《Quiero Salvarla》

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Continuación de Encantamiento Desmemorizante...

Los días que siguieron fueron más oscuros que los anteriores. Se informaban más muertes, más desapariciones, más torturas y miedo, lo que significaba que Voldemort y los mortifagos cada vez tenían más poder en el Mundo Mágico.

Por un lado, Hermione ya se había sacado un peso de encima. El haberle borrado algunos recuerdos a Draco le permitía mantener toda su atención en la búsqueda de horrocruxes. Aunque no podía negar que le había costado y dolido tanto como cuando hizo lo mismo con sus padres.

Por otro, Draco se sentía vacío. Solía pensar que la única razón que tenía para vivir había desaparecido. Debía torturar a personas inocentes y seguir ordenes del Señor Tenebroso, por lo que ya no quería continuar respirando y a pesar de que sus padres trataban de subirle el ánimo, él ya no podía sonreír.

Después de un largo día soportando los gritos que se escuchaban en su casa, Draco solo tenía una cosa en mente: dormir. Para él era el único momento en donde podía estar tranquilo a pesar de que algunas veces sus peores miedos se reflejaban como pesadillas.

Justo cuando se estaba acomodando en su cama, escuchó como su tía lo llamaba eufóricamente desde el primer piso. Debe ser para algo importante, pensó.

Al llegar donde provenía la voz, Draco pudo observar a Ron, a Hermione y a un chico muy parecido a Potter pero que tenía la cara deformada, afirmados por unos hombres muy desarreglados. Vio que también estaba Bellatrix y su madre, quien trataba de calmar a Lucius que se notaba emocionado ante la perspectiva de ser quien le entregara a Harry a Voldemort.

El rubio se comportó muy reacio cuando trató de identificar a los chicos, a pesar de que las caras de Ron y Hermione eran obvias. Ya han pasado por mucho, se dijo.

Antes de que Lucius pudiera llamar al Señor Oscuro, su cuñada notó la presencia de la Espada de Godric Gryffindor, la cual estaba en manos de uno de los hombres que trajeron a los fugitivos. En menos de un minuto estos yacían en el suelo inconscientes gracias a las habilidades de Bellatrix. Por lo que le pidió a su sobrino que los llevara al patio.

Mientras Draco realizaba la tarea que le habían ordenado, pudo escuchar como su tía lanzaba repetidas veces la Maldición Cruciatus y unos gritos desgarradores de quien comprendió que eran de Hermione.

Corrió hasta la puerta de la sala, pero cuando estuvo allí se detuvo. ¿Qué estaba haciendo? ¿Acaso iba a salvarla? ¿Por qué había sentido la necesidad de ayudarla?

Trató de entrar tranquilo a la habitación a pesar de que tenía muchas dudas en su cabeza.

Sin que nadie lo hubiera previsto Harry y Ron irrumpieron en la escena y desarmaron a Bellatrix. El niño que vivió sorprendió a Lucius, que no tenía una varita para rechazar la maldición y fue lanzado por los aires. Bellatrix, colocó una daga sobre la garganta de Hermione como amenaza, entonces Harry y Ron le entregaron sus varitas a Draco.

Sin embargo, Dobby dejó que la araña de cristal cayera al suelo casi sobre las mujeres. Bellatrix lanzó a Hermione para saltar fuera del camino y la cara de Draco fue arañada por los vidrios que volaban. Ron rescató a Hermione de los escombros, Harry desarmó a Draco y el elfo desarmó a Narcissa antes de que pudiera maldecir a alguien.

Potter le lanzó una varita a Ron y a Hermione y desaparecieron con él. Harry agarró a Griphook y la espada, Bellatrix, sin embargo, tiró su daga que se desvaneció y golpeó a Dobby en el pecho.

▪ ▪ ▪

Los hombres de la familia Malfoy sintieron como la marca que estaba en su brazo comenzaba a arder, lo que significaba que la batalla había comenzado y que debían ir a ayudar a los demás mortífagos. Pero antes de aparecerse en el castillo, Narcissa Malfoy le pidió a su esposo que le diera cinco minutos para poder hablar con él algo que le estaba inquietando mucho.

-¿Recuerdas cuando llegó Harry Potter con sus amigos a la mansión?

-Sí, ¿qué con eso?

-Mientras mi hermana estaba torturando a...

-A la sangre sucia.

-Lucius, no le digas así -lo reprendió-. A Granger, -Narcissa continuó- entré a su mente y busque dentro de sus recuerdos algo que pudiera sernos útil. Pero cuando hice eso, encontré a Draco -su esposo se acercó más a ella para poder escuchar mejor-. Y vi como nuestro hijo era feliz con ella. Pero al parecer Granger borró los recuerdos de él por su seguridad. Creo que esa es la explicación del por qué ha estado tan triste... Quiero salvarla, Lucius, quiero mantenerla con vida y necesito que me ayudes a hacerlo.

《Hi hi hi
¿Cómo están?
Aquí les dejo la continuación del capítulo anterior y en unos días más subo el final.
Gracias por votar y por leer ♡
¿Cómo les gustaría que terminara esta mini historia? Díganmelo en los comentarios.

▪Besos,
Mäřy》

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