Me fue difícil dormir esa noche, tenía pesadillas, y, ¿cuando no?.No quise dormir, levantándome y quedándome toda la noche en el ordenador; buscando y buscando. Tenía que encontrar algo.
Una pequeña parte de mi quería dejarlo, pero algo me decía que siguiera.
Me fui a quinientas páginas, y a miles de redes sociales, buscando algo, intentándolo por lo menos.
Pero inútil, era la palabra, rectifico; la única palabra que era la correcta.
Me puse el pantalón largo claro y mi sudadera favorita, quería estar cómoda.
Reanude el paso cuando dos de mis compañeros chocaron conmigo, haciendo que se me cayeran todos los libros: eran puras réplicas de Shawn, cazadoras negras y camiseta de tirantes blanca.
Pero no me interesaba esta vez.
Me uní a la conversación de Shadow, Marcus y All; hablaban de mascotas, no sé porque.
—Less, tenemos que comentarte algo.—Se puso recto mi querido amigo Black y se miraron.
—Disparad.—Levante las manos, dispuesta a que me dijeran lo que fuera.
—¿Porque fuiste ayer a la pelea? Podíamos a ver ido contigo.—Les mire, y entrecerré los ojos.
—Por que se que no lo entenderíais.
—Entender, ¿qué, Less?.—Rode los ojos.
—Quiero averiguar algo.—Suspire.
—Y espero que sepas que puedes confiar en nosotros; e incluso te podemos ayudar.—Habló Shadow, pero no, no quería su ayuda.
—Gracias, pero si me vuelvo loca, ya os llamaré.—Les sonreí, y estos no muy convencidos también, zanjando el tema.
~.~
Era ya por la tarde, y Shadow me llamo para irnos a tomar algo, yo acepté y ahora mismo la estaba esperando en la cafetería, en la misma que la de Shawn...
—Lessita.—Mire hacia atrás y la abracé.
—Hola, Shadow Hunter.—Rodó los ojos.
—Tengo que contarte tantas cosas.—Se puso roja al instante. Y me lleve las manos a la boca.
—¡No!.—Se empezó a reír.—¿Cuándo?.
—Cuándo me llevó a mi casa el otro día.
—¡Dios! ¡Cuánto me alegro Sha!.—Le dije levantándome y achuchándola.
—Ha sido tan bueno conmigo, Less...
—Ya me imagino, es un buen partido. Y por supuesto, mi mejor amigo.—Me sonrió y me senté.
—Gracias, Less. No se que hubiera hecho sin ti; sin vosotros.—Le sonreí.
—Ha sido un placer conocerte Sha.
Nos reímos un rato, contándonos cosas hasta que se puso tensa.
—La cucaracha está aquí; y viene acompañado de la alcahueta.—Rode los ojos.
—¿Quieres algo de beber?.—Me levante y esta abrió los ojos y negó frenéticamente.
—No seas así, Less.
—¿Capuchino con nata?.—Afirmé y me encaminé hasta la barra, donde estaban ellos.
Había dos que atendían y le puse mi mejor sonrisa al que me atendía a mi.
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HURACÁN © Shawn Mendes. EN EDICIÓN
AcciónSus puños eran como acero. Cada golpe que daba, todo se movía a su alrededor, tan demoledor. El no paraba de destruir, hasta que ella llego de una manera tan demoledora y abrumadora que tuvo que controlar sus impulsos. Peleas y más peleas. Ella sol...