SHE

8.

Dice un dicho que las mejores personas llegan en el momento indicado. Creo que es cierto Shawn, porque mientras tú te empeñas en hacerme infeliz, Zack se ha empeñado en hacerme sonreír olvidándome de ti.

Aún siento sus labios sobre los míos, y seré sincera, me ha encantado.

No debería contarte esto Shawn, pero recuerda que te haré sufrir el doble.

- ¡Pero miren quien ha llegado! - dijo Sean.

Sonreí un poco incómoda ante la situación. Él a lo mejor estaba al tanto de todo, y me daba vergüenza verlo a la cara.

- Hola - susurré.

- ______, él es Zack, como ya sabes, hermano de Sean - habló Camy.

Empezaba a odiar la sonrisa que llevaba plasmada en sus labios. Pero así era ella, siempre ante cualquier situación andaba sonriendo y buscándole el lado positivo a todo.

Al contrario de mi.

- Mucho gustó - dije extendiendo mi mano de forma educada.

Zack aceptó mi mano, y por unos segundos me perdí en sus ojos.

Trataba de decirme algo que la verdad no sabía cómo explicarlo.

La cena transcurría de lo más entretenida. Y debía destacar la maravillosa personalidad del hermano de Sean.

Era extrovertido y muy espontáneo, podía pasar todo el día escuchando sus anécdotas y no me aburriría.

A parte de su mirada seductora, su sonrisa también era atractiva.

- ¿Y a que te dedicas ___? - preguntó.

Pero no fue su voz la que me desconcertó, sino la manera en la cual pasó su dedo pulgar por su labio inferior.

Tomaría como excusa los días de abstinencia que tenía, porque lo que estaba sintiendo en aquel momento sobre pasaba los límites de una mujer cuerda.

Tragué en seco.

- Actualmente soy actriz - respondí retomando mi postura.

- Eso ya lo sabia, solo quiero que te relajes un poco, estás algo tensa - dijo sonriendo.

Solté un suspiro.

- Lo siento -

- Descuida. ¿Qué te gusta hacer en tu tiempo libre? -

Mire de reojo a Camy, quien no decía ni media palabra al igual que Sean.

Estaban exagerando un poco.

- Ver alguna película, leer algún libro, cocinar, la verdad no lo sé. Hago tantas cosas en mi tiempo libre - respondí riendo.

Él asintió, por lo visto no le incomodaba que solo nosotros estuviéramos hablando.

- Zack también es actor ____, olvido ese pequeño detalle - habló Camy.

Interesante...

Las horas seguían su curso, y deseaba quedarme charlando una hora más con Zack pero no podía.

Aún tenía unos problemas en casa que resolver.

- Si quieres te acompaño hasta la puerta - propuso.

- Te lo agradecería Zack, Sean y yo debemos recoger la mesa - intervino Camy.

Rodé los ojos con diversión, ella haría todo para acercarnos.

Con Zack detrás, camine hacia la puerta principal.
Sentía de nuevo las mariposas en mi estómago, él me ponía nerviosa solo con mirarme.

- Ha sido una noche increíble ¿no? -

Moví mi cabeza dándole a entender un si.

- Desde luego, espero verte pronto -

- ¿Me permitirías darte un beso? Al menos para que me recuerdes sino volvemos a vernos -

Sentí los colores subir a mis mejillas.

Su vista no se apartaba de mis labios, y supe en ese momento que no se refería a un beso en el cachete.

Inhale y exhale antes de actuar.

Pase mis brazos por su cuello, y junte nuestros labios.

Al menos no iba a reprocharme por no hacerlo luego.