Capítulo diez.

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— Haz más de esas galletas y te compro toda la pizza que quieras —pide Gina.

— ¡Oye! —Sierra y Cameron se quejan.

— Chicos, debo hablar con ustedes —dice Bart.

Cameron y yo seguimos a Bart a la sala mientras nos explica algunas cosas del tour, como Cameron es dueño de una parte de magcon y yo soy la invitada especial, hay cosas que nosotros somos responsables. Y pensándolo bien, ya no me gusta tanto estar en magcon. No soy responsable y bueno, no es lo mío. Una vez tuve una tortuga, se llamaba Pancho, siempre olvidaba darle de comer, hasta que un día mi hermano se compró una tortuga más grande que Pancho, se llamaba Samuel, y Pancho se comió a Samuel, bueno no completo, solo una parte, y bueno, mi hermano quería que le repusiera la parte que Pancho se comió hasta que mi papá regalo ambas tortugas, creo que esa fue la primera decepción que tuve de mi padre; regaló a mi tortuga caníbal. En fin, desde que Pancho se comió parte de Samuel, no he tenido mascotas porque soy irresponsable, según mi mamá y la veterinaria que atendió a Samuel.

— ¿Me estas escuchando? —el chasquido de los dedos de Cameron frente a mí me asusta que estoy por golpearlo, pero noto que estamos solos en la sala.

— No perdón, me acordaba de Pancho.

— ¿Pancho? —repite en un tono que me da bastante risa. La pronunciación de Cameron es rara— ¿Qué es un pancho?

— Era una tortuga que tenía de niña, pero se comió a Samuel y desde entonces no tengo mascotas, no importa. ¿Y Bart?

— Fue por pizza ¿Quieres cenar aquí o quieres subir conmigo y Chris?

— Depende ¿Qué cosa interesante harán? —alzó una ceja.

— Pues, si te nos unes podríamos... —sonríe descaradamente, pero hago una mueca.

— Le voy a decir a tu mama que te me estas insinuando Cameron —le doy un zape rápidamente— Si van a estar de gays no voy a subir, pero si tienes videojuegos, me uno.

— Tengo algunos...

— Ok, vamos. Trae la pizza, por cierto. ¡Chris ven acá te voy a patear el trasero en el videojuego!

— ¡Eso crees!

Chris sube corriendo las escaleras al tiempo que yo lo sigo, Cameron viene detrás de mí con una caja de pizza y algo de beber.

A esto le llamo confianza nivel Cat. Día 1 y ya he golpeado a Cameron varias veces.

(...)

— Odio mi vida en este preciso momento —murmuró al sentarme en el auto.

— Lo siento, es parte de ser magcon —me sonríe Cameron.

No sé qué horas es, pero estoy consciente de que es muy temprano para mí. Anoche luego de que le ganara como 30 veces a Chris en un videojuego y nos acabáramos la pizza, Gina nos mandó a dormir a todos, aunque Cameron le dijo "Soy demasiado mayor para que me digas a qué horas dormir" Pues Cameron ahora tiene una marca de mis dedos en su frente porque lo golpee por responder a Gina, creo que aún sigue enojado.

— Quiero café.

— No te voy a comprar café.

— No te lo estoy pidiendo a ti —le saco el dedo medio a Cameron.

Según Bart nos encontraremos con los demás magcon muy temprano, así que por eso ya nos ha sacado de la casa, ni siquiera he desayunado, y eso me pone de malas. Veo la hora y decido por una vez en la vida despertar a mi hermano, así que rápidamente le llamo y espero a que escuche el teléfono.

It's Cat | MagconDonde viven las historias. Descúbrelo ahora