Eran las 10 AM y ese día se encontraba Lauren en la Universidad esperando los resultados de su exámen de sociología, pues de estos dependía el viaje con Camila. Lauren se encontraba con sus compañeros fuera del salón mientras la maestra evaluaba los exámenes, pasaron alrededor de treinta y cinco minutos cuando la maestra los llamo pidiendo que pasarán. Todos tomaron asiento y pronto la maestra habló:
-Lo que diré a continuación son sus resultados finales en la evaluación del semestre.- Dijo el maestro.
Uno a uno el maestro iba dando los resultados, y mientras lo hacía todos se mordían las uñas o daban alguna otra muestra de nerviosismo, realmente querían pasar y disfrutar el verano, no querían hacer cursos para los extraordinarios y esas cosas.
Algunos resultados eran buenos.
-Oliver, tienes diez, felicidades.- Anunció el maestro y el joven alzó las manos en signo de alivio.
Otros resultados eran malos.
-Jessica, usted tiene seis, nos vemos en cursos.- Dijo el maestro y la chica pegó a la paleta de la butaca en signo de molestia.
Y llegó el momento.
-Lauren...
Lauren cruzó los dedos.
-Tienes nueve punto cinco, pero más las décimas que haz acumulado en el semestre por tu participación dan igual a diez, felicidades.
Lauren casi suelta un grito de alegría que reprimió por que no quería hacer el ridículo, se paró y fue por su exámen que tenía como resultado un nueve punto tres, nada mal, habia válido la pena estudiar tanto.
Salió y de inmediato sacó su teléfono para llamar a Camila.
-¡Amor!.- Respondió Camila.
-¡Pase con diez bebé! ¡Con diez!.- Anunció Lauren.
-¡Felicidades amor!.- Felicitó Camila.
-¡Gracias amor! Pero ahora, arregla tus maletas, nos vamos a México.
Camila empacaba lo necesario en su maleta, había llamado a sus padres preguntándoles como estaba el clima allá y recibió como respuesta que era caluroso, y era de esperarse. Los Cabello se habían adelantado pues ya habían dejado todo en orden en la empresa, y, además, tenían una nueva adquisición.
Un jet privado, y en este, viajarian Camila y Lauren, a solas.
Camila de inmediato se negó a esto diciendo que podía tomar un vuelo de avión, pero los Cabello fueron muy persuasivos y lograron convencerla. Después Camila lo pensó bien y bueno, un jet solo para ella y Lauren... No sonaba mal.
Camila llamó a Lauren y le advirtió sobre el clima que se presentaba y está agradeció pues así supo que llevar con exactitud. Camila ya tenía en mente que hacer, a donde llevarla y lo bien que la pasarían. Lauren solo tenía permiso por una semana pues Clara había dicho que esto era suficiente.
Camila cerró su maleta ya hecha y se recostó en la cama.
Al día siguiente Lauren ya tenía sus maletas en la sala y sus padres mientras tanto le daban un gran sermón de que tenía que comportarse frente a los Cabello y cuidarse.
-...Y no andes haciendo cosas malas hija por favor.- Clara al fin acababa su sermón de media hora.
-Si mamá.- Lauren rodó los ojos.
Pronto se escuchó el claxon de un taxi, era Camila.
Lauren salió corriendo y detrás de ella seguía Michael con sus maletas, y la ojiverde se lanzó a los brazos de la morena mientras que Michael con ayuda del chófer metía las maletas de Lauren.
Camila se despidió de todos los Jáuregui a excepción de Clara, pues esta se quedó adentro de la casa y no había tiempo para entrar a esta.
Camila abrió la puerta para que Lauren subiera y cuando estuvo a punto de subir, la mano de Michael en su hombro la detuvo.
-Te la encargo Camila, cuidala mucho.
Camila sonrió.
-Así será señor Jáuregui.
Michael sonrió y Camila subió al taxi.
Pronto llegaron al aeropuerto donde unos muchachos de traje los esperaban.
-Señorita Cabello, qué gusto verla.- Decía uno mientras tomaba las maletas y su compañero hacia lo mismo.
-Lo mismo digo Eddy.- Dijo Camila tomando la mano de Lauren y está lejos de negarse, entrelazó sus dedos con los de la morena.
-Por aquí, suban.- Dijo mientras lograban ver una especie de camioneta.
Subieron y pronto estaban dentro del aeropuerto, pero estaban en la pista de despegue y aterrizaje de los aviones, Lauren estaba un poco confundida pero pensó que tal vez era parte de un vuelo de primera clase.
Pero cuando la camioneta paró y bajo junto a Camila, supo el por qué habían entrado así.
-¿Y que tal?.- Preguntó Camila.
-¿Vamos a viajar ahí?.- Preguntó Lauren y Camila asintió.
-¿Nunca habías viajado en uno así?.- Preguntó Camila.- Por que yo sinceramente no.- Confesó Camila.
-Un par de veces pero con mi familia, no sola.- Confesó Lauren.
Cuando Eddy y su compañero habían subido las maletas y anunciaron al piloto que ya estaban ahí, bajaron y les hicieron saber que tenían que subir, así que lo hicieron.
El interior del jet era espacioso y precioso.
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Pronto tras recibir indicaciones de la azafata, tomaron asiento y esperaron a que el piloto decidiera despegar.
Antes de que lo hiciera, Camila tomo su mano y entrelazó sus dedos.
-¿Lista?
Lauren la miró y dejo un corto beso en sus labios para responderle.
