Como la ℬella y la ℬestia. [YoonMin]

❀✿10: Deberíamos.✿❀

Abrió la puerta y dejó pasar a YoonGi primero; el mayor cargaba a la bebé y él tenía en brazos a un adormilado KyuHyun. Había sido un maravilloso día, pero los niños estaban realmente cansados. DaeHyun lloriqueaba y KyuHyun se quejaba por no poder estar realmente cómodo, aunque en ese momento el pequeño estaba aferrado a él con brazos y piernas y se ocultaba en su cuello.

— ¿Te apatece una siesta antes de la cena? - preguntó YoonGi con voz grave, mientras se dirigía a las escaler0as.

— Realmente no sé si pueda levantarme después -, murmuró él con una pequeña sonrisa, siguiéndolo fielmente. Caminaron hasta las habitaciones de los niños en silencio y él se metió en la de KyuHyun para quitarle la ropa sucia y dejarlo descansar un poco.

— Te bañaré antes de cenar, ¿si, bebé? - inquirió suavemente al niño adormilado. Él sólo asintió con la cabeza mientras se volteaba a darle la espalda, y no pudo evitar sonreír enternecido para luego dejar un beso sobre su cabeza.

Al salir de la habitación, caminó un poco para dirigirse al cuarto que estaba compartiendo con YoonGi, pero se vio interrumpido por el mismo cuando este salía de la habitación de la bebé justo frente a él. Le sonrió cansado y el mayor tomó su mano y dejó un beso sobre el dorso de esta para luego arrastrarlo tomando la dirección que él había seguido antes.

— YoonGi, nosotros olvidamos los cubre-bocas - murmuró él recordando ese pequeñín detalle que lo azotó durante el almuerzo pero que después olvidó una vez más -, tengo miedo de que alguien nos haya visto y haya tomado fotos a los...

Antes de que pudiera decir nada más, justo después de que YoonGi cerrara la puerta de la habitación, el mayor tiró de su cintura y lo besó suavemente, interrumpiéndolo. No tardó en responder después de un suspiro suave.

— Nadie puede subir fotos nuestras sin el consentimiento de la empresa, mucho menos de los niños — murmuró YoonGi suavemente sobre sus labios, su voz salió demasiado grave y en un tono mucho más bajo del que tenía normalmente —. No he tenido la oportunidad de besarte en todo el día — dijo mientras volvía a besarlo suavemente, tirándolo hacia atrás con él. Devolvió la caricia suave y se besaron un poco más, apenas tocándose.

— Debería preocuparte más YoonGi - murmuró cuando se alejó para sacarse la playera. YoonGi imitó su acción. - ¿Qué tal si alguien-...

— Cualquiera que quiera publicar algo de los niños, se comería una demanda que los dejaría en bancarrota por el resto de sus vidas, JiMin - interrumpió con algo de burla en su voz. Él sólo suspiró y negó con la cabeza, dándole la espalda mientras se quitaba el pantalón. Le parecía que habían sido muy irresponsable al no recordar que ambos eran celebridades, y realmente no quería meter a los niños en algo como eso aún, eso sólo molestaría la linda familia de HaNeul.

Cuando se volteó, YoonGi estaba semidesnudo sentado a la orilla de la cama, se sintió un poco avergonzado al verlo y notar que él también sólo portaba su ropa interior, y se reprendió mentalmente por eso, no era la primera vez que lo veía en ropa interior y probablemente no sería la última, no sabía por qué reaccionaba así.

Antes de que pudiera decir algo respecto al tema que llevaban, YoonGi tomó su mano y lo tiró hacia él, echándose sobre el colchón y posicionándolo encima. — No te preocupes por eso, JiMin, no pasará nada - lo  tranquilizó atrayéndolo para que sus labios se tocaran. Correspondió el beso sintiéndose algo tímido por la posición, y apoyó sus antebrazos a los costados de la cabeza de YoonGi para sostenerse mientras seguía besándolo suavemente, mientras YoonGi empezaba a acariciar su espalda lentamente, disfrutando del tacto bajo sus dedos.

— ¿Qué es esto? - no pudo evitar que esa pregunta saliera de sus labios suavemente, mientras el contacto se mantenía suave y húmedo.

— ¿Qué es qué? - respondió YoonGi, chupando su lengua, él sólo pudo profundizar la caricia explorando la boca del mayor. Sin embargo, se obligó a parar y se separó apenas lo suficiente para mirarlo a los ojos, sintiendo su respiración pesada sobre su piel, sintiendo el cosquilleo que estaba recorriendo todo su cuerpo.