Can We Stay? | 2jae [EDITANDO]

6.

Todo marchaba tan bien.
¿Como puede volverse todo tan gris en cuestión de segundos?
¿Acaso la vida era tan cruel para destruir aquello que le daba tanta felicidad?
Si, esa era la respuesta.
Ahora, en esa parada de autobuses dispuesto a dejar Mokpo de una vez por todas, dejar a su madre.
Solo llevaba una mochila y un corazón roto, no necesitaba nada más si lo había perdido todo.

Empezó tres días atrás.
Un día maravilloso, una mañana que había empezado tan bien, su padre sonriendole opacando la indiferencia de su madre, él sabían que si tenia a su padre no le importaba lo que su madre pensara.

-Jaebum vino por mi, te veo luego papá- Se despidió de su progenitor con una sonrisa y este se la devolvió.

Ahí con su apariencia despreocupada pero perfecta para Youngjae estaba Jaebum, su novio, se sentía tan raro llamarlo así pero lo llenaba de felicidad.

-¿Nos vamos?- El mayor le extendió su mano y él felizmente la tomó.
Caminaron en un cómodo silencio cada uno en sus pensamientos.
Youngjae pensando en lo feliz y afortunado que era gracias a Jaebum.
Y el mayor en lo feliz que era de que Youngjae haya caído por él tan fácil, su plan resultó perfectamente.

No por mucho.

Tenía un mal presentimiento una vez llegó a la escuela, no sabía por qué y no le gustaba.

-Saldré un poco tarde hoy, tengo que estudiar con J.seph, puedes irte sin mi- Le dijo Jaebum.
Hizo un pequeño puchero pero no iba a quejarse así que asintió como un niño pequeño y le dio un pequeño beso en los labios antes de irse a su salón.

Jaebum sonrió una vez vio la silueta de Youngjae a lo lejos.

-¿Entonces ya lo han hecho?- Preguntó Somin sin ninguna vergüenza, ambos se encontraban en la cafetería y de repente su vida sexual vino al tema provocando su sonrojo.

-Shhh, nos van a escuchan- murmuró avergonzado.

-Eso es un si- Dijo orgullosa.

Ahora pensaban en cuales serían sus planes una vez acabaran la secundaria, ya quedaban pocos días así que las clases eran prácticamente inexistentes y solo iban a la escuela por ocio.
Realmente no sabia que iba a hacer en un futuro pero mientras tuviese a Jaebum a su lado poco le importaba.

-Jaebum no ha venido, qué extraño- Dijo Somin frunciendo el ceño, él usualmente se sentaría toda la hora del almuerzo con ellos.

-Dijo que debía estudiar algo con J.seph- Murmuró sin importancia.

A Somin se le hizo extraño y por alguna razón se le formó un nudo en el estómago.

-Youngjae, no quisiera ser metida pero ya las clases se acabaron, no hay nada que estudiar y ellos ni siquiera reprobaron- Habló preocupada.
Eso alertó al castaño ¿estaba Jaebum ocultándole algo?

-¿Crees que debería ir a ver qué hace?-

-Vamos, te acompañó- Se ofreció la chica.

Caminaron en silencio, pero Youngjae en ningún momento dudó de su novio, quizá estaría planeando una sorpresa y sonrió internamente.

Se detuvieron frente a la puerta del salón, se podían escuchar murmullos y sabia que venían de ahí porque el pasillo estaba completamente vacío a excepción de ellos dos.

Con discreción se atrevieron a escuchar lo que aquellas personas que de inmediato reconocieron como J.seph y Jaebum decían.

-Basta con tus juegos, debes decirle la verdad, ya me estoy sintiendo mal por ocultar esto- Supo de inmediato que ese era J.seph