(Hiatus)Those eyes (OTAYURI)

Stalker.

Hola a todas las personas que aún siguen esta historia.

Esta vez es un capítulo un poco más largos que los anteriores.

Nos leemos abajo.

*-*-*-*-*

Yuri se estaba cerrando su chaqueta de animal print, con emoción escondida se alistó para salir por fin, luego de una semana, de aquel hospital.  Cuando salió de la habitación  Otabek le ayudó con la maleta que tenía en la mano, se despidieron de las enfermeras y doctores que le habían ayudado durante ese tiempo y con la mejor de los deseos le despidieron. Antes de entrar al ascensor se encontraron con un par de hombres de apariencia robusta y de mirada seria.  

-Son policías. - Aclaró Yakov. - Nos ayudaran a salir. -

Para mala suerte de todos los presentes el ataque de Yuri había salido a la luz y la prensa los estaba esperando a la salida del hospital. Querían tener todo los detalles de lo sucedido y aunque la asociación de patinaje mundial había dado un reporte oficial los medios aún querían más.

-Malditos parásitos.- Refutó el rubio mientras entraba al ascensor siendo seguido por su abuelo, Yakov, Otabek y la policía.

-Por favor les recomiendo que caminen frente a nosotros.- Le dijo uno de los policías a los dos hombres mayores y a Otabek.

-El joven Plisetsky ira entre nosotros dos (Como un emparedado) - Así evitaremos que las prensa se le acerque. - Complemento el otro policía.

Todos asintieron, antes de que el ascensor se abriera Yurio se puso la capucha de la chaqueta, unos lentes negros y un tapabocas negro. Por su parte Otabek se puso unos lentes negros y a escondidas le dio un apretón de manos al rubio, trasmitiendo seguridad. Yurio le agradeció internamente.

Las puertas se abrieron y el primero en salir fue Nikolai siendo seguido por Yakov y Otabek. En el camino hacia la salida se encontraron con otros dos policías pero estos caminaban frente a ellos para abrir camino. A lo lejos divisaron un carro negro bastante grande, era cómo una camioneta casi limusina.

-Bueno, no respondan, no hablen no miren. - Sentenció Nikolai.

Abrieron las puertas del hospital y una lluvia de luces empezó a caer sobre ellos. Gritos y preguntas bastante atrevidas se escuchaban por todas partes y en todos los idiomas, literalmente era un río de gente. La prensa se acumulaba y acercaban sus microfonos a la cara de Otabek, Yakov y a Nikolai. Yuratchka era resguardado celosamente por los dos policías este ya fastidiado por la situación y como si de una celebridad sacó su medio dedo y lo puso en alto “Vallanse a la mierda” era lo que quería decir con eso.

Mientras que caminaba entre toda esa gente, Yuri observaba los rostros emocionados de aquellos que se hacen llamar periodistas, sedientos de escribir sus historias y relatar lo sucedido con amarillismo. Se detuvo por un instante cuando a lo lejos reconoció un rostro.

Era él, ese hombre que había abusado de su cuerpo, sus miradas se encontraron, Yuri palideció y con angustia se adelantó hasta llegar a Otabek, con desesperó se agarró del moreno y gritó. - ¡Está aquí! - Los policías y el Kazako tardaron unos segundos en asimilar la exclamación.

El flash de las cámaras aumentó en consideración cuando Yuri se desplomo y fue agarrado por el moreno quien a su vez buscaba al atacante de Yuri, al igual que los policías. Fue ahí cuando lo vio, sonreía como si supiera el daño que les estuviera causando   y sin más dio vuelta y se marchó.

-¡Por allí! - Le gritó Otabek a los policías quienes se abrieron paso entre la prensa a perseguir al delincuente. Él también quería ir tras el desgraciado, pero no podía dejar a Yuri o eso pensó hasta que se le acercó Nikolai, Yakov y los otros dos policías.

Tan pronto Yuri fue levantado Otabek salió corriendo tras los policías. Al cruzar el montón de personas que había vio de lejos a los hombres que resguardaban a Yuri y les siguió con afán.  Su carrera fue en vano pues cuando alcanzó a la autoridad estos le habían indicado que habían perdido el rastro del misterioso hombre  que con seguridad era Daniel de la Cruz, el violador de Yuratcka Plisetsky.

*-*-*-*-*

Yuri abrió nuevamente los ojos una vez dentro del auto, con cuidado se sentó y miró a aquellos que estaban pendiente de su reacción.

-¿Cómo te sientes, Yuri? - Preguntó Nikolai con preocupación.

-Mmmm me duele la cabeza. - Respondió el rubio mientras se daba un masaje en la zona donde le dolía. - ¿Qué fue lo que pasó? -

-Paso que viste al maldito que te atacó pero como había tanta gente la policía no le pudo atrapar, Otabek está con ellos y viene tras nosotros. - Le aclaró Yakov.

Yuri estaba seguro de que su moreno novio estaba más que rabioso por la situación. No sabía realmente porque le estaba pasando esto pero tenia un mal presentimiento. - ¿Él también salió tras él maldito?-

-Si pero primero te atrapó en el aire, si no lo hubiera hecho estaríamos nuevamente en el médico por el golpe que te hubieras podido dar.

-Yuri, deseas quedarte en España en lo que acabamos con esta situación o regresamos a Rusia mientras que capturan a Daniel. - Inquirió su abuelo.

El rubio lo pensó unos momentos, quería regresar a casa y dejar todo lo sucedido atrás pero en serio quería ver tras las rejas a ese enfermo que le había violado y que ahora le acosaba hasta hacerle quien sabe que.

-Me quiero quedar hasta que esto se solucione. - Declaró Yuri.

-Esta bien, vamos a alquilar un departamento en el centro de barcelona y contrataremos seguridad. No quiero que nada te pase. - Dijo Nikolai.

-¿Te quedarás conmigo, Abuelo? - preguntó el quinceañero.

-Si. ¿O no quieres? - respondió el hombre.

-Si...digo… hace mucho vivo solo… así que.... ¡Ah! ¿podemos vivir con Otabek?-

-¡Claro que no! … El tiene que seguir practicando para las próximos campeonatos. Puede que el te apoye pero tiene una vida,  Yuri. y tiene que seguir adelante al igual que tu. - Le reprendió Nikolai.

Eso era verdad y Yuri nunca lo había pensado, Otabek tenía su propia vida y tenía que seguir con su carrera, Él no quería trastocar la vida del moreno por las cosas que le pasaban. Durante el trayecto al hotel (Un nuevo hotel) Yuri no hablo solo miraba por la ventana el paisaje que le brindaba tan bella ciudad. Cuando llegaron a su destino Yurio bajó rápidamente del auto, se dirigió a la habitación que le habían asignado y se encerró en ella.

Otabek y los policías llegaron a los pocos minutos, de manera inmediata el moreno se dirigió a la habitación de su rubio novio, golpeó varias veces pero no obtuvo respuesta alguna solamente le llegó un mensaje de texto.

De:Yura

Asunto: Por favor.

**Por favor déjame tranquilo, mañana hablamos.**

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Muchas gracias por llegar hasta aquí.

Agradezco sus votos y comentarios.

😘