Ilusiones ~YM~

✴6✴

Era el gran día, presentaría su examen de recuperación justo después del receso más largo, se sentía listo para presentarlo pero no podía evitar los nervios que le recorrían el cuerpo, no quería repetir ese curso otra vez, sí, esta era su segunda vuelta de física y consideraba que ya había tenido demasiado de ello.

Caminaba hacia la escuela con paso lento, por los nervios no pudo dormir y terminó saliendo demasiado temprano de su hogar, ni si quiera Hoseok se había levantado de su cama cuando el ya estaba abriendo la puerta de entrada para salir, podría jurar que ni su padre estaba despierto aún. Realmente por dentro esperaba poder encontrarse con YoonGi otra vez para irse abrazados y tan juntos que la división entre sus cuerpos se perdiera pero eso no pasó, llegó solo y siendo el primero en entrar a su salón;  se sentó en la banca correspondiente en su salón vació, ese día no había motivos para saltarse las primeras clases, tampoco quería abusar de la libertad que se le había otorgado, no quería ser catalogado como mal alumno por faltar a tantas clases pues aún faltaba un mes  para el baile.

Se recostó en su banca y esperaba poder dormir un poquito pero una plática un poco interesante se llevaba a cabo en el pasillo fuera de su salón y desde donde estaba podía oír perfectamente, no quería ser chismoso pero hubo ciertos comentarios que lo hicieron parar oreja ante el chisme.

--- He dicho que no Hyung, le agradecería que dejara de insistir.--- La inconfundible voz de JungKook hacia presencia en el pasillo denotando el hartazgo en ella.

Un suspiro pesado se escuchó y hubo silencio por unos segundos, Jimin le rezó a toda aquella deidad que pudiera ayudarle a evitar que ese fuera su persona especial pero una voz un poco cabizbaja contestó al rechazo rompiendo un poquito de su alma en el proceso.

--- No me voy a rendir aun JungKook, me gustas demasiado.

Su corazón se le apretaba cada vez más con el paso tortuoso de los segundos, ¿YoonGi sentía algo por JungKook aún después de todos los momentos dulces que habían tenido juntos?, la respuesta era un hecho que no podía sólo ignorar.

--- Déjeme en paz de una vez, Hyung, antes era divertido pero ahora se vuelve molesto.

Unos pasos alejándose y un ruido sordo se escucharon en el pasillo sacándolo por un momento de su dolor, la curiosidad mató al gato y Jimin tenía instintos suicidas que surgieron justo en ese momento mientras su mente imaginaba una explicación para el fuerte sonido. Salió del salón para encontrarse con su Hyung sentado en el suelo escondiendo su cabeza en sus rodillas.

--- ¿Hy-Hyung?--- No deseaba acercarse, no deseaba enfrentar lo que se venía pero debía ser fuerte, el estaría ahí para YoonGi. 

El pálido levantó su cabeza por unos instantes dejando al pelinegro que estaba de pie observar sus ojos y nariz enrojecidos por el llanto y unas lágrimas cristalinas que descendían como ríos en su rostro, algo se removió con demasiada tristeza en su interior alertándolo. No debía estar ahí, debía irse y dejar que su mayor viviera su dolor solo, no debía ilusionarse con la esperanza de poder darle contención a su corazón roto pero no escuchó a su voz interior.

Se agachó para estar a la altura de ese joven tan adolorido y le abrazó fuertemente, no sabía qué hacía con exactitud pues pensaba que sería apartado con furia por el pálido pero fue correspondido con un desespero que lo dejó helado, Min YoonGi lo estaba necesitando tan mal, tan duro, tan catastrófico. Los jóvenes yacían abrazados vehemente mientras Suga continuaba sollozando, Jimin le acariciaba la espalda con sus pequeñas manitas, se prometió a sí mismo no permitir que su platónico volviera a llorar así nunca más y justo con esa promesa se desplazó a sí mismo a un lado.

Pasados unos minutos se separaron permitiendo que el mayor se fuera en silencio pretendiendo que nada de eso había ocurrido, tal vez así podría disimular tener la dignidad y el orgullo intactos pero, vamos, por dentro seguía llorando fuertemente, no podía engañarse ni evitar lo que sentía.