El primer y ultimo amor

3-Hogar dulce hogar

Hogar dulce hogar. Llevamos 2 días aquí y ya me siento como en mi antigua casa, creo que mejor.
Desde que llegamos no hemos salido a ningún lado, al menos yo y Ellie, papá salió a hacer compras y al parecer conoció una nueva amiga.

Me levanto de la cama, hoy sin despertador y voy al baño.

-¡Ocupado!- Grita Ellie.

Eso es lo malo de esta casa, solo hay un baño. No se que tanto tiene que demorar una niña de 12 años en el baño, será la pre puber.

Mientras espero a que Ellie salga del baño voy a mirar por el ventanal de mi cuarto, desde aquí se ve el patio del vecino. Un chico con una chaqueta de cuero y unos tejanos sale de la casa y se sube a una moto, abre la valla y sale disparado. No sabia que tenia un vecino tan guapo.

Luego de ir al baño bajo a desayunar, papá compró unos bizcochos y nos hizo la leche.
-Buen día pequeñas- dice papá.
-Buen día papá.
-Ayer cuando fui a hacer las compras, me encontré con una vecina, me dijo que hoy su hija hará una fiesta y que puedes ir si quieres Steph- dice tranquilamente.
- Espera, ¿qué?- contesto.
- Eso, te han invitado a la fiesta.
-¿Enserio crees que puedo ir a una fiesta?-Me sorprende que siquiera me lo pregunte.

 «Ha muerto tu madre ¿quieres ir a una fiesta?» 

  El suspira. -Hija, claro que puedes, es lo único que te hará bien, divertirte. No me gusta que te quedes aquí, encerrada, dejando pasar tu juventud por que tu madre ya no esté.

-Basta papá no iré.

-Pero, dime ¿porque?

-Por que no conozco a nadie papá, no tengo ganas.

- Desde que llegamos no has salido de aquí, sería una buena oportunidad para que te hagas nuevos amigos, puedes ir con Ellie si quieres.

-¿Quieres que lleve una niña a una fiesta de sexo alcohol y drogas?

-No soy una niña- refunfuña Ellie.

-Dijo que será una fiesta tranquila.

-Eso es lo que ella piensa- río.

-Bueno como tu quieras Steph, no te obligare a nada.

7:00pm. Me levanto de la gran siesta. He estado pensando en lo que dijo papá, no puedo dejar pasar mi juventud penando por mamá. Ya está, tenia que pasar, el destino lo quiso así, aunque me duela en el alma. Tengo que divertirme, vivir, hacer lo que cualquier chica de mi edad hace, aunque no me cautive en lo absoluto.

Bajo al living, papa esta haciendo un trabajo en la computadora.
-Papá...
-¿Que quieres hija?
-¿Donde dijiste que era la fiesta?- pregunto con vergüenza.
-Ahhh- ríe - Veo que te has decidido ¿eh?
-Solo no quiero que te sientas mal por mi.
-No hija, no me siento mal por ti, solo quiero ayudarte, ya pasará todo ¿si? Lo verás- me abre los brazos para que lo abrace y corro a sus brazos. Contengo los ojos para que no me salgan las lágrimas. No quiero llorar ahora, me desanimare y terminaré perdiendo quizá mi única oportunidad de divertirme aquí.

Papá me da la dirección de la casa y le digo que me iré a las 12.

Entró al cuarto de Ellie, está hablando con una amiga por la webcam de la computadora.
-Siento interrumpirles su charla de chismosas, pero quiero preguntarte algo- le digo a Ellie.
-Bueno Ana tengo que dejarte, mi hermana quiere hablar conmigo, ¡algo que nunca había sucedido en toda la historia de los años! Luego hablamos adiós- dice a la computadora y luego cierra la pantalla.
-Ya que ya no eres una niña..quizá...- le digo.
-¡Ya Steph dime!
-¿Quizá quieras ir a la fiesta conmigo?
Piensa unos segundos.
-Bueno...quizá si.
-Pero debes quedarte todo el tiempo conmigo y no tomar nada ¿okey?
-Entonces será aburrido, pero bueno, iré porque soy una buena hermana.
-¡Si! Mi ratoncita!- la abrazo.