Capítulo 24

50 7 0
                                    

Los cristales de la iglesia eran hermosos mosaicos. Consistían de sucesos bíblicos. Zean subía y bajaba su pierna a causa de los nervios. Dentro de pocos minutos tendría que leer una lectura.

-El pollito te observa.- reí y mi madre pellizcó mi pierna.

-Mamá.- me quejé.

-Dejen de hablar y respeten están en la casa de Dios.- asentí e ignoré a Zean a cada comentario que decía. Con presencia Zean leyó la lectura y admiré la fluidez con la que leía. Mi hermano estaba soltero hacía dos años. Eso fue a causa del rompimiento de su amplia relación con una chica llamada Estefanía. Zean nunca quiso dar detalles de aquello, pero si pude detectar el dolor que aquello le provocó. Fueron dos años tirados a la basura.

Ya una vez de regreso a casa encendí la laptop y llamé a Jazmín a través de una vídeo llamada.

-Zaphira estoy ocupada.- escuché besos y supe que estaba junto a Alex.

-Apaga esa cosa.- alcé mi ceja y me negué a creer aquello. Aquella voz no era de Alex era... Corrí hasta la habitación de mi hermano y estaba vacía. Regresé frente al computador y escuché.

-Si Zaphira se entera de esto va a matarme.- cerré de golpe la pantalla de mi portátil y mordí mis uñas. No supe que sentir. Quizá coraje, desilusión o... No sé. Respiré profundo para tranquilizarme y esperé a que el tiempo pasara.

La noche cayó y la puerta de entrada se abrió. Observé a Zean llegar y sonreír al verme sentada en el sofá.

-¿No me digas? Ahora tengo a la hermana celosa que espera a su hermano a altas horas de la noche. Mañana tienes clase Zaphira.

-¿Dónde estabas?- pregunté seca.

-Con unos amigos.-me puse de pie y me acerqué lentamente.

-¿Me ves cara de tonta?- Zean frunció el entre cejo.

-¿De qué hablas?

-¿Estabas con Jazmín?-

-¿Qué? No...bueno...- negué con la cabeza molesta.

-Te metiste con mi mejor amiga Zean.

-Zaphira no es como tú crees.

-¿Ah no? Explicate entonces. Dirás que de la nada surgió esto.

-En realidad me gusta Jazmín desde hace años Zaphira y nunca lo intentamos por ti. Sabía que te pondrías como loca y te enojaría.

-¿La quieres?- pregunté. Aquello era lo único que quería saber. Yo sólo quería lo mejor para ambos. Los dos eran muy importantes para mi.

-Si Zaphira la quiero.- asentí.

-Prométeme que vas a cuidarla. Ustedes dos son muy importantes para mi Zean.

-¿Hablas enserio?

-Solo quiero que seas feliz.- mis ojos se llenaron de lágrimas.- Yo vi tu sufrimiento cuando se acabó tu relación con Estefanía. Preferias fingir que todo estaba bien y la realidad era que no. Si de verdad la quieres está bien lo aceptaré. Compartiré a mi amiga. - Zean sonrió y vi que sus ojos estaban siendo ahogados de lágrimas.

-Te quiero Zaphira enserio no sé qué haría sin ti.- me abrazó fuerte y me relajé.

-En realidad si eres un modelo. - acepté y Zean rió.

-Hablaremos mañana, pero ahora ve a descansar. - asentí. Zean dejó un beso en mi frente y subí a mi habitación. Ahora sólo quedaba conversar con Jazmín. Ella no podía estar con Alex y con mi hermano a la vez. Tenía que elegir entre ellos dos. Zean no merecía sufrir más.

(...)

Es increíble presenciar tantos cambios en tu vida en tan corto tiempo. Antes quería alejar a todo ser que se acercara. Ahora pido a gritos que se acerquen. Descubrí que una enfermedad o discapacidad no debe impedir que cumplas tus sueños. Debes luchar incansablemente por ellos. Debes luchar por tener las personas que amas. Estuve equivocada mucho tiempo y agradezco que Dereck llegara a mi vida. Ha sido la luz que ilumina mis días a pesar de las circunstancias.

- ¿Jazmin podemos hablar?- pregunté al encontrarme con ella.

-Si por supuesto qué ocurre.

-Se que ayer estuviste con mi hermano.

-Zaphira yo...- la interrumpí.

-Permite que termine. -Zean sufrió mucho cuando acabó su relación con Estefanía. Lo que más anhelo es que sea feliz y que mejor que contigo. Pero...estás con Alex y no puedo permitir que estés con ambos a la vez. Si quieres a Alex adelante, pero sino lo quieres déjalo ir. Si quieres a Zean se sincera. Solo no lo lastimes. Tampoco te precipites. Estoy dispuesta a compartirlos. - reí al decir lo último. - Seré igual de celosa.- Jazmín me abrazó y dijo:

-Ya terminé con Alex. - comencé a reír alegre y dije:

-Entonces elegiste a Zean.- la observé con detenimiento.

-Me gusta y mucho. -

-¿Y cómo no si es un modelo?-

-¿Quién es un modelo?- Dereck me acorraló a un locker.

-Eh yo tengo que ir hacer entrega de unos libros los veré luego.

-Creo haber hecho una pregunta.

-Sos muy metiche.- declaré.

-¿Si? ¿Porqué será?-

-Cierra los ojos.- pedí.

-¿Para qué?

-Cierra los ojos te prometo que no te arrepentirás.- me fulminó con la mirada.

-¿Qué tramas?-

-Sino cierras los ojos no sabrás.- dije. Meditó mi petición varios segundos y finalmente cerró los ojos. Busqué la píldora y sonreí de oreja a oreja. La mitad era violeta y la otra mitad blanca con una carita feliz. Son estas conocidas píldoras de amor.

-Abre tu mano.- obedeció y dejé la pequeña cápsula en su mano.

-Abre los ojos.- frunció el ceño al ver la píldora y sonrió.

-¿Qué es?-

-Abre la la cápsula.- sonreí de oreja a oreja. Obedeció y cuando extrajo el pequeño papel y lo leyó me miró a los ojos mientras luchaba para ocultar una sonrisa.

-Seria más lindo si lo escucho salir de tus labios.- acarició mis labios.

-Te quiero.- sonrió de oreja a oreja y besó mis labios con fiereza.

-Te quiero Zaphira.- reí mientras le besaba.

-Sois muy creativa.-

-Añadiré esa característica a mi lista.- rió y me dió un cálido abrazo. De esos que te llenan de alegría y hacen latir con rapidez tu corazón.

El secreto de Zaphira Donde viven las historias. Descúbrelo ahora