Underground Prison

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-¿T-Taemin? ¿Ocurrió algo malo?-Le preguntó despacito, el pelirrojo seguía con la misma expresión de horror y tristeza en su semblante.

-N-no... no puede ser...-Fue lo último que dijo antes de romper en llanto, Bae se asustó y sin pensarlo dos veces lo abrazó con fuerza, abrazo que fue correspondido por el menor, cual sea que fuera la noticia que recibió Taemin definitivamente no era buena.

-Tranquilo Taemin, cálmate.-Trató de consolarlo mientras lo abraza y acariciaba lentamente sus rojos cabellos.-Respirar hondo y dime qué te ocurrió.-Le comentó mientras esperaba a que su compañero de celda parara de llorar y de respirar entrecortadamente.

Luego de algunos minutos por fin el pelirrojo logró detener su llanto y comenzó a respirar regularmente otra vez, se despegó lentamente del abrazo de Bae y luego lo miró a los ojos, sus ojos cafés estaban rojos y un tanto hinchados.

-¿Qué ocurrió Taeminnie?-Le cuestionó nuevamente, el otro aspiró una gran bocanada de aire y luego procedió a contarle lo que leyó en esa carta a su amigo.

-Mi madre está gravemente enferma.-Comentó, los ojos marrones del otro se abrieron de la sorpresa.

-¿Qué le ocurre?-Preguntó mientras colocaba la mano sobre el hombro del otro reo.

-Cuando mi padre murió en un accidente mi madre se deprimió y comenzó a tomar grandes cantidades de alcohol, debido a eso y sumado a que posee una hipertensión arterial muy elevada y muchos antecedentes familiares con una enfermedad en específica, ella desarrolló diabetes, estuvo muy mal durante aquel entonces, dejó el alcohol porque mis hermanitos Eunji, Hea y yo se lo rogamos. Desde hace años se inyecta insulina para mantener su enfermedad estable. Sin embargo con el tema de mi encarcelación mi madre se deprimió tanto que comenzó a beber alcohol en exceso nuevamente. Su enfermedad se descontroló y ahora se encuentra hospitalizada, para colmo no puede trabajar y ella es la única entrada financiera en mi hogar, debido a esto mis dos hermanitos ahora están viviendo en la casa de Hyun Bin, mi mejor amigo de la infancia. Quien fue el que escribió la carta.-Taemin se agarró fuertemente de los cabellos.-Y eso no es lo peor, lo más catastrófico de todo es que al no haber dinero, a mi madre no le pueden tratar de forma correcta su enfermedad, lo que ella necesita es una bomba de insulina, pero su costo es muy elevado y ni hablar de su mantenimiento mensual, no sé qué hacer, me siento tan inútil aquí encerrado y ella allá afuera sufriendo.-Nuevamente rompió en llanto y Bae lo abrazó con más fuerza. Él se sentía igual de inservible, el castaño perfectamente sabía lo que era perder a tus dos padres y Taemin ya perdió a uno, no quería que perdiera también a su madre, sin embargo allí dentro nada podían hacer más que esperar.

-Sé que duele Taemin, yo también perdí a mis dos padres hace años, pero debes tranquilizarte, llorando no lograrás que nada se solucione.-Le decía mientras acariciaba sus cabellos con suavidad, al verlo llorar así se veía a él mismo hace años llorando delante de los cadáveres de sus padres. Era como revivir el pasado.

-¡Lo sé Bae! Pero al menos logro desahogarme.-Se justificó y trató de detener su llanto con mucho esfuerzo.

-Tranquilo Taeminnie, encontrarán una solución, tiene hay una solución.-Le decía para tratar de calmarlo aunque ni él mismo estaba seguro de lo que afirmaba, el pelirrojo sólo sonrió melancólico, sabía que no le estaba diciendo la verdad, pero aun así lo agradecía puesto que Bae se estaba esforzando por tratar de animarlo.

-Gracias Bae, enserio. ¿Pero sabes? Ahora más que nunca estoy maldiciendo a ese hijo de puta de Young, si no fuera por él yo ahora mismo estaría cuidando de mi madre y trabajando en algún lugar para ganar dinero y así comprar esa maldita bomba de insulina que tanto necesita.-Le comentó al castaño y éste simplemente asintió con la cabeza mientras colocaba la mano sobre el hombre del pelirrojo, apoyándolo en silencio.