10 • Jones - Sufrir de una esposa.

7 1 0
                                    

La mañana siguiente después del día de las extrañas venidas del ejército. Dante iba directo al campo con su padre para ir a recoger frutas y usarlas para la comida. Caminando a unas cuantas casas encontraron a la señora Silvia. Ella era alguien que siempre se la pasaba afuera ofreciendo comida o un café a los que iban al campo a cosechar. Era ahí como la cafetería del receso en la escuela o del trabajo.

Cuando pasaban saludaba muy alegre, estirando el brazo y dándoles bendiciones a los que iban y venían. Ella era casada, tenía como esposo al señor Jones. Un hombre casi igual a Ryuk, solo que un poco más chaparro y calvo. Solo Vivian ellos solos en su casita que parecía más comedor.

Pero este día había algo raro cuando pasaron justo por esa casa. Al caminar parejo de ella no les saludo, ni siquiera los miro o algo,  eso ya era muy raro. Tenía la cara de preocupación mirando hacia el bosque. Por lo que se veía estaba muy inquieta.

Ryuk con la incógnita en la mente se acercó y saludo –Hola, señora Silvia, ¿como esta?- sin embargo no hizo caso alguno al saludo. Ryuk entonces parpadeo y volvió a intentar pero esta vez tocando el hombro derecho de Silvia.

–Disculpe...-. En esta ocasión si alcanzo a reaccionar y respondió un poco trabada.
–B-Buenos días... con-como esta señor Ryuk-. A lo cual Ryuk solo exclamo con las palabras
-Bien, muy bien gracias y usted-
-Y-yo bien gracias también...-. Respondió Silvia
En eso Ryuk frunció el ceño y dijo.
–Oiga, no es de buena educación decir mentiras enfrente de los niños- Señalando a Dante. A lo cual Dante exclamo "Eh" y le grito -¡No soy ya un niño, viejo!-. Pero Ryuk lo ignoro y siguió en lo suyo.
-A qué se refiere- Hablo Silvia incomoda
-Dígame la verdad, ¿Qué paso?- Volviendo a preguntar Ryuk
Silvia junto sus manos y con la mirada al suelo quedo en silencio. Dante no sabía que pasaba y se empezó a preocupar. Ryuk tampoco hablo y dejo seguir el silencio que para su hijo era muy incómodo.

El silencio paro cuando se escucharon las primeras palabras de Silvia.

-Am... Este... es sobre Jones...-
-Su esposo, ¿Verdad?- Dijo Ryuk de inmediato mirándola.
Esta vez la mujer volteo y mirándolo a los ojos solo simplemente afirmo con la cabeza. Era obvio que tenia algo, su cara deslumbraba preocupación y angustia.

-Ayer en la tarde, se nos había acabado la leña... así que mi esposo, Jones, cogió el hacha y dijo "Vuelvo enseguida no tardo". Abrió la puerta salió y la volvió a cerrar...-.

Todavía no terminaba la historia y Dante ya empezaba a sentirse más incómodo. Ryuk solo la escuchaba atentamente.
–Pasaron horas y yo lo seguía esperando junto a la chimenea. Me empezó a preocupar, salí afuera ver si lograba ver si llegaba.- Se detuvo y tomo un respiro.

Después de una pausa volvió a hablar. – Sin embargo, no podía ver nada... solo el oscuro y frío bosque de allá por la noche.- Señalo el bosque que se encontraba justo a lo lejos después de los campos.

"Es muy extraño". Pensó por un momento Ryuk "Casi nadie va a ese lugar. ¿Por qué Jones iría ahí?".
-Después ¿Qué más ocurrió?- Pregunto Ryuk mientras cruzaba un brazo y con el otro tocaba su barba.
Volviendo a dirigir la mirada al suelo contesto Silvia –Ya... ya no volvió después de toda la noche-.

Entonces entro un silencio incómodo, el cual Dante le provocaba un escalofrió, como si le estuviesen contando una historia de terror.. Y solo a Ryuk esperaba con su mismo rostro y posición las palabras de Silvia.

Volviendo en si Silvia prosiguió –Me metí a la casa con la poca esperanza de que entraría por la puerta pro no fue así. Luego de que me que me puse varios abrigos y llevo esperando aquí desde la madrugada a que llegara pero no lo ha hecho-. Ryuk movió su brazo y dirigió su mano al brazo de la pobre mujer preocupada hasta lo más profundo de su ser, el temblar del mismo reflejaba que ciertamente tenia mucho tiempo al aire libre por lo cual casi se congelaba afuera.

BLUE FIREDonde viven las historias. Descúbrelo ahora