Capítulo treinta y seis.

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— ¿Qué haces? —pregunto mientras me siento al lado de Hayes.

— Estoy planeando mi próximo video a youtube.

— Yo ayer subí uno. Sammy me obligo a publicar un mini vlog de Six Flags.

— ¿Dónde Aaron gritaba como niña pequeña en los juegos?

— Si, esos.

Comienzo a cambiar de canales en la tv mientras Hayes sigue en su teléfono, supongo que en twitter o hablando con los chicos, yo los tengo silenciados porque básicamente hablan de cosas sin sentido todo el día, aparte de mandar stickers con nuestras caras.

— ¿Quieres grabar un video conmigo? Quizás me hagas famoso.

— Oh cállate —digo mientras le pego con el control de la tv— ¿Qué tipo de video?

— ¿Un ask?

— ¿Ask cayes?

— Seriamos un buen shipp —dice orgulloso y vuelvo a pegarle con el control— ¡Auch yo solo digo la verdad!

— No digas pendejadas —me rio— ¿Publicaras en twitter?

— Si y tú también publica algo.

— Esta bien.

Busco mi teléfono en el sofá y cuando lo encuentro lo primero que veo son muchos mensajes del grupo con los chicos. Dios son un grano en el trasero.

— ¿Quién saco esa foto mía? —pregunto a Hayes cuando veo el nuevo sticker.

— Oh, Ander la envió ayer por la noche.

— Voy a enviar una de el —me rio mientras salgo de iMesage para ir a twitter, veo el tweet de Hayes así que le doy re tweet, luego de eso público que nos hagan preguntas, agregándole un "no nos shippeen porfa" y lo envió.

— Es cruel que no quieras que nos shippeen —se queja el chico a mi lado.

— ¿Porque?

— Seriamos una pareja muy bonita acéptalo.

— Hayes no.

— Muchas quisieran tener al papi Hayes y tú lo desprecias —hace un puchero.

— ¿Sabes lo que significa papi?

— Ander me estuvo enseñando español.

— Ander es un idiota para enseñar español —me rio.

— ¿Entonces no nos shippeas?

— No Hayes cállate, déjame ver la televisión.

— Voy a pedir comida.

— ¿Comida china?

— Acabas de leer mi mente ¿Por qué no somos pareja aun?

— Hayes te voy a golpear.

— Esta bien, ya me voy.

Subo un poco el volumen de la tv mientras me acomodo mejor en el sofá.

— ¿Ya dejaron de pelear? —veo a Nash adormilado entrar a la sala.

— No peleábamos.

— Oh vamos —se ríe mientras se acuesta en el sofá recargándose en mi— Siempre que Hayes y tu están solos, se quieren estrangular.

— Es mentira.

— Anoche cuando veíamos películas, me fui 5 minutos al baño y ya querías ahogar a Hayes en las palomitas.

It's Cat | MagconDonde viven las historias. Descúbrelo ahora