Una Extraña Manía. (One-Shots) [CORRIGIENDO]

Aceptemonos. (SouxMako)

─Vamos acepta...

─No creo poder, tengo que ayudar a mis hermanos.

─Pero, por favor Mako siempre me esquivas...

─Perdon, pero en verdad no puedo Sousuke.

─Bien... será para la próxima.

─Lo siento.

Sousuke veía como se alejaba por el pasillo un castaño muy nervioso. Como siempre era rechazado por el amor de su vida...

Habían pasado dos meses desde su declaración y Makoto parecía otra persona, aun a pesar de haber aceptado sus sentimientos nada había cambiado. En el sentido de estar en pareja no era como si fueran tan así, como conlleva la palabra...

─Creo que tendré que dejar de pensar cualquier cosa... Ya tranquilo Sou... -se repetía como tantas otras mismas ocasiones.

Sousuke no entendía en ocasiones a Makoto y eso lo volvía loco. Estaba más que claro, que sus sentimientos eran mutuos, pero hay algo que no ha terminado de cerrar para el castaño...

─¿Podrá seguir pensando en él? -hablaba consigo mismo Sou, mientras caminaba por el parque... hoy tambien se habia ido solo a casa. Y eso lo deprimía, Mako estaba actuando extraño...

Sou suspiro pesadamente, frotando con fuerza su nuca. Estaba tenso nuevamente, como es; ¿que el amor pueda ser tan complicado? O ¿la personas? Estas preguntas rondaban constantemente en la cabeza del morocho, como también, ¿el me ama? O ¿no? ¿En verdad, no fue por lastima?

─Ya basta, tengo que aclarar estas dudas o terminare muriendo de tanto pensar en este tema. - Sou tomo con fuerzas sus mochila, y corrió en dirección de su casa...

***

─Soy un cobarde, ¿por qué no solo llamó a la puerta de una vez? - caminaba de un lado a otro el morocho, frente a la puerta de la casa de Mako. El cual no dejaba en duda que se encontraba solo en casa, sus padres habían salido hacía un tiempo con sus hermanos y por lo que decían los pequeños sería un viaje largo a casa de unos parientes. Sabía que era la oportunidad de hablar con él a solas, pero ahí estaba lo difícil. ¿Cómo lo encararía? ¿Qué tenía que decir claramente? Muchas preguntas sin respuestas y otras que formular. Esto si era un constante ida y vuelta para Sousuke, el cual no paraba de lamentarse oculto entre los arbustos a un lado del porche de la casa de su amado.

...

...

Había pasado ya otra hora más y por fin se había dado el valor para llamar al timbre de la casa donde se encontraba su adorable amante.

Toc* Toc* - por fin. Se escuchó al instante la voz del castaño al otro lado de la puerta. Cuando la abrió, se encontró con un firme Sousuke...

─Sou, ¿Tú? ¿Qué haces aquí? -dijo algo dudoso el castaño, sin saber qué hacer, sonreír o no era un dilema también.

─Quiero que hablemos. - no se escuchó como una pregunta, sino una afirmación. Mako lo miró extrañado y asintió, dejando el paso a la casa.

─Traeré algo caliente, pasa a la sala. -desapareció por la puerta de la cocina. Mientras el morocho se acomodaba en la sala.

─Aquí tienes, ten cuidado esta caliente. - advirtió el castaño, dejando sobre la pequeña mesita dos tazas de té. Sou tomo su taza, luego de soplar tomó el primer sorbo lentamente y con la mirada fija en esa persona tan llena de enigmas, los cuales se dispuso a descifrar...

─Si sigues mirándome ta fijo harás que me ponga nervioso. -el castaño se había sonrojado, Sou sonrió relajadamente, pero de inmediato volvió a lo que había venido.