❀✿03:El ceño fruncido y la bebé curiosa.✿❀

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— ¿Qué?

La expresión de sorpresa de los tres mayores era bastante graciosa a decir verdad, y no pudo evitar reír un poco ante estas.

— Oh no. No podría hacerte esto JiMinshi. – habló AhRo rápidamente negando con la cabeza.

— No sería un problema para mí. He cuidado niños antes, me gusta hacerlo; y si sólo son tres semanas estaré bien, tendré todo un mes para descansar. Tampoco tengo nada mejor que hacer realmente. – sonrió sinceramente.

— Pero...

— ¡Yo quiero que tío Minnie me cuide! – exclamó KyuHyun sonriente y estiró sus bracitos dando pequeños saltitos para que JiMin lo cargara, y así lo hizo, de repente sintiéndose maravillado con la idea del pequeño llamándolo tío Minnie.

— Y yo no tengo problema. – sentenció abrazando al pequeño que se aferraba a su cuello.

— ¿De verdad no te molesta, JiMinshi? – inquirió la mujer mirándolo esperanzada, él negó con la cabeza, aun sonriente. – ¡Oh muchas gracias! En serio acabas de salvarme. Juro que te pagaré por tus servicios, y ni bien logré que una de las niñeras se desocupe, la mandaré para que puedas seguir descansando.

JiMin rió suavemente y negó con la cabeza mientras el niño bailaba en sus brazos. – No se preocupe por el dinero, no es necesario, disfrutaré haciéndolo. – se encogió de hombros.

— Ah no, nada de eso. – interrumpió la madre de YoonGi. – Estás ofreciendo tus servicios y dejando de lado tus vacaciones por esto, así que se te pagará como es debido. – aclaró la mujer muy seriamente.

— No será más pesado que mi agenda diaria, no es necesario que me paguen.

La mujer siguió con su regaño y su explicación sobre la obligación moral de pagarle haciéndolo reír, y por fin se dignó a mirar a YoonGi que lo observaba con los brazos cruzados sobre el pecho y el ceño fruncido.

Rodó los ojos y se dispuso a escuchar a las damas, que luego de una rato de explicaciones éticas y morales, lo invitaron a la casa donde debería quedarse si cuidaría a los niños.

Al final, YoonGi los acompañó, ni siquiera supo por qué, sólo lo encontró sentado a su lado cuando subió a la camioneta de su hermano. Fue bastante cómico verlo aun enfadado y de brazos cruzados, aunque no le prestó mucha atención, estaba más entretenido conociéndose son la pequeña DaeHyun, que lo miraba embelesada como queriendo descifrar algo, completamente concentrada en él. Era una niña realmente adorable, y también podría decir que la pequeña lo tenía hechizado.

— Y esta es mi habitación. – dijo AhRo enseñándole el cuarto principal, con la cama de dos plazas al centro y contra la pared, con sábanas blancas impecables y todo en perfecto orden. – Puedes usarla si quieres. – agregó ella.

— Estaré bien con la de invitados, pero gracias. – contestó mirando alrededor un poco más detalladamente.

— Eso es todo. En la cocina dejé dinero para los gastos diarios, y en el refrigerador están todos los números de emergencia. De verdad muchas gracias por hacer esto, no sabes lo mucho que me ayudas.

El rió suavemente negando con la cabeza. – Es un gusto hacer esto. – ella sonrió y comenzó a caminar escaleras abajo, le había mostrado cada rincón y cada pequeño lugar en la casa para que supiera moverse como si estuviera en la propia.

La siguió hasta abajo tomando la mano de KyuHyun quien tiernamente lo seguía a todos lados, en algún momento el celular de AhRo había sonado e iba hablando claramente sobre él, ya que hablaba de haber conseguido a alguien que cuidara los niños.

En cuanto terminó de bajar miró alrededor en la enorme sala y grande fue su sorpresa al ver a YoonGi con la pequeña DaeHyun en brazos; se quedó tan entusiasmado en esa imagen que casi ni notó cuando KyuHyun lo soltó y corrió tras su mamá.

