ya entendimos.

—¿No sabes lo que le ocurrió?—Dice Mike tratando de taparlo con lo primero que se encuentra.

—Solo se que bebió más de lo que debía.

   Volver a la realidad no es tan fácil luego de un fiestón como el de ayer, u mucho mas cuando tu vida esta colgando sobre un hoyo negro que amenaza con tragarse todo.

   ¿Has sentido arrepentimiento por quien eres? Yo sí. muchas veces.

                                      Los susurros se transforman en gritos.—Bored to Death.



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