13 - Sangre - La bestia.

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Fue increíblemente sorprendente lo que pudieron ver Dante y Ryuk en ese momento. La mirada de la criatura solo miraba de frente sin dirección alguna. Ryuk, a pesar de temor que tenía volvió a reaccionar en sí, se dio cuenta de ello. Comenzó a moverse lentamente mientras que Dante lo veía.

Al parecer solo el ruido la hizo girar su cabeza por donde se originaba aquel sonido, nada más que eso. Ryuk con la idea de que aquella criatura fuera ciega. Tenía una ventaja de estar en una distancia concreta.

Aun así, solo faltaban unos pasos para que Ryuk llegara de nueva cuenta con su hijo. Lo único que tenía en la cabeza era llegar junto a Dante, cogerlo, regresar por donde vinieron, encontrar la salida, y lo más importante, alejarse de la criatura. Todo iba de acuerdo a esa idea. Sin embargo, Dante aun con la rama en la mano, siguió temblando y accidentalmente, con un movimiento provocó que se raspara, clavándose asi una astilla de la misma rama, la cual quedo su sangre, Dante la tiro con la sangre ya manchada en ella, Y ahí fue, donde el terror se hizo presente.

En el instante cuando Dante se abrió, la criatura volvió a respirar. Lo siguiente fue de nuevo el tensión sobre ambos, volviendo de nueva cuenta atrás. Pero esta vez, no se quedaría así esa criatura. Se empezó a levantar poco a poco, provocando la presión elevándose de padre e hijo. Sin pensarlo dos veces, Ryuk le empezó a decir en voz baja a Dante –Corre, corre- él solo vio y no sabía qué hacer, tomándose la mano cubriéndose la herida, mientras la criatura se levantaba en dos piernas. Al ver esto Ryuk, solo le grito a Dante -¡Corre!-

La criatura también grito con un sonido irritante, agudo y escandaloso que se escuchaba por todo el bosque, similar a un lobo aullando. Dante hizo caso a su padre y salió corriendo. La criatura  comenzó a correr tras él. Ryuk intento ponerse en medio para impedir el paso de la criatura, sin embargo tan solo con un manotazo lo hizo volar hacia un árbol, donde quedó inconsciente.

Dante no se dio cuenta, sus pensamientos no eran claros, solo su instinto se le decía en huir, tratando de no caerse, sin parar, con la mano ensangrentada y manchando las ramas, hojas, árboles, raspándose y ensangrentándose más, la pesadilla principal se volvió más desesperante.

Giro su cabeza para poder ver a su padre, pero lo que vio fue a esas criaturas él, entonces corrió más. Pero para sorpresa la misma cosa se movía más rápido. Parecía que iba a alcanzar a Dante. Pero la suerte le sonrió a él, vio unos arbustos detrás de unos troncos caídos y pudo darse cuenta que cabía entre dos de esos troncos. Tenía la certeza de que si esa cosa se parecía físicamente a el señor Jones no podría entrar por ahí. Así que fue directo ahí, y llegando se metió por ese orificio.

Su sorpresa es que vio que la criatura que no lo encontraba, volteaba de lado a lado, al final solo se fue por otro camino. Eso dio segundos de respiro a Dante, pero su preocupación aún no se iba.

Aparte las dudas acerca de lo que le abra pasado a su padre. No sabía qué hacer, si regresar por su padre, si ir corriendo a la salida para pedir ayuda en el pueblo y alcanzar a salvarlo, pero y si era ya demasiado tarde. No podía pensar bien, pues además estaba lo de la criatura que lo andaba buscando.

Luego de unos segundos mientras analizaba los movimientos que pudiese hacer para librarse de esa situación, sintió una sensación muy extraña en su espalda. Como si una brisa de invierno le tocara atrás. Entonces volteo lentamente y lo que vio a continuación lo dejo perplejo. Era la criatura, impactante en el momento, Dante y la bestia que tenía la misma forma del señor Jones estaban uniendo sus miradas.

Aunque la criatura solo lo veía y no se movía, Dante no sabía qué hacer, tenía al monstruo delante inmóvil, los ojos del mismo provocaban más el temor de Dante que solo pensaba "Ahora, ¿qué hago?... moriré acaso... es que ¿terminare como esa cosa? O ¿Me comerá vivo?".

Sin embargo, la criatura siguió quieta. Los segundos de vida para Dante parecían estar en parálisis junto a él enorme ser. Entonces fue cuando noto que su mano ya no salía sangre. Había parado el pequeño sangrado y la sangre se secó. Entonces volviendo a mirar a la criatura, recordó lo que ocurrió al cortarse con aquella rama espinosa. La criatura reacciono al momento de oler la sangre salir de Dante. Sin titubear más, decidió salir cuidadosamente mientras esa cosa seguía inmóvil, Camino lentamente, con el sudor en la frente que le pellizcaba la misma, y aun así ignorando eso, pues su mayor preocupación era la criatura, que se había quedado quieta,

Al Salir de ese hueco, corrió directo así donde estaba su padre. Llego a donde Ryuk se encontraba inmovil, adolorido e inconsciente a lado del árbol donde la criatura le había lanzado. Entonces Dante intento reaccionarlo. Tomando un segundo los consiguió satisfactoriamente.

-¿Que paso?- Pregunto Ryuk apenas intentando levantarse.
-No lo sé padre, apenas y escape de eso.
Al decir esto, Ryuk recordó todo – Cierto. A donde ha ido la criatura.
-Esta entre un hueco de ramas- Respondió Dante- no tenemos mucho tiempo, hay que salir de aquí.

Dante ayudo a levantar a Ryuk del suelo para poder salir de ahí. Mientras escapaban, Dante le empezó a platicar como es que pudo salir de ahí sin problemas. Aun cojeando, mal herido Ryuk y Dante siguieron avanzando intentado rodear donde se encontraba la criatura. Pero después de uno metros, ramas y árboles llegaron a donde estaba antes la criatura. Dante lo recordó e intento caminar hacia el otro lado. Pero Ryuk lo detuvo y le dijo "Es aquí donde estaba la criatura, ¿Verdad?", "Si, es aquí" respondió Dante. "Llévame quiero verlo para asegurarme que este ahí" Sorprendido, pero acepto. Sujeto bien a su padre y avanzo a donde estaba la criatura. Sin embargo se llevaron una gran sorpresa al ver que no se encontraba ahí esa cosa tan horrible que había golpeado de gravedad a Ryuk y persiguió a muerte a Dante.

Lo peor llego después. Al escuchar un grito aterrador de una mujer

-Ese sonido... viene del pueblo- dijo Ryuk con el temblor de su cuerpo y el vibrador de sus labios. –Vamos- Grito con intención de alarmar a Dante mientras que el, solo tartamudeaba y no podía moverse.
-¿Qué te pasa? ¿Por qué coño no te mueves? ¡Ey te hablo!- Le siguió alzando la voz con cada palabra con la posibilidad de que Dante reaccionara. Algo que no se pudo solucionar al principio.

Luego de unos segundos de tención y sin habla alguna de él, Ryuk alcanzo a volverlo en sí, recuperar la razón. -¿Qué pasa?- Le volvió a gritar Ryuk –Tenemos que largarnos al pueblo ahora mismo.

Ese sonido de hace un momento no me agrado.- Dante solo asintió la cabeza y ambos se fueron directos a donde escucharon aquel sonido.

Ahora un temor más grande les aguardaba en el camino.

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