It's so easy, and other lies. (Axl Rose y yo)

Capítulo 15

Me desperté por la mañana con una resaca del quince, además alguien, supongo que Diana, estaba viendo la televisión, y eso hacía que me doliera todavía más la cabeza. Era la una y media de la tarde, pero yo seguía teniendo sueño, así que intenté volver a dormir.

*Narra Diana*

Hoy me levanté temprano y me puse a hacer las tareas domésticas, y a eso de la una por fin acabé. Me puse a ver un rato la tele en vista de que _____ no se despertaba. Ayer me dijo que Slash había venido a casa, tendré que llamarle para ver qué es lo que quería.

[Conversación telefónica]

Slash: Mmm...¿sí?

Yo: Slashitoo, ¿qué tal?

Slash: Dormido y con resaca. ¿Slashito? *Riendo un poco*

Yo: Ay de verdad, que manía tenéis todos con el alcohol.

Slash: ¿Todos? ¿Por quién me has cambiado?

Yo: Por nadie imbécil, me refiero a _____. Anoche se emborrachó ella sola en su habitación.

Slash: Eso es bueno.

Yo: ¿Bueno? ¿Qué le ves tú de bueno? Llámame rara, pero yo no veo nada de bueno en que nuestra amiga se emborrache.

Slash: Rara no, pero un poco cortita sí.

Yo: ¡Oye!

Slash: Ay, Diana, Diana...¿no ves que eso es porque echa de menos a Axl?

Yo: Puede ser, pero ¿y qué? Todos sabemos que Axl es un imbécil que no la merece.

Slash: Eso es cierto, pero ¿no crees que deberían arreglar las cosas?

Yo: Bueno, quizás tengas raz...*llaman al timbre* Espera que están llamando a la puerta. -Me dirigí a la puerta y al abrir me llevé una sorpresa, era Sebastian.

Yo: ¿Seb...astian?

Sebastian: Diana, creo recordar, ¿verdad?

Yo: Esto, sí, ¿qué pasa?

[Por teléfono]

Slash: ¿Es Sebastian?

Yo: Sí Slash, ahora te llamo.

Slash: Pero...-Colgué y me volví a dirigir al potente rubio que tenía enfrente.

Yo: Ok, perdona. ¿Decías?

Seb: ¿Y _____?

Yo: Em, durmiendo y con resaca.

Seb: Ah, bueno, esto, pues dile que me llame luego por fav...

Yo: No, pasa pasa, que la despierto.

Seb: Ok, de acuerdo.

*Narro yo*

No había conseguido volver a dormir, pero en ese instante Diana entró a mi habitación.

Diana: _____ ¡Despierta capulla!

Yo: Ugh.

Diana: ¡Vamos! *Dando palmadas*

Yo: Dios, por favor, si existes, haz que se calle.

Diana: Bueno, no sé si Dios existirá, pero desde luego que lo que tienes esperándote en el salón sí que es celestial.

Yo: ¿De qué mierdas hablas, Diana? Déjame dormir.

Diana: Está bien, le diré a Bach que se vaya.

Yo: Sí sí, lo que tu digas, lárgate ya.

Diana: *Cerrando la puerta* O mejor, que venga.