One-shots de Kingdom Hearts [Posibles fanfics]

[One-shot: Kairi] El rosa es mi color.

[ACLARACIÓN: ESTE ES UN ONE-SHOT GIRLXGIRL]

Kairi y yo nos conocíamos de toda la vida y, a pesar de que en la isla había otras chicas, nosotras siempre habíamos sido mejores amigas, y rara vez nos relacionábamos con ellas. 

Hace mucho tiempo, cuando teníamos catorce años, hubo una gran tormenta que azotó nuestra isla natal y ella junto con Sora y Riku desaparecieron. Nadie supo nada de ellos en semanas, pero un día, de la nada, ella regresó. No quiso contarle a nadie donde estuvo ni qué le pasó, eso sólo me lo confió a mí; me contó cosas fantasiosas que nadie creería verdades, pero yo sí, siempre la creía en todo lo que decía. 

Pasó el tiempo y ella empezó a olvidar esas descabelladas y mágicas aventuras, y comenzó a centrarse más en los estudios. No es que me pareciera mal, pero me parecía extraño...

Pero no pasó más de un año, sucedió a principios de verano, cuando otro extraño suceso azotó la isla que fue lo que dio comienzo a todas nuestras aventuras juntas. Juntas atravesamos portales, conocimos gente nueva y aprendimos habilidades inimaginables, y todo ello para salvar a nuestros mejores amigos, Riku y Sora. ¡Y lo conseguimos! 

Gracias a ello, los cuatro compartimos un secreto muy especial, que hace que estemos más unidos ahora que nunca. 

No me equivocaría si dijera con toda la seguridad del mundo que a partir de eso, Kairi y yo creamos un gran vínculo muy fuerte; así sé con plena seguridad que a partir de ahora, donde ella vaya, yo también iré. 

Hace unos pocos días, nos llegó un mensaje en una botella del Rey Mickey anunciando que pronto necesitaría nuestra ayuda para derrotar al mal una vez más, pero que de momento teníamos tiempo para relajarnos y descansar hasta nuestra futura aventura. La verdad es que aunque parezca raro, agradezco esa pequeña tregua de dos meses que nos ha dado el Rey Mickey para que hagamos "vida normal". No es que no disfrutara de vivir aquellas alucinantes aventuras (¡que lo hice!), pero echaba de menos nuestro hogar.

Así que los días pasaban sin demora y se empezaban a volver demasiado corrientes. Por lo que una de las tardes decidí quedar con Kairi para ir a la playa, pero ella me dijo que no podía porque tenía "otros asuntos que atender". 

-Oh, entiendo -dije algo extrañada. 

Así que esa tarde decidí ir por mi cuenta a la playa a darme un baño. Iba con mi biquini rosa chicle puesto y un pareo atado alrededor de la cintura; y para evitar cualquier insolación a causa del sol, me puse un sombrero de paja que tenía un lazo a juego con el pareo. 

Antes de meterme en el agua, comencé a caminar descalza por la playa; ésa era una sensación que me encantaba. 

El aire soplaba fresquillo, lo cuál era de agradecer, y en el ambiente se notaba una agradable tranquilidad.

Caminando por la playa mi pie tocó algo que, al agacharme a ver bien qué era, descubrí que se trataba de una concha. Agarré la concha y empecé a buscar más.

-Podría hacer un collar para Kairi y otro para mí si encontrar conchas parecidas... -me dije a mi misma, algo entusiasmada ante la idea.

Mientras recogía un par de conchas que parecían iguales escuché a lo lejos voces. 

-¿Mmm? Parece la voz de Kairi... -pensé mientras me levantaba y miraba en dirección a la voz.

Pero al hacerlo me topé con una desgarradora escena. Kairi estaba agarrando de la mano a Sora mientras veían el atardecer.

-Así que ésos eran los asuntos que debía atender... ¿Por qué no me lo dijo desde el principio? -pensé dolida.

Me miré la mano donde sujetaba las rosadas conchas gemelas y las tiré al suelo, molesta.