Parte 28

1.1K 112 32
                                    

Omnisciente

-¿Tuviste algo que ver con lo que le pasó a Yuki?- Gritó Onodera acercándose rápidamente al ojicafe y agarrando el cuello de su camisa.

-¿Y que si fuera así?- Respondió Kisa mostrando una sonrisa retadora.

El castaño ya harto de la soberbia del otro, se abalanzó sobre el, cerró su puño y golpeó la nariz contraria con todas sus fuerzas.

Kisa retrocedió mientras pasaba su mano por el lugar a dolorido luego la miró confirmando su sospecha de que esta estaba sangrando.

-Maldito ¿Que te crees?-

-Eso debería decirlo yo ¿Como te atreves a meterte con una niña de dos años?-

-Pfft, ni que fuera algo del otro mundo- Dijo sarcásticamente mientras se cruzaba de brazos.

-Eres un idiota- Gritó el castaño totalmente enfadado y volvió a golpear al pelinegro.

Esta vez Shouta no se quedó atrás y también comenzó a desquitarse.

Takano agarró el brazo del ojiesmeralda y lo alejó de su oponente.

-Onodera, estas asustando a Yuki, además el encargado de la heladería esta amenazando con llamar a la policía, déjalo, no vale la pena seguir gastando energía y saliva en ese idiota- Habló con un tono algo intranquilo por la situación.

-Takano...Quiero golpearlo hasta sacarle lo despreciable- Pronunció Ritsu tratando de calmarse

-Quiero ver que lo intentes- Bufó Kisa.

El castaño se acercó al ojicafe y le dio un gran empujón haciendo que este se golpeara la espalda con una de las mesas.

-No te vuelvas a meter con mi hija, ¿Has entendido?- Finalizó, tomó a Yuki en brazos y salió del lugar seguido por Takano y Akihiko.

--Papi, ese señor me asusta-- Mencionó la pequeña entre sollozos. --Papi pudo haberse lastimado--

-No te preocupes no fue nada- Sonrió Onodera acariciando cabeza de su hija.

--Ritsu, lo siento-- Dijo el peliplata haciendo suspirar al el recién nombrado.

-Akihiko, está claro que no debimos haber arreglado esta salida-

--T.te equívocas, solo no...--

-Lo mejor será que vayas con Kisa y lo calmes un poco- Interrumpió el ojiesmeralda forzado una sonrisa.

--Pero...--

-Gracias por pasar el rato con nosotros- Finalizó y se alejó del lugar dejando al ojivioleta con la disculpa en la boca.

...

-Onodera ¿Se puede saber que hacías con Usagi?- Habló molesto el azabache cuando entramos al apartamento.

-¿Que mas podía estar haciendo? El me pidió que le diera otra oportunidad para estar cerca de nosotros y...-

-¿Como aceptaste algo así? Demonios Onodera, ¿Y que es eso de darle otra oportunidad?-

-No es lo que piensas, sólo como amigos, yo no quiero volver a ese tipo de relación con el, ¿Por quien me tomas?-

-...Lo siento, es que me altera que siempre que estas con el pasa algo malo-

-¿Insinúas que no se defender a mi hija ni a mi?

-No es eso, si bien vi la paliza que le diste a Kisa- Rió un poco.

-¿Entonces?-

-...Estoy celoso, tenía planeado pasar el día con ambos y...-


Pov Onodera

¿Celoso de Akihiko? No puedo creer que haya dicho eso.

-No tiene por que estarlo, acepté ir con el porque fue muy insistente y quería que dejara de molestar... Si quieres podemos pasar lo que queda de día los tres-

-...- Al ver que se había quedado callado y que encima de eso bajó su mirada no puede evitar sentirme mal.

-Lo siento-

-No, el que debe disculparse soy yo, no tengo por que estar haciéndote reclamos sobre eso.-

-Olvidemos lo que paso hace un rato, hagamos algo los tres- Mencioné tratando de cambiar la atmósfera.

Volteé a ver a Yuki y noté que se había quedado dormida en el sofá.

-Creo que no podemos, alguien llegó a su limite de energía-

-Tienes razón- Alcé a la castaña y la llevé a su habitación.

-¿Quieres algo de te?- Le escuché decir al ojimiel cuando salí del cuarto.

-Es de mala educación utilizar la cocina de alguien mas sin permiso-

-Je, lo siento- Se disculpó mientras servía el líquido. -¿Y Misaki?-

-Dijo que tenía que hacer unas cosas en el banco- Respondí llevando la taza a mis labios para tomar un sorbo. -Auch- Puse el recipiente en la mesa y dirigí mi mano a la herida.

-¿Pasa algo?- Takano se acercó a mi y revisó el lugar lastimado. -Parece que bajaste la guardia un poco, ese tipo logró cortarte el labio, ¿Tienes un botiquín?-

-Si, descuida lo haré yo-

-Sientate en el sofá y eleva la cabeza un poco- Ordenó frunciendo un poco el ceño.

-Como quiera el señor- Bromeé un poco e hice lo que dijo.

Luego de unos segundos se acercó a mi con un trozo de algodón levemente sumergido en desinfectante y lo pasó por mi herida.

-Bien, creo que con eso es suficiente-  Anuncié alejando su mano.

-...Oye Onodera... Se que es algo oportuno, pero, me gustaría saber la respuesta a mi confesión-

-¿Como pregunta eso tan tranquilamente en un momento como este?-

-Es solo que quiero saber lo que piensas sobre mi-

-¿Lo que pienso acerca de usted?... Pues al principio no me caía ni un poco bien-

-¿Y ahora?-

-No lo se...-

-...Onodera- 

-No, espere-




Holus flowers tengo sueño (A nadie le importa pendeja) Bien, espero les haya gustado, gracias por leer y demás, los quiero...


















No Volveré A CaerDonde viven las historias. Descúbrelo ahora