Madrid, España.
Luego de ese mágico paseo por la ciudad de Toledo, regresamos a Madrid, ya casi era media noche, me acompaño hasta mi piso y para sorpresa de él y creo que mía también, lo invité a pasar.
No se si fue el efecto del vino que me tomé, creeré que sí, lo cierto es que tenerlo cerca no me permitía pensar con claridad. Sin mediar palabra lo tomé del cuello y lo besé, al principio no me respondió el beso, debió ser porque no se lo esperaba, pero cuando lo hizo no quería soltarme. En algún momento de la madrugada cuando el beso finalizó, le pedí yo a el una oportunidad, tal vez sea él el que me ayude a sanar. Creí que el amor volvería a unir mis partes rotas.
Pasaron los días, llegó una nueva semana, ambos volvimos a nuestras rutinas. Como prometí me puse al día con los trabajos de la universidad y volví a clases. Por la noche quise darme un escape para liberar tantas emociones que me dejó el fin de semana, me fui directo de la universidad a la academia, quería volver a escuchar el fantástico sonido de los tacones al chocar con la madera siguiendo un compás, que en ese caso mi grupo estaba preparando una Soleá por bulerías, sin duda mi palo favorito.
Me perdí por dos horas en los tristes acordes, sintiendo y viviendo el dolor que expresaba la melodía, hasta el punto de no pensar, solo me deje llevar por el compás que me envolvía lentamente en la soleá para luego ir subiendo y acelerando mi pulso hasta convertirse en bulerías dejandome sin aliento.
Sin darme cuenta, ya casi llegaba de nuevo el fin de semana, la rutina me envolvió sin darme cuenta.
Dos meses después
El cuento de hadas que recree en mi mente era muy dificil hacerlo realidad, ni para Francisco ni para mí estaba siendo fácil la relación. Nuestras personalidades chocaban constantemente, él era tan paciente, amable, respetuoso, tan atento y cariñoso, mientras que yo explotaba sin darme cuenta, no se me estaba haciendo fácil controlar mi mal carácter ni doblegar mi orgullo. No lograba acostumbrarme a tener novio, siempre había sido tan independiente, me valía por mí misma, nunca daba explicaciones ni avisaba cuando salía o llegaba a casa. Realmente fue un cambio drástico. Pero como realmente lo quería debía aprender a controlarme, por el bien de ambos.
Pero no siempre hubieron peleas, también compartíamos momentos únicos. De vez en cuando cocinabamos juntos, salíamos al cine, al parque o simplemente nos sentábamos a ver televisión durante horas, no importaba lo que viéramos sino estar en la compañía del otro, la mayoría de las veces yo elegía la programación, casi nunca él, y no por no querer sino que yo con un puchero lo convencía de ver lo que yo quería.
Su pecho era mi lugar favorito en el mundo, me sentía protegida