[One-shot: Riku] Quería volver a verte

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Hace un tiempo fui traída contra mi voluntad a Islas Destino por mi padre y su novia; ellos querían empezar una nueva vida lejos de Villa Crepúsculo junto con los hijos –pequeños- de ella, Liz y Matthew, y conmigo. Yo sabía que si veníamos aquí estaría lejos de mis amigos y estaría aislada de todo lo demás. Intenté convencer a mi padre de que no nos fuéramos, diciéndole que en Villa Crepúsculo estábamos bien, que no teníamos porqué comenzar una vida nueva tan lejos, o que si tanto deseaban una nueva vida que me dejasen quedarme en Villa Crepúsculo por mi cuenta; pero no sirvió de nada.

Llegamos a Islas Destino sobre las 16:40h, en una barca. A penas llevábamos equipaje, sólo una bolsa de mano con lo necesario; según mi padre, no necesitábamos nada más que lo necesario.


Cuando bajé de la barca, al principio no me di cuenta (ya que iba discutiendo con mi padre en voz -muy- alta) pero había dos chicos que estaban pendientes de nosotros cuatro.

-¡Quiero volver a casa! –exclamé.

-Ya te lo he dicho, ahora este sitio es nuestro hogar –dijo mi padre dándome la espalda mientras iba caminando hacia la dirección de nuestra nueva casa.

-¡No, este sitio no será mi nuevo hogar! ¡Me niego! –dije enfadada.

Mi padre se paró en seco y se giró hacia mí.

-________, no quiero seguir discutiendo. Tengamos la fiesta en paz –me dijo él queriendo ponerle fin a nuestra discusión.

-No, no pararé hasta que me escuches –dije-. Siempre he de obedecer todo lo que dices y no pienso seguir de esta manera por más tiempo. Por tu decisión he perdido mi rutina, a mis amigos. ¡Lo he perdido todo! –exclamé.

[PAF]

Me llevé la mano a la mejilla, la cual se había puesto roja y me ardía.

-Compórtate como una chica de tu edad, tienes dieciséis años. Deja de quejarte y acepta que éste, es ahora nuestro hogar –me dijo con seriedad mi padre.


Se hizo un silencio espeso. Una gran carga se cernía sobre mi corazón en ese momento, junto con la amargura de saber que no había nada que pudiera hacer para evitar lo que estaba pasando.

-Nuestra casa está en esta dirección de la isla –dijo él entregándome un papel con una dirección escrita en él-. Ven cuando te hayas calmado.

Ellos (mi padre, su novia y los hijos de ésta) se fueron en dirección a nuestra nueva casa. Con la mano aún en la mejilla y la cabeza levemente agachada, comencé a llorar de la injusticia y rabia que sentía.


Unos pasos comenzaron a escucharse cada vez más cercanos a mi posición, pero como pensaba que pasarían de largo no hice ni caso. Pero, entonces...

-¿Estás bien? –me preguntó una voz masculina con algo de preocupación.

Me sequé las lágrimas con rapidez y miré en dirección a la voz. A mi lado se encontraban dos chicos, uno parecía más mayor –y era más alto- que el otro. El chico que me había preguntado tenía el pelo de color castaño y disparado hacia los lados, de ojos azules como el mar y ropas de color rojo, blanco y negro; una de las cosas que me llamó la atención de él fue el colgante que llevaba, el colgante era plateado y en forma de corona. El otro chico, el que era más alto, tenía el pelo algo más largo que el primero, de color grisáceo, y ojos turquesas. Vestía con colores negros, amarillos y azules.

-...No –respondí.

-¿Por qué estabas tan cabreada antes? –me preguntó el de pelo moreno.

One-shots de Kingdom Hearts [Posibles fanfics]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora