One-shots de Kingdom Hearts [Posibles fanfics]

[One-shot: Roxas] Cuando te vayas...

La luz del sol se filtraba entre las delgadas cortinas que tapaban parcialmente la ventana de mi habitación. Abrí los ojos y parpadeé un poco para humedecerlos. Luego me incorporé en la cama y miré al frente. 

Me levanté de mi cama pensando "Hoy será un buen día".  Me dirigí a la ventana y aparté las cortinas para que la luz iluminara toda mi habitación. 

Estábamos a finales de verano, lo cual me agobiaba un poco ya que dentro de poco deberíamos volver al instituto y a la rutina de ir al colegio>estudiar>hacer deberes>y volver a empezar al día siguiente de nuevo la rutina. ¡Debía aprovechar al máximo lo poco que quedaba de verano!

Cogí la ropa que me había dejado preparada el día anterior sobre el escritorio y me vestí. El conjunto consistía en una camiseta de color violeta, unos pantalones cortos negros y unas botas que me llegaban por debajo de las rodillas de color marrón.

-¡_____, baja a desayunar! -dijo mi madre desde el piso de abajo. 

-¡Ya vooy! -exclamé alto para que pudiera oírme.

Antes de salir de la habitación abrí las ventanas de par en par para airear un poco el cuarto. 

Salí de mi habitación, y nada más hacerlo pude oler un delicioso aroma proveniente de la cocina. Bajé escaleras, en dirección a la cocina. 

-Buenos días, cielo -dijo mi madre al verme entrar a la cocina. 

-Buenos días -dije mientras me sentaba a la mesa. 

Mi madre se giró hacia a mi y dejó sobre la mesa un gran plato de tortitas con sirope. 

-¡Qué buena pinta! -exclamé mirándolas con ojos golosos. 

-Aprovecha que cuando empieces el instituto de nuevo los desayunos serán más normalitos -dijo mi madre señalando las tortitas con la paleta de madera que sostenía en su mano derecha.

-Lo sé -dije y comencé a poner en mi plato un par de tortitas. 

Comencé a desayunar con tranquilidad y a disfrutar cada bocado de las tortitas. ¡Estaban tan buenas! 

-¿Y qué harás hoy, cielo? -me preguntó mi madre sentándose también a desayunar. 

-He quedado con la pandilla para ir a dar una vuelta por ahí -dije. 

-¿Y dónde es "por ahí"? -preguntó curiosa mi madre.

-Pues ya sabes, por la ciudad -dije. 

Terminé de desayunar y me levanté de la mesa. 

-Bueno, mamá, yo ya me voy. Nos vemos luego -dije despidiéndome de ella y saliendo de la cocina.

-Espera, ¿a qué hora volverás? -me preguntó ella. 

-No sé, por la tarde -contesté abriendo la puerta principal de la casa-. Luego nos vemos -dije y salí de casa. 

Me paré delante de la puerta de mi casa y miré al frente, hacia el cielo. Hacía un aire fresco y agradable. 

-Sí, hoy va a ser un buen día -me dije a mi misma mientras me retiraba el flequillo y lo ponía detrás de la oreja. 

Había quedado en nuestro lugar de siempre con Roxas, Hayner, Olette y Pence, es decir, la pandilla. 

Mientras iba de camino hacia nuestro lugar de siempre me topé con Seifer, el cual se puso delante de mi, impidiéndome continuar. 

-¿A dónde vas, ______? -me preguntó él, a pesar de imaginarse a dónde iba.