¡A entrenar!

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Desmond llegó temprano a recoger a Sofía y Amber. El plan era llegar al castillo de Albuquerque antes que James, para poder encontrar a Hugo solo.

Al llegar, el mayordomo avisó que el príncipe se encontraba durmiendo. No obstante, Amber ordenó que los dejarán pasar a su habitación, aunque el mayordomo se negó, la chica presionó hasta que los dejó entrar.

Sofía se encontraba apenada, no le parecía correcto entrar de esa forma al cuarto de Hugo.
Cuando abrieron la puerta, notaron que el príncipe se encontraba profundamente dormido, tanto que ni siquiera notó que lo observaban fijamente.

Amber soltó un grito y Hugo se despertó de golpe, cayendo en el piso. Al ver a la rubia se asustó, para después ruborizarse cuando Sofía apareció en el panorama.

~¿Qué hacen aquí? Titubeó el príncipe.

~¿No sabes la hora que es?, Si quieres vencer a James debes levantarte temprano para entrenar. Lo reprendió Amber cruzando los brazos.

~Quizás eso sea cierto, pero ¿A qué debo su visita?, Habló Hugo fijando su vista en Desmond, ya que era extraño que el chico tuviera contacto con él.

~Disculpanos por molestarte Hugo. Bajó la mirada Sofía. ~Es que queremos que tomes ésto, quizás pueda ayudarte con tu rendimiento de hoy.

El príncipe se sonrojo y tomó el termo.

~Claro que no estoy molesto Sofía, ¿Cómo podría? Me encantó verte al despertar.

~Basta, basta Hugo, tómatelo ya, replicó Amber.

El príncipe se tomó la sustancia y Desmond comenzó a estudiar su comportamiento, aún no sabía si podía presentar efectos secundarios.
Después de una hora de examinarlo, Hugo se encontraba listo para practicar y no había tenido ningún síntoma adverso, así que Desmond y las princesas se fueron antes de que James llegará al castillo.

Al poco tiempo, el rubio hizo su aparición. Hugo aun no estaba muy convencido, pero eran órdenes de su padre y no podía desobedecerlas.

El príncipe de Encantia inmediatamente corrió a practicar la carrera de obstáculos, Hugo enseguida lo siguió y ambos comenzaron a competir.
En un momento James vió a Hugo acercarse a él con gran rapidez, el príncipe corrió con más velocidad resbalando en un gran charco de lodo, Hugo siguió corriendo terminando la carrera.

~No te confíes mucho Hugo, tropecé por error, si no, jamás hubieras podido ganarme.

~James no pongas excusas, acepta que te gane. Río Hugo ofreciéndole su mano. El príncipe la tomó e hizo un puchero.

~¿Qué tal una carrera de Derby? El que gane, podrá pasar toda la tarde con Sofía, sin ser molestado por el otro. Río James.

~Aunque ganes, Sofía solo te ve como un hermano, pero dejaré que estés un rato a solas con ella. Hizo una sonrisa altanera provocando que James apretara los puños.

~¡Pues yo no necesito que me dejes ganar!, Compite con todo lo que tienes, pero te advierto que yo soy tan buen jinete como tú. Gritó con furia James, corriendo a montar a su caballo Step.

Hugo de igual forma montó a Electra y ambos comenzaron a volar lo más rápido que pudieron.
Hugo iba notablemente más adelante que James, tal parecía que tenía la carrera ganada, pero su vista se desvió por unos segundos provocando que perdiera el equilibrio y cayera en un montículo de paja; James terminó la carrera y al volver se burló de Hugo.

~Mírate ahora, ¿Dónde quedó aquel príncipe guapo y codiciado? Estás todo lleno de paja y tu cabello es un desastre. Se carcajeo James quitando pequeñas ramitas del pelo de Hugo.

~¡Cállate James!, Un accidente le sucede a cualquiera, incluso a mi, que soy el mejor. Sonrió altaneramente Hugo.

~¿Sabés?, esta escena me recuerda a cuando intencionalmente tiraste a Sofía durante su primera competencia, tarde o temprano todo se paga, Hugo. Siguió riendo, mientras la expresión de Hugo cambiaba.

~No me recuerdes eso, James, todavía me siento mal por lo que hice, ni siquiera pensé en las consecuencias, ella pudo hacerse daño, por suerte no paso nada o seguiría lamentándome. ¡Mi estúpido orgullo siempre! No soportaba ser vencido. Bajó la cabeza, haciendo que James parara de reír.

~ ¡Aún así gane! y estaré una tarde entera con Sofía, pero ahora ¿Qué te parece si Juguamos un partido de Hockey?, 3-5 sonrió James.

~¡Claro James!, Esta vez ¡No podrás ganarme!

Ambos príncipes corrieron a la pista de hielo, e inmediatamente se metieron para comenzar el partido, tanto James como Hugo empataban en cada momento, haciendo que ambos comenzarán a impacientarse.

~¡Rindete ya Hugo!

~Rindete tú James, dijimos 3 de 5 y no podemos pasar del primero.

En un momento Hugo cayó al hielo y en lugar de levantarse, se quedo acostado por un rato. James se recostó junto a él y ambos se quedaron viendo al techo de la pista.

~ Qué cosas ¿no?, Jamás imaginé que tendría que practicar contigo.

~Ni que lo digas, yo nunca pensé que tendría que enfrentarme a ti por Sofía. Río Hugo llevándose las manos a la cara.

~Yo en un momento de mi vida lo supuse, siempre estabas cerca de ella al principio molestandola y luego siendo su amigo, pero no creí que te enamorarías de ella y mucho menos, que ella se enamoraría de ti.

~Las cosas solo pasan.

~Quien diría que estoy disfrutando practicar contigo, príncipe mimado y arrogante. Rio James para darle la mano a Hugo en son de paz.

~Tambien estoy divirtiéndome, perdón si no me levanto, pero tengo un pesadez terrible en el cuerpo. Susurró Hugo recostandose de nuevo.

James lo ayudó a levantarse y el príncipe caminó hasta su habitación para recostarse un rato.

~¡Debo irme Hugo!, Te espero mañana en Encantia para seguir practicando, por el momento, deséame suerte con Sofía, sonrió James guiñándole el ojo.

~No hagas nada tonto, ella aún es mi novia. Gritó Hugo mientras veía al rubio alejarse.

El elixir que le había dado Desmond tenía un efecto limitado, dandole energía solo por un corto tiempo y dejándole una sensación de pesadez durante las siguientes horas.

~Necesito checar cómo haz reaccionado al elixir. Alzó la voz Desmond entrando a su habitación.

~ Creí que te habías marchado desde esta mañana, murmuró Hugo viendo al principe.

~No podía hacerlo, yo inventé esta sustancia y tenía que estar al pendiente de ti.

~¿Por qué haces todo esto?

~Amber me lo pidió, sabe que James es muy fuerte y te será difícil vencerlo.

~No necesito esa clase de ayuda, dile que puedo hacerlo yo solo. Alzó la voz Hugo.

~ No lo hace por ti, sino por Sofía, sabe que si tú te alejas de su vida, su hermana no lo soportara. Habló Desmond para después salir de la habitación.

~ Discúlpame, te lo agradezco Desmond y también a Amber. Mencionó el príncipe antes de que Desmond llegará a la puerta.

El príncipe de Zatin solo le brindo una sonrisa y se alejó lentamente. Sabía que Hugo podía ser muy obstinado y orgulloso, pero no era malo, después de conocerse toda una vida, sabía perfectamente como manejarlo.

Un amor inesperado (Sofia y Hugo)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora