Confesion

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-Las clases comenzaran en una semana, Kaname-kun-dijo Kaien.

-Lo sé, Zero me contó todo-respondió seriamente

-Vaya te llevas de maravilla con mi hijo!!-dijo en su modo infantil en forma chibi.

-Cross...-advirtió Yagari con el seño fruncido.

-a si...Deberás asistir a clases nuevamente, no quiero que los demás sospechen-dijo serio –La clase nocturna deberá volver nuevamente...además estarán mas seguros aquí, aunque hayan cesado los asesinatos y los ataques es peligroso que estén allá-continuó.

Kaname estaba pensativo, ambos adultos lo observaban, Cross tenía razón, su hermana y los demás estarían mas seguros en la academia que en la mansión Kuran.

-Bien...iré a avisarles –dijo parándose. Se retiró del lugar y caminó a su cuarto.

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-...un castillo de arena voy a construir, donde mis rezos se escuchen por fin, al oir, pasos detrás ~...que me están siguiendo para enboscar~...-era un canto hermoso pero algo fúnebre. Kaname cuando pasaba por la habitación de Zero lo escuchó cantar, tenía una hermosa voz, muy afinada y armoniosa...No se atrevió a entrar, se quedo unos momentos alli hasta que este detuvo su canrar de golpe.

Nego con la cabeza,  y siguió su camino, antes de entrar a su cuarto tomó el teléfono marcando un numero.

-moshi moshi?-se escuchó al otro lado de la línea.

-Takuma...-saludó al reconocer la voz de su amigo.

-¿Kaname?, ¿ocurrió algo?-dijo preocupado.

-si soy yo...y si ocurrió algo, los quiero a todos aquí, tomaremos nuevamente las clases de la academia para evitar sospechas...además es por seguridad, las clases comenzaran aproximadamente en una semana, los espero-sin dar tiempo a responder al contrario, colgó.

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-Sasha-sama, ¿Cuánto tiempo nos queda?-preguntó preocupado Will.

-mnnnn....veo que ya me quieres lejos de ustedes...¡Vaya!, si que te estoy molestando, se que odias que toquen a tu hermano pero sabes que necesito este cuerpo para hospedarme-dijo con tono sarcástico y burlesco al gemelo mayor.

-Responda a mi pregunta-exigió.

-Hasta la luna roja, "la noche de los vampiros"-dijo mientras se paraba y se dirigía a la vitrina que resguardaba en su interior la muñeca de Zero, sonrió al verla.

-Sus ojos son muy hermosos, son puros...igual que los de tu hermano-dijo al ver ambas muñecas, las juntó a ambas y sonrió.

-Sasha-sama, por favor tenga cuidado, recuerde que las muñecas poseen...-fue interrumpido.

-Los ojos de sus dueños, lo se, lo sé...-dijo desganado.-Cuando sus ojos sean quitados de ellas...-dijo sonriendo sadicamente acariciando la mejilla de la muñeca con la apariencia de Shin para luego hacer lo mismo con la de melena platinada.

-Ellos moriran...-dijo Will  neutro con el flequillo cubriendo sus ojos al pensar en perder nuevamente a su amado hermano.

-jajajaj....que serio eres-dijo burlón.

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La clase nocturna llegaría en un día, Kaname ya había avisado a su séquito del asunto y ahora se encontraba informándole a Cross la respuesta de los nobles.

-Bien...Kaname-kun-dijo feliz el de anteojos.

-Me retiro, director-Dijo el castaño mientras se levantaba de su asiento y salía de la oficina de Cross.

Se dirigió a la casa de Kaien, debía organizar sus pertenencias para transladarse a los dormitorios de la luna, al entrar vió a Zero "mirando" la pared, se acercó a él y posó su mano en su hombro haciendo sobresaltar al chico de cabellos color plata.

-Zero...-dijo el castaño para que el menor lo reconciera.

-...Kaname eres tu...me sorprendiste-dijo de manera tierna, el sangrepura se sentó al lado de Zero en el sillón, hubo un silencio largo hasta que el Kiryuu decidió hablar.

-Kaname...necesito...decirte algo...-dijo con un hermoso sonrojo sobre sus mejillas.

-Que ocurre?-dijo algo preocupado el Kuran.

-Veras...desde hace tiempo...incluso...desde antes que ...con-convivieramos...yo-hizo silencio, el castaño lo observaba atentamente, ver a Zero en ese momento con aquel sonrojo hacia que sintiera el impulso de abrazarlo, se veía realmente adorable ante sus ojos.

-L-lo que tr-trato de...de decir...es que...T-te...t-te...yo...-decía mientras jugaba con sus manos.

Extendió sus manos hacia el rostro de Kaname y lo acarició, el Kuran veía atónito como el de cabellos platinos se acercaba a su rostro...sintió aquellos labios posarse delicadamente sobre los suyos en un tierno beso que duró unos segundos.

-Te amo...Kaname-susurró rojo, aquel susurro lo escuchó perfectamente. No sabía que responder...esa confesión lo tomó por sorpresa, Zero era muy tierno, aveces actuaba como un niño o era quisquilloso, claro que también era muy guapo y hacia que su corazón latiera rápidamente y sintiera el deseo de estar a su lado...pero aun así...Kaname se sentía confundido, ¿Qué sentía exactamente por Zero?.

-Zero...yo...-sus palabras fueron interrumpidas, por la puerta entró Yagari y Kaito, lo cuales miraron aquella escena. Uno con el ceño fruncido y mala cara y el otro con una expresión picara y divertida, el momento fue arruinado.

-Zero...debo alistar mis cosas...luego hablamos-dijo levantándose del sillón dejando a un desilusionado Zero detrás de él. Por una parte estaba aliviado...y por otra triste. ¿Qué sentía por Zero?, ¿Qué estaba por responderle en ese momento?...tocó sus labios y una sonrisa boba se formó en su rostro.

Ni el lo sabía...

CONTINUARÁ...

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