Trece

22.2K 2.4K 386
                                    

Esto no esta pasando, esto no esta pasando ¡Esto no esta pasando! Justo cuando pienso que las cosas estan bien tiene que aparecer alguien y joderme el buen momento. Y lo peor de todo es que colmillos esta aquí y no hay escapatoría, a menos que...

Como si  me leyera la mente, mi pequeño vampiro sale disparado y se mete al clóset justo cuando la puerta se abre del todo.

—Que bueno que ya estas despierto —Maldito Brooks estoy a nada de matarlo de verdad, es tan inoportuno. —Te traía esto.

Sin dejar de sonreir me estira la mano para entregarme una caja. El teléfono que me había prometido ayer, ahora es un poco demasiado tarde diría yo.

—Gracias...

—Pensaba dártelo ayer por la noche , pero tu padre estaba de lo más insoportable así que no me dio ni un minuto de descanso.

—Me lo imagino y de verdad gracias por traerlo. — aunque lo que realmente quiero decirle es que se vaya de una vez por todas porque cada segundo que pasa aquí aumenta el peligro.

—De nada...ah por cierto, Jenna me pidió que te avisara que el desayuno esta listo así que puedes bajar — me observa por un momento. —o tal vez prefieras comer aquí.

—Me quedaré aquí.

—Bien, entonces enviaré a alguien que te suba la comida.

—De acuerdo.

Se da la vuelta y empieza a caminar para irse por fin y estoy a nada de soltar un suspiro de alivio cuando se detiene. Se gira hacía mi nuevamente y entrecierra los ojos, trato de no lucir incómodo o nervioso pero no esta funcionando. Se que he cometido un error cuando mis ojos viajan hacía la puerta del closet.

Brooks sigue mi mirada y adopta un semblante cauteloso.

—¿Tienes algo en clóset? — pregunta tranquilamente.

—No.

—¿Enserio? Porque persivo un aroma extaño viníendo de ahí.

—Son imaginaciones tuyas, ahí no hay más que ropa y zapatos.

Arquea una ceja dándome a entender que no me cree del todo. Solo quiero que se vaya y no vuelva en un buen rato, maldición esto es demasiado.

—Okey, entonces me voy...

Un estornudo proveniente del closet nos paraliza a los dos. ¡¿Es jodidamente en serio?! Hablando de ser inoportunos, colmillos se lleva el premio.

—¿Qué fue eso? —Brooks da un paso al frente y yo lo imito, tratamdo de no lucir tan alterado, aunque a estas alturas supongo que es inútil.

—Nada, ahora porque no te vas...—sonrio para quitarle un poco de frialdad a mis palabras.

—Es que te juro que escuché algo.

—Ya te lo dijé, fue tu imaginación.

Otro estornudo desbarata por completo mi intento de mentira.

—¿Vas a seguir negándolo?

Y antes de que pueda decir o hacer nada abre el clóset dándole un tirón a la puerta. Ahí en medio de mis camisas que cuelgan de las perchas esta colmillos, y por si las cosas no fueran suficientemente malas...

—Vampiro...—Sisea Brooks y todo su semblante cambía a uno de ataque, sus ojos resplandecen en color amarillo y tanto sus garras como sus caninos hacen acto de aparición.

—Calmate—le digo caminando lentamente para que sepa que no quiero pelea, al menos aún no. — Él no es una amenaza.

—Eso lo decido yo. —avanza otro paso provocando que Levka entre en un modo de ataque también. Sus ojos tornándose azules y sus puntiagudos colmillos sobresaliendo.

Lunas opuestas.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora