Emilia VI
Los sentimientos son la fuerza que nos impulsa, tanto para el bien como para el mal. La vida es una lucha de sentimientos. El amor es uno de los mas fuertes y hermosos, pero su contra cara puede ser muy destructiva; el odio es el veneno de la vida. La solución al odio es el perdón, pero un perdón completo. Tal vez no compartan mi forma de pensar en base al perdón, pero quiero compartirlo con ustedes.
Instruciones para el perdón en tres difíciles pasos
1) PEDIR PERDÓN: pedir perdón requiere de un acto de valentía inmensa. Detrás del perdón sincerobse esconde el amor que muchas veces es perturbado, generando que hagamos cosas malas. Animarnos a pedir perdón es igual a dejar nuestro orgullo de lado, destruir nuestro propio ego y entregar nuestro ser a la otra persona que decidirá si perdonarnos o no. Es dejarnos expuestos, desnudos y desprotegidos; aun asi uno es capaz de hacerlo solo por el hecho de querer volver a recuperar algo que lastimamos.
ADVERTENCIA: Muchas veces nos pueden pedir perdón y volver a fallarnos. Queda en cada uno si brindar otra oportunidad o no. Algunas personas nunca cambian. Al perdir perdón, la otra persona no tiene la obligación de perdonarnos.
2) PERDONAR: En este desafío del perdón hay dos actores, primero el que nos pide perdón y segundo el que tiene el poder de perdonar; pero en este nivel del perdonar podemos encontrar dos tipos.
A) Perdonar para seguir construyendo la relación: Perdonar es arriesgarse, perdonar es aceptar un nuevo comienzo, perdonar es deshacer (lo más que podamos) del dolor causado y sobre todo poder reunir confianza nuevamente. En este tipo de perdonar, brindamos segundas oportunidades.
B) Perdonar y dejar atrás: al igual que el otro, uno de los objetivos es deshacer de esa carga, ese dolor que sentimos por el daño que nos hizo aquella persona que nos pide perdón. Pero en este caso, perdonar es igual a dejar atrás. Es muy difícil lograr este perdonar, porque requiere de mucho coraje dejar de lado a alguien que en algún momento nos hizo bien.
IMPORTANTE: Perdonar no garantiza confianza. Perdonar de verdad es dejar aquel daño sepultado. Perdonar es arriesgarse y volver a construir el vinculo o cerrarlo de buena manera, sin rencores. Antes de perdonar pensar dos veces.
3) PERDONARNOS: Si creían que pedir perdón y perdonar es difícil, creo que este es el punto mas complicado del Perdón; perdonarnos a nosotros mismos. Cada vez que hacemos daño, queda dentro nuestro un poco de ese monstruo que nos llevó a lastimar; la culpa eterna.
Vivir con culpa es no vivir, es detenernos en el tiempo y no avanzar. Perdonarnos a nosotros mismos requiere de real amor por uno y por el otro. Significa tener el poder y voluntad para seguir adelante a pesar de los errores cometidos. Es muy difícil lograr perdonarnos de verdad.
¿Cómo saber si debemos perdonarnos a nosotros mismos?
• Si cada vez que sale el tema de aquello que lastimó a quien queríamos y nos sentimos incomodos; debes perdonarte.
• Si pensas que tal vez podrías volver a cometer el mismo error. Debes perdonarte.
• Si al estar con la persona que en su momento lastimamos seguis sintiendo culpa. Debes perdonarte.
• Si tenes miedo de que la otra persona pueda hacerte daño como vos lo hiciste, debes perdonarte.
AVISO: Por mas que sepamos estas instrucciones no garantiza que podamos realizar un perdón de manera completa.
PELIGRO: Puede fallar.
Y sepan que este ultimo "Aviso" y "Peligro", es algo que sé con exactitud después de esta tarde.
—Emilia, necesito que te fijes unos mails que me mandaron los proveedores de bebidas!!! —dijo mamá.
—¿Es urgente? —pregunté.
—Sí, muy urgente. Tienen la factura de lo que tengo que pagar para el mes próximo. Y quiero imprimirla para pagar ahora y ya quedarme tranquila. ¿Te podes fijar?
—Si ahora en un rato me fijo. Estoy terminando La tarea.
—No Emilia. Lo necesito ahora!! —todo esto era a los gritos, mi mamá desde el living y yo desde mi cuarto en el primer piso.
—Bancá cinco minutos Ma!! —fue el error mas grande que había cometido. Cuando me di cuenta de lo que podía pasar, ya era demasiado tarde.
Bajé corriendo las escaleras, al llegar al living mi mamá no estaba y la notebook tampoco. Corrí al comedor y tampoco estaban allí.
—Mamá!! ¿Dónde estas? —no me respondió.
Al llegar al bar, ahí estaba. Sentada en una silla con la notebook sobre una de las mesas. Tenia puesto los anteojos y una mirada que jamas había visto. Estaba furiosa, sorprendida y asustada. No necesite acercarme demasiado para darme cuenta que aquello que estaba viendo, era el archivo con la lista de nombres de aquellos hombres que se llamaban igual a mi papá. Ella bajaba y bajaba por la lista y luego entró a internet.
Descubrió el perfil falso de Facebook y vio las búsquedas de personas. Se dio cuenta de los mensajes que había mandado a varios perfiles de hombres. Ella lloró, pero no con tristeza, lloró con rabia; y a unos metros de ella estaba parada yo. Estaba mirando, veía a mi mamá furioso y dolorida; entonces no me pude contener y también comencé a llorar.
—¿Qué querías lograr? —dijo con la voz quebrada, podía sentir su dolor, su bronca—. Te hice una pregunta —cerró la notebook de un golpe.
—Perdón, Mamá. Yo solo...
—¿Perdón? ¿Por qué? Acaso, esto es una mierda. Todo esto, el bar, la casa, esta computadora, las sillas —tiró una silla al suelo con sus manos—, ¿Todo esto es una mierda?
—Por favor no... —estaba muy furiosa, se le marcaba la vena en la frente y en el cuello. Tuve miedo.
—Todo fue por vos!!! Mi vida por vos!! El bar, todo esto, mis manos, mi esfuerzo; todo pero absolutamente todo, para darte lo mejor. ¿Pero no basta? ¿No es suficiente? —se dirigió a la barra y se apoyó sobre ella.
—Yo, no quería...
—¿Y si no querías para qué lo hiciste? ¿Cómo? ¿Cuándo? ¿Revisaste mis cosas no? Respóndeme!!
—Sí.. —salió rápido. Entró a la casa y yo me quedé llorando en el nar, inmovilizada. Al rato volvió. Regresó con la caja de donde había sacado la fotografía y los datos de mi papá.
—¿De acá no? —dejando la caja sobre la barra. Luego fue y se sirvió un vaso de ron, para finalmente beberlo entero—, esto no es nada, no sirve; es basura —dijo tomando el sobre de la carta que tenia el nombre de mi papá y rompiéndolo.
—No, ¿Por qué? —me sentía muy mal, jamas había llorado tanto.
—Esta foto, también es basura. Tu papá es una basura. Nos dejó y jamas quiso volver. No creas que soy un monstruo. Yo también pensé que tal vez algún día volvería, estaba dispuesta a perdonarlo. Pero no fue así, él se fue y jamas volvió. Porque es una basura.
—Pero tal vez ahora es distinto —dije mientras me abrazaba a mi misma y no paraba de llorar.
—Emilia!! Entendelo, tu papá nunca nos quiso, incluso ahora todo esto es por él —de a poco iba bajando su enojo. Se quedó unos minutos en silencio para tranquilizarse. Una vez calmada se acercó a mi, yo también me había calmado un poco—, es momento de que olvides, de que entiendas que yo soy lo que tenés y sé que no soy perfecta, que tengo un carácter de mierda y soy media loca. Pero yo te amo y es así —me abrazó. Me quedé unos segundos rodeada por sus brazos.
—No quiero.
—¿Qué cosa?
—No quiero quedarme sólo con esto. Yo necesitó encontrarlo, enfrentarlo y si me rechaza esta bien, pero habrá sido él quien me lo dijo —me solté y sin mas, salí corriendo del bar.
Tener mis instrucciónes sobre el perdón, no me sirvió de mucho en esta ocasión. Mi mamá me pidió perdón a su manera y no quise aceptarlo, yo le pedí perdón por lo que había hecho, aunque en realidad no lo sentía y tampoco puedo perdonarme haberle hecho mal, fui egoísta. Pero sé que mi mamá es mi mamá. Ahora solo pienso que me comporté como una estúpida con alguien que no lo merecía y debo ir a pedirle perdón; Emanuel espero que no sea tarde.
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Éramos Especiales (COMPLETA Y EDITADA)
Подростковая литература¿Qué pasaría si unimos en un mismo grupo de WhatsApp a un conjunto de adolescentes que no se conocen en absoluto y tienen problemáticas distintas? Lucas es un chico alegre, extrovertido, positivo e inteligente; es el ideal de lo que cualquier padr...