Minecraft

Un dia en la playa

Castillo Creeper–dormitorio de huéspedes–Steve.

POV-Steve.

Ya había despertado y me sentía deprimido ya que no pude hacerle nada al padre de Cupa con lo cual ella se tendrá que casar con ese tipo Zombie me siento un idiota.

Escuche que se abría la puerta y alguien me hablo.

–¡¡Steveee!!– escuche el grito de algunas personas.

No alcance a verlas ya que se lanzaron a mi adarme un abrazo.

—Steve pensé que era tu fin— dijo la chica gato.

—Si estábamos muy preocupadas— dijo la irongolem.

—Pero lo bueno es que ya estas mejor— finalizo la pelinaranja.

Por mi parte solo tenia la mirada baja y apretando mis puños con fuerza.

—¿Steve que pasa?— me pregunto Mei.

—No volveremos a ver a Cupa gracias a que soy débil— cada palabra era como si me fuera rompiendo en pedazos.

Un silencio incomodo se formo en la habitación asta que Cupa rompió ese silencio.

—No note preocupes… hiciste todo lo posible y e-eso es lo-lo q-qu-e importa— Cupa dijo con la voz quebrada y llorando.

Todas empezaron a llorar ya que aunque fueran rivales en el amor habían formado una amistada. El llanto se detuvo al escuchar el sonido de la puerta abriéndose y dejando ver al padre y la madre de Cupa.

—Chicas… ¿podrían dejarnos hablar con Steve-kun?— pregunto la madre de Cupa.

Todas salieron de la habitación dejando me con los padres.

—Se a lo que vienen no necesitan decírmelo, señor Creeper ¿que es lo que hará con migo?— pregunte ya sin temer por mi vida.

—Descuida hijo nadie va a hacerte nada— me calmo la reina… pero ella me dijo "¿hijo?".

—Mi esposa me convenció de que no te torturado y te echara a los cerdos— dijo el Rey con un enojo lo que ocasiono una mirada asesina por parte de la reina.

—¿Entonces?— pregunte ya que me confundían cada vez mas.

—Hemos decidido que tu seras el que se casara con nuestra hija— confirmó la madre de Cupa.

—¿¡Queeeee!?— pregunte impresionado.

—Yo también aun no lo puedo creer pero no se porque nuestra hija se intereso en ti— dijo el rey a lo cual se gano una mirada de furia por parte de la reina.

—Perdón… pero no podre casarme con su hija— dije algo apenado.

—¿Que? ¿Porque?— preguntaron los adultos.

—Lo que pasa es que si me caso con su hija las demás se pondrán tristes… saben yo quiero a todas por igual pero no podría elegir entre una de ellas— les confesé lo que ocasiono una sonrisa en la cara del rey y por parte de la reina una mirada confusa que cambio por una sonrisa.

—Respeto tu decisión y te propongo un trato— propuso la reina.

—¿Que clase de trato?— pregunte inclinando la cabeza para un lado.

—El trato consta de que si te casas con mi hija podrás tener tu harem ya que podrás hacer que la poligamia no afecte al rey— me confirmó la reina.

—¡Enserio!— dije sorprendido.

—Yo tampoco lo logro comprender con toda totalidad… pero no puedo oponerme a la reina— el rey dijo esto ultimo con un tono de miedo provocado por su esposa.