Acaba siendo interminable (Gemeliers). #T1

Capítulo 2

12 De Junio. Nueva vida.

Me levanté con una sensación extraña por no estar en mi casa. Sólo quería saber como sería ahora mi vida allí.

Me vestí, desayuné con mi familia y les dije a mis padres que salía a ver cómo era el barrio.

Cuando salí de casa eran las diez y media de la mañana y al ser un sábado no había nadie, sólo la gente mayor que se suele levantar a esa hora.

En ese momento caí en que no sabía nada sobre mis nuevos vecinos. 

Me sonó un whatsapp, lo miré y era mi mejor amiga Andrea. Me preguntó por cómo era todo y que si me gustaba la casa. Me preguntó también que si conocía ya a alguien a lo que le conteste que no y dejamos de hablar.

Me senté, ya que estaba agotada del largo paseo, en un banco del parque que estaba dando la vuelta a la esquina.

Había unos chicos, parecían gemelos. Me estaban mirando y yo disimulaba estando con el móvil. Al cabo de un rato se marcharon. Yo me volví a casa.

Mi hermano estaba en el jardín jugando al fútbol y claramente me puse a jugar con él ya que no tenía nada que hacer.

-Eres una paquete.-Me dijo sacándome la lengua y aproveché para meterle un gol.

Cuando se cansó, yo me fui a mi habitación a terminar de decorarla un poco. Coloqué fotos mías con mis amigas de Madrid, también de mi familia. 

Recibí un whatsapp.

Hola wapetona.

No sabía quién era ya que el número no lo tenía guardado.

Le conteste con un simple ¿Quién eres?, al que no me contestó.

Recibí otro de otro número sin guardar en el que decía otro Hola wapetona, te estoy viendo.

¿Cómo que me ves, si estoy en mi habitación y no sé quién eres?-Contesté algo borde.

Asómate a tu ventana.

Allí estaban dos chicos, eran los gemelos del parque, y, claramente, eran mis vecinos.

Me invitaron a salir aquella tarde, para enseñarme todo mejor.

Se llamaban Jesús y Daniel.

Me gustaron como personas, eran súper simpáticos, amables y, a decir verdad, guapos.

Se nos hizo tarde y tuvimos que volver corriendo.

Aquella tarde me lo pasé genial, era la primera vez en estos dos días que me empezaba a encontrar a gusto aquí.