YoonGi miraba a la pequeña con el ceño ligeramente fruncido, pero muy atentamente. Y la pequeña lo observaba de la misma manera, con los ojitos grandes y brillantes, balbuceando algo sólo entendible para ella. Sonrió sin poder evitarlo, y casi se le escapa una risa cuando la bebé empezó a manotear queriendo agarrarle las mejillas al mayor.

YoonGi sólo intentaba esquivar los 'ataques' de la pequeña, pero aun así ella logró golpearlo un par de veces, parecía realmente divertida con la idea de toquetearle el pálido rostro a su tío.

— ¿Quieres que la tome? – le preguntó acercándose cuando lo oyó gruñir suavemente, al parecer la pequeña tenía algo con violentarlo.

YoonGi le echó una mirada rápida y asintió pasándosela con cuidado. La tomó sonriente. – Hola pequeña, ¿qué le hacías al tío YoonGi? ¿Eh?

La bebé balbuceó nuevamente, parecía darle un explicación en respuesta a su pregunta. – Creo que no le agrado. – murmuró YoonGi mirándola con el ceño fruncido, quedándose de pie a unos cuantos pasos de él.

— Yo creo que le agradas demasiado, por eso quiere tocarte. – sonrió y lo miró. – Ella te miraba muy interesada.

El mayor volvió a mirar a la niña, pero no dijo nada.

— Puedes volver a la casa de tus padres si quieres. – le dijo después de juguetear un poco con la nena. – Yo pasaré la noche aquí.

— Sobre eso... me quedaré contigo.

— ¿Eh? ¿Por qué? – inquirió sorprendido. – No creo que los niños sean lo tuyo, además, ¿no querías vacaciones?

— Sí, pero me parece injusto que tú pierdas las tuyas por estar cuidando a mis sobrinos. – explicó YoonGi encogiéndose de hombros. Alzó una ceja y lo pensó un poco, definitivamente sería más fácil si tenía un poco de apoyo extra. Le gustaba cuidar niños, pero eso no quería decir que era un experto haciéndolo, además, sería bueno para YoonGi, a ver si dejaba de ser tan bruto para ciertas cosas, aunque a decir verdad, parecía manejarlo bien, sobre todo con KyuHyunnie.

— Bueno, sería genial que te quedaras. Así podrías recuperar el tiempo perdido con tus sobrinos. – sonrió en grande.

— Supongo...

--¡Tío Yoonnie! ¡Tío Minnie! ¡Veamos La Bella y La Bestia!

JiMin rió y se giró al pequeño que llegaba corriendo desde la cocina con una enorme sonrisa, miró de reojo a YoonGi, este miraba al niño con el ceño fruncido, otra vez.

— Está bien, KyuHyunnie, veámosla juntos. Hace mucho que no veo La Bella y La Bestia. – miró a YoonGi mientras se acercaba a acomodarse en el sofá, la pequeña apoyada en su pecho estiraba sus bracitos para tomarle los cabellos.

— ¿Quieren palomitas? – gritó AhRo desde la cocina.

— ¡Sí! – festejó el niño, YoonGi resopló aun con el ceño fruncido, pero se sentó a su lado.

— ¿Necesitas ayuda? – le gritó de vuelta a la dueña de casa.

— ¡No, no te preocupes!

Le sonrió a la pequeña y está chilló mirándolo fijamente, luego se volvió a YoonGi. – Te arrugarás más rápido así. – le dijo apoyando suavemente el índice de su mano derecha en su ceño arrugado, y acariciándolo despacio se deshizo de él, YoonGi lo miró sin expresión y luego sólo se recostó sobre el respaldo ignorándolos. Sólo volvió a reír, negando con la cabeza.

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Jelou!

Con este corto y sencillo capítulo relleno, damos oficialmente por iniciado Como la ℬella y la ℬestia, Yeeiii!

*Aplausos*

Espero que les haya gustado, no olviden votar y comentar.

Sin más que reportar, Lu Shi se despide.

Nos leemos pronto~!

_Editado por Ru 180220_

Como la ℬella y la ℬestia. [YoonMin]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora