Mi Diosa De La Muerte [L Lawliet]

Capítulo 13.

L.

Era tarde por la noche estábamos esperando a que el falso Kira contestara el mensaje, ya transmitido. En medio de la espera, fui a buscar a Jane. Entré a su habitación y se hallaba en lo que parecía un profundo sueño.

– ¿Jane...? –La llamé y no recibí respuesta alguna más que el sonido de su respiración. Sonreí y acaricié su mejilla. Noté que ella estaba sonriendo. Comenzó a abrir los ojos y me miró

– ¿Qué hora es...? –Susurró.

–Casi las 11 de la noche.

– ¿Alguna novedad? –Preguntó frotando su ojo.

–No. Seguimos esperando –Se sentó en la orilla de la cama y sonrió igual que cuando estaba dormida–. ¿Soñaste algo interesante?

– ¿Por qué lo dices?

–Porque estabas sonriendo... –Dije y ella sonrió aún más.

–Si lo hubieras soñado tú... Créeme que estarías igual –Me miró.

Jane.

Soñé con el recuerdo de mi cumpleaños número 14. Mi amado, preciado y glorioso cumpleaños.

–Con decirte que soñé con mi cumpleaños 14 –Me estiré–. Creo que es suficiente... –Lo miré y sonreí.

– ¿Ah, sí? –Me abrazó por la espalda– ¿Me refrescas la memoria? –Lo miré y le deposité un pequeño beso en sus labios.

–Me encantaría...

Hace varios años...

– ¡No puedo creer que ya mañana es mi cumpleaños! –Exclamé feliz.

–Hum... Estas creciendo ¿Cuantos cumplirás? ¿5? ¿7? –Preguntó L, sarcástico.

–Ja, ja. Muy gracioso –Me recosté en la cama. Como eran las 9:06pm, ya era hora de dormir.

–Jane... ¿Qué harás mañana? –Preguntó mirándome fijamente.

– ¿Eh? –Me puse algo roja por la forma en que me miraba– ¿M-Mañana?

– ¿Podemos vernos en el patio, mañana a las 7pm? Hay... Algo que quiero decirte –Explicó serio.

– ¿Y me dirás por qué has estado actuando extraño estas últimas semanas? –Inquirí, levantando una ceja.

–Algo así... –Se acercó a mí– Jane... –Al escuchar mi nombre, levanté la mirada y L estaba en frente de mí.

– ¿S-Si? –Contesté nerviosa.

–A ti... ¿Te gusta alguien? –Me exalté.

« ¡¿P-Por qué pregunta eso ahora?!» Pensé sonrojada.

« D-Debo calmarme. No quiero que sospeche. ¡S-Si piensa que sí me gusta alguien, puede pensar mal! ¡Pensara que puede ser cualquiera! ¿Cómo podría explicarle que estoy perdidamente... Enamorada de él?»

–C-Claro que no... –Mentí.

–Ah... –Dijo sin apartar la mirada de mí– Creí que te gustaba ése amigo tuyo.

– ¡Aguanta! –Exclamé– ¿D-Danell? –Mi sonrojo desapareció y lo miré confusa– ¿Por qué creerías eso?

–Sólo digo... –Dije y pude notar cierto sonrojo en él. Quise probar algo.

–Este... ¡Bueno! –Dije y le di la espalda– Si llegara a enamorarme de un amigo... ¿N–No crees que sería de ti? –Me aventuré y tapé mi boca al instante, llenándome de arrepentimiento.