Mi Mejor Amigo (1era Parte)

La técnica de los celos

Han pasado cinco meses, así es hemos terminado la secundaria, fue muy emotivo nuestra graduación. Llore ya que no vería a algunos compañeros pero, lo bueno y lo que más me hizo feliz fue que Alfonso y Dania y yo nos inscribimos en la misma preparatoria y nos tocó en el mismo salón. No me sentí sola. Alfonso se volvió de nuevo mi amigo, aunque mantenía en secreto mis sentimientos hacia él. Me gustaría que en algún momento se fije en mi, olvide que somos amigos. Me sentiría la chica más feliz de este mundo...

—Cinthya ven, ya es hora de comer.— me llamó mi hermana, interrumpiendo mis lindos pensamientos.
—Si Florencia, ya voy.— le contesté.

Deja de soñar despierta. Pensé.

En el comedor estaba Florencia con Luis— ya más de cuatro años de noviazgo, como le hace— mi mamá— se llama Lorena— y mi papá— Jesús— adoraba comer en familia, pasó buenos momentos juntos.

—¿Cuando vendrá a comer Alfonso hija?— dijo papá.
—Nose, pero apenas vino.
—Si hermano apenas, hace un mes— dijo Florencia.
—Invitalo hija, me cae muy bien tu amigo. Recuerdo que de niños él venía más seguido.— habló mi mamá.
—Claro mañana le digo, que les parece que venga en sábado.
—Si es perfecto— dijo mi padre.
—Cuñada y no fueron ¿novios?— dijo Luis.

Lo mire, casi me ahogue al oír eso.

—Oye cierto, yo creo que eran novios— dijo mi hermana.

Demonios, contesta rápido Cinthya. Pensé.

—No como creen, somos amigos, los mejores amigos solo eso— reí nerviosamente.
—Bueno, ya.— hablo papá— mi niña es muy chica para eso de los novios.
—Claro y ¿Sebastián?. No se te olvide que fueron novios.
—Ya, mejor comamos— dije.

En la comida reímos muchos, Luis era muy divertido.

Bueno seguia contando lo que vivo en la preparatoria, hicimos una nueva amiga se llama Viviana. Es una chica muy bonita, morena con cabello castaño y ojos cafés. Es bonita incluso ahora tiene novio.
Es una gran chica a la cual le tengo mucha confianza. Ella era la pieza prefecta para nuestra amistad.

Era martes estaba en el salón platicando con Viviana.

—¿Terminaste con Marcos?— dije sorprendida.
—Si, es que me di cuenta que no era mi tipo.
—Ah, entonces solo duraron dos meses.
—Apenas llegamos al mes, es que es un tonto y naco.

Me sorprende a veces su forma de ser, así como consigue novio de igual forma los termina. Y yo apenas he tenido uno.

—Chicas hola—era Dania.
—Hola— la abracé.
—Hola—Viviana sonó diferente.

Dania salió del salón ya que se fue con Alfonso a la biblioteca por un libro.

—Querida, ¿te gusta Alfonso?— pregunto Viviana.
—¿Que? Estas bien— dije nerviosamente.
—Tranquila, puedes confiar en mí. Soy muy observadora, y noto como lo ves, como eres con el. Te gustas ¿cierto?
—Hay Viviana, si si me gusta. Pero no le digas nada. Esto lo sabe Dania, Sebastián y tú pero nada más.
—¿Quien es Sebastián?
—Cierto, un ex mío. Pero eso no importa. No le digas nada.
—Dania lo sabe— dijo sorprendida.— Creí por un momento que ellos dos se habían echo novios, los veo muy juntos pero, él la ve de una forma hermosa. Una forma la cual solo los enamorados se ven.

Sus palabras fueron como un golpe.

—Espera no, ellos son amigos. Eso yo lose.— dije rápidamente.
—Tranquila, bueno eso es lo que veo, a lo mejor me equivoco.
—Es ella es mi mejor amiga, sería un dolor horrible si lo que dices fuera cierto. Si todavía guardarme esto es horrible.
—Hay querida. Dime ¿desde cuando te gusta?
—Viviana me enamoré de el. Esto lo siento desde primero de secundaria. Cuando el me beso.
—¿!Que!?— lo dijo un poco enojada.—Digo ¿que? Se besaron.
—Si, es que en ese tiempo yo no había besado a nadie y él dijo que sería mi primer beso y así fue. Y en otros dos ocasiones más.
—Que, que bien— note molestia en ella.
—¿Esta bien?
—Claro, muy bien. ¿Nunca le vas a decir?
—No, me deja de hablar y yo no quiero eso.
—Mira, ¿conoces a Javier?
—Si, va en el salón de al lado.
—El quiere contigo y...
—Yo no, dile que no...
—Espera, haz oido eso de que los celos son útiles.
—¿Que?— dije confundida.
—Mira, hazte novia de Javier y así vamos a comprobar si Alfonso se pone celoso. Digo, así a lo mejor él se da cuenta de sus sentimientos hacia ti y se te declara. Yo digo que el si te quiere más que una amiga.
—Celos, ¿va a funcionar? No quiero que esto se convierta en un problema.
—Es una gran idea, a mi me ha servido. Entonces ¿si?

La mire, Javier es muy lindo y atractivo pero, no me gusta y no quiero usarlo. Aunque me gusta la idea, quizá así Alfonso se de cuenta y... Dios es una buena idea.

—Me arriesgaré, seguiré tus consejos.— dije sonriendo.
—Bien, yo te ayudaré con Javier.

Ésta sería una oportunidad para lograr estar con Alfonso, si funciona se lo agradeceré a Viviana eternamente.
Llegaron Dania y Alfonso, solo nos vieron. Aunque note que Dania veía a Viviana de una forma extraña.

—Gatita ven— Alfonso agarro mi mano y me llevo afuera.
—¿Que pasa, pingüino?
—¿Hoy que día es?
—Martes. — reí.
—Lo olvidaste— dijo triste.
—No baboso, si se. Ocho de nuestra amistad.— lo abrace.— Jamás lo olvidaría.

El correspondió al abrazo, sentí una sensación hermosa estando en sus brazos. Cerré los ojos olvidando que es mi mejor amigo.

Me gustaría estar así pero, siendo novios. Pensé.

Él se separó de mi. Dania le entrego una caja mediana. Rayos yo no traje ningún regalo, lo olvidé en casa.

—Un regalo para ti.— me entrego la caja.

La agarre y la abrí, casi me desmayo por tanta ternura que ví en esa caja. Mis ojos se iluminaron. Un pequeño gatito color gris estaba ahí. Sus ojos azules me miraron, ronroneo.

—Alfonso te amo— dije por impulso, espero no lo malinterprete. Bueno tuve una excusa para decirle eso.
—Sonrió—Y yo a ti.

Esperen dijo Y Yo A Ti, ojalá no fuera como amigos, y me amaras de otra forma. Me sonroje.

—Gracias, gracias por esto. Tú regalo te lo daré después en mi casa— lo abrace.

En la tarde en mi casa, le di un dibujo y disco original de The Beatles— a él igual le encantaban— casi me asfixia cuando me abrazo lleno de emoción al ver el regalo.

—Te amo mejor amiga.— dijo, lo de mejor amiga lo dijo en voz baja.
—Yo igual te amo, mejor amigo— te amo lo dije fuerte, pero mejor amigo igual lo dije en voz baja.

Nos miramos, nuestras miradas eran fijas y nos sonreiamos. A pesar de que no paso nada. Para mi pasó un huracán del echo de tenerlo así, su miraba hacia que me enamorará más de él.

Al día siguiente

Estaba en receso con Alfonso, íbamos tan felices, pero Viviana apareció en compañía de Javier. No esté no era el momento.

—Chicos— dijo Viviana.

Alfonso y yo la solo miramos. Note como Javier me veía, me veía de una forma tierna, Alfonso lo notó y como veníamos entrelazados del brazo me soltó.

—Alfonso, te robaré a Cinthya.— dijo Viviana.— La busca Javier.

Alfonso me miro, note molestia en él.

—Yo... Bueno es que...— no sabía que decir, quería seguir con Alfonso.
—Ya yo los presento. Javier ella es Cinthya. Cinthya el es Javier.

Alfonso se alejó de mi, note enojo en su mirada.

—Hola Cinthya— saludo Javier.
—Hola— dije.
—Vayan a dar la vuelta, yo me llevo a Alfonso.
—Vamos Cinthya— pidió​ Javier.
—Bueno.

Alfonso nos vio, se notaba celoso. Viviana tiene razón esto si funciona.
Me fui con Javier a dar una vuelta mientras platicábamos un poco. 
Al terminar el receso me fue a dejar a mi salón. Ahí estaba Alfonso. Javier se despidió de mi con un beso en la mejilla. Me acerque a mis amigos, me senté al lado de Alfonso. Él me abrazo.

—Nadie me va a a quitar a mi amiga— dijo.
—Siempre seré tu...— no quise decir eso, yo quería ser más que eso.

Le correspondi a su abrazo. Lo sentía diferente, ahora estaba más cerca de mi. Como cuando éramos niños pero, es más cariñoso, más tierno conmigo, no quiero hacerme ilusiones con el. Ojalá se esté enamorando de mi, así como yo ya lo estoy de él.

—Te amo chiquilla.— dijo.

Me dió un escalofrío.

—Mejor amiga— lo dijo en voz queda.

Me he enamorado de ti, y haré todo lo posible por que tú lo hagas de mi. Pensé.