SEDUCCIÓN

CAPITULO 24

-Muchas Felicidades.

Escondió su rostro en el cuello albino, la piel se le erizo al escuchar esa voz tan suave como la seda.

-Esperamos que seas feliz.

Le hubiese gustado tanto mantenerse oculto en ese lugar, pero Sasuke estaba tenso como una cuerda entre sus brazos, necesitaba sacarlo de ahí inmediatamente.

-Haku, Zabuza gracias ¿Ya ha pasado algo de tiempo?

Fue imposible no notar el collar de cuero delgado que abrazaba el cuello de Zabuza, sus ojos lo veían directamente sin ocultar nada, tan sereno y pacifico como una vez él había mirado a la gente, en cambio Haku se mostraba tan seguro de sí mismo, su mirada dulce no demostraba absolutamente nada de la gran fiera que se escondía en ese cuerpo pequeño y menudo, su mano tenía la habilidad de doblegar a través del placer y del dolor, si no lo sabría él.

-Mucho gusto Sasuke.

Fue un acto reflejo imposible de contener apretó a Sasuke contra su cuerpo recibiendo de parte de Haku una mirada severa, respiro profundo tenía que calmarse, él estaba con Sasuke, él no estaba con Haku, él no estaba siguiendo las reglas de nadie más que las suyas.

-Sasuke te presento a Haku y su esposo Zabuza, son viejos amigos míos.

Sasuke estaba aún más pálido que antes, necesitaba sacarlo de ahí rápido.

-Encantado.

Miro atentamente sus movimientos, Sasuke le tendió la mano a Haku quien lo miro sin ningún reparo, sus ojos se iluminaron en señal de aprobación, nunca olvidaría esa mirada.

Sin embargo, su mirada se volvió fría cuando Sasuke tendió su maño en dirección de Zabuza, se quedó congelado al escuchar las palabras del hombre frente a ellos.

-¿Puedo?- Pregunto Zabuza con la frente en alto y la mirada abajo con sumisión.

-Que es lo que...

-Suficiente Haku, él no está en tu liga- Le dijo sin dejarlo continuar.

No se atrevió a mirar a Sasuke cuando este lo taladro con la mirada, Dios ¿Por qué justo en este momento tenía que encontrarse con ello?

-Puedes hacerlo, como es correcto.

-No Haku.

Trato de evitarlo, pero era demasiado tarde, el hombre musculoso y alto ya se había dejado caer de rodillas, sus manos sujetaban la de Sasuke, su sangre estallo en fuego al verlo frotar su mejilla contra la palma suave de su doncel para después dejar un sonoro beso en sus nudillos.

Desgraciado, se había puesto de pie como si nada hubiera ocurrido, los labios de Haku se desfiguraron en una sonrisa satisfecha, no escucho ni una palabra más antes de salir de ahí arrastrando a Sasuke con él, dejando atrás los murmullos de las personas que se habían quedado estáticos y los flashes de las cámaras, estúpido Haku, gracias a su falta de pudor había dado pie para que los reporteros y las personas comprobaran que los rumores acerca de sus viejos hábitos sexuales era ciertos.

Una vez que el aire le dio de lleno en el rostro se froto las cienes tratando de aliviar el dolor de cabeza que comenzaba a torturarle.

-¿Practican el... BDSM?

-Sí.

Era increíble que Sasuke le estuviera preguntando eso como si realmente lo entendiera.

-¿Tu hiciste algo de eso con Haku?