Capítulo X

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Mikoto pensó luego de salir de casa de Sasuke qué entrometerse no estaba bien, pero ver a su hijo ebrio y a ella tan campante en la casa y encima sin cuidar de la salud de su nieto le hizo reaccionar de mal modo. Buscaría la forma de hablar con Sasuke, si su matrimonio iba mal y él deseaba conservarlo lo apoyaría.

Saco el juego de llaves y una vez adentro buscó con la mirada algún indicio de que Sasuke se había levantado para dejar de ser una plasta sobre el sofa. Escuchó la regadera y decidió preparar una sopa mientras esperaba.

—Huele bastante bien — dijo Sasuke acercándose a abrir la tapa de la olla donde se encontraba un delicioso  guiso de Miso

—Me alegra saber que tu apetito esta intacto, toma asiento que ya te sirvo — Mikoto en seguida se dirigió a la cocina par servir el alimento, debía elegir bien la palabras sí quería saber como ayudar a su hijo menor, se pregunto como sería si aquel lindo doncel continuara en sus vidas, suspiró.

Sasuke por otro lado se sentía avergonzado de que a su edad aun recurriera a la parte filial en sus momentos de debilidad, pero nunca se intereso por tener amigos a manos llenas y Suigetsu no se encontraba en el país, así que sin siquiera analizar su estado llamo a casa de sus padres y quien descolgó el teléfono fue su madre. Un "no se que hacer con estos sentimientos" bastaron para tener a su madre en el departamento y aunque después se negó a decirle los verdaderos motivos de su desesperación, ella no lo presionó.

—Esta mañana fui a tu casa — hablo la pelinegra, observando atenta la reacción de su hijo, pero este no se inmuto siquiera — le pregunte a tu esposa si ella sabía por que estabas tan... — Mikoto no sabía como expresarse, no estaba familiarizada con esa actitud en su hijo — tan, no siendo tú.

—¿Y, que fue lo que ella te dijo?

— Qué el embarazo la tenía muy irritante y peleaban por eso ¿hijo eso es verdad?

Sasuke se mantuvo en silencio ¿por qué Ino diría algo como aquello sí el llevaba días sin siquiera interesarse en ella o en lo qué era peor,sin preocuparse por su hijo?

—Mamá — le dijo apoyando los palillos sobre su plato — te prometo que en cuanto arregle este asunto, tus dudas serán resueltas — Mikoto decidió entonces cambiar de tema pero con referencia a su nieto.

— le dije también a Ino que está tarde la llevaría donde me atendí mis embarazos ¿estas de acuerdo?

—estoy de acuerdo—accedió— pero  solicita una cita para mañana a medio día quiero estar presente, ya he ignorado bastante la situación y es hora de que comience a hacerme responsable.

Sasuke solo esperaba que Sai no faltara a su encuentro.

Sai

Sai recibió respuesta de quien menos creyó posible. Del mismo Sasuke Uchiha. Y ahora lo esperaba pacientemente en la mesa mas apartada de aquel restaurante de comida italiana, se planteo salir huyendo, después de todo el tipo no lo conocía y él podría conservar el rostro y la dignidad intactos por que estaba seguro que en cuanto la verdad abandonara sus labios la vida misma también lo haría, pero ya estaba harto de permanecer en la sombra. Dejo de pensar cuando la silla solto un rechinido indicando que ya no estaba mas sólo, levanto la mirada y frente a él estaba el esposo de su amante. Él estómago se le revolvió, la avalancha de sentimientos hicieron efecto tan pronto vio a aquel hombre.

El esposo de Ino Yamanka.

Achicó lo ojos un momento y de forma descarada se permitió observar al hombre frente a él, era bastante serio para su gusto, frío, inexpresivo y sólo por juzgar un poco más,algo frívolo, bien vestido y al parecer poco conversador. Sai  suspiro.

Amor Mio DejalaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora