Te removiste bajo las sábanas sintiendo la cálida sensación del sol. Su gran mano acarició tu espalda desnuda llegando hasta tu cintura, haciéndote estremecer.
-Buenos días.-Sonreíste quedando frente a él.
-Buenos días princesa.-Respondió sonriente.
Pegó su frente a la tuya y rozó vuestras narices. Tu mano fue a su torso descubierto y dibujó figuras abstractas durante unos minutos.
-Me encanta estar así.-Soltaste en un susurro.
-¿Así cómo?-Preguntó sobre tus labios.
-Lo sabes idiota.-Contestaste sonriente para, seguidamente, unir vuestros labios.-Pero... Cuando estás así de cariñoso es que algo quieres.
-Pues la verdad es que sí que quiero algo.-Dijo riendo suavemente.
-Pues di.-Reíste.
-Quiero ir de viaje.
-¿Qué?-Dijiste impactada.-A ver, me gustaría.-Te retractaste al darte cuenta de que podrías herir los sentimientos de Daryl con tus prontos.- Pero tenemos cosas que hacer aquí.
-Hablé ayer con Rick. Podemos escaparnos unas semanas.-Habló emocionado.
-Pues entonces, ¿a qué esperamos?-Preguntaste. Siempre te había gustado viajar y descubrir lugares nuevos. Incluso ahora que podía llegar a resultar peligroso seguías disfrutando cada vez que podías escaparte. Y más yendo junto al hombre al que amabas.
{...}
Su chalequillo aleteaba junto a tu chaqueta de cuero y vuestros cabellos, a causa de la velocidad a la que su moto iba. Llevábais algo más de una semana viajando y aún no sabías hacia dónde os dirigíais. Apoyaste tu cabeza en su espalda y cerraste los ojos.
Un olor familiar se adentró en tus fosas nasales, haciendo que algunas lágrimas se escaparan de tus ojos y se fueran volando con el viento. Las casas, los establecimientos y los recuerdos invadían tu mente. Era tu hogar. Tu pueblo a las orillas del mar.
Después de algunos sustos que os habíais llevado en esta semana por fin habíais llegado al destino de vuestro viaje y no lo ibas a poder igualar nunca.
Abrazaste a Dixon por la espalda antes de que se bajara del vehículo, haciendo que se sobresaltase. Las lágrimas salían de tus ojos sin control alguno y tu sonrisa no se te borraba del rostro. Daryl se dio la vuelta y bajó de la moto para abrazarte. Escondiste la cabeza en su torso y él te acariciaba el cabello.
-Vamos, baja.-Te animó una vez que te hubiste calmado.
Desabrochaste tus botas y, temblorosa, hundiste uno de tus pies en la blanca y cálida arena que formaba las playas donde jugaste en tus años de infancia. Daryl te agarró y entrelazó vuestras manos mientras tú solo podías sonreír tontamente mientras recordabas todos tus momentos felices junto a tus hermanos y amigos.
Paseásteis por la orilla, tranquilamente, agarrados de la mano. A pesar de un par de caminantes que merodeaban por allí, con los cuáles acabastéis rápidamente.
-Muchísimas gracias Daryl.-Dijiste y lo besaste para poder transmitirle todas esas emociones que las palabras no podrían llegar a describir nunca.
-_______, tengo que decirte algo.-Soltó cuando os separásteis.
-¿Estás bien?-Te preocupaste palpando su cara y brazos.-¿Te ha mordido alguno de los caminantes?
-No, no. _____ escucha. No te pongas histérica. Estoy perfectamente.-Te cortó tomándote de las mejillas.-No soportaría perderte, ¿sabes? Por eso me preocupo.
-Yo tampoco soportaría perderte ______. Te quiero demasiado.-Dijo y te besó suavemente.
Se separó de ti y se arrodilló. Dejándote desconcertada. Los débiles rayos de la puesta de sol iluminaban el rostro del nervioso Dixon. La brisa marina hacía bailar su cabello. Sus manos, inquietas, buscaban algo en su pantalón. No te lo podías creer. No de él.
- Soy tan malo en esto...-Reíste suavemente.- Que me lo he apuntado para que no se me olvide nada.- Sacó una hoja de papel y empezó a leer.- Hay veces en la vida en las que tenemos que arriesgarlo todo para obtener lo que queremos. Y yo quería arriesgarlo todo para poder tenerte a ti. Desde que te conocí me interesaste, pero me terminaste enamorando por completo cuando me regalaste la oportunidad de acercarme y conocerte más. Quiero estar contigo como un enamorado, todos los días de esta mierda de vida. Porque tú los haces impresionantes. Perdona que te coja de imprevisto pero ya no podía aguantar más tiempo sin pedírtelo.-Sacó un anillo que respandecía a la ya tenue luz del sol.- ¿Quieres casarte conmigo y combatir la vida juntos para siempre?
Tú sonrisa no se borraba de tu cara, las lágrimas de felicidad resbalaban por tu rostro y las palabras no salían de tu boca. Daryl se levantó de la arena esperando aún tu respuesta. Rodeaste su cuello con tus brazos y uniste vuestros labios. Él te acercó más pudiendo sentir cómo su corazón latía rápidamente por los nervios.
-Sí Daryl, sí quiero.-Hablaste sonriente y te colocó el anillo que se le había olvidado ponerte mientras una sonrisa adornaba su cara.
-------------------------
Este O.S no sé qué os parecerá porque la verdad no estoy muy inspirada.
ESTÁS LEYENDO
Daryl Dixon || One Shots
Fanfiction°One Shots de Daryl Dixon° Portada por @storiwr Todos los derechos reservados® Copyright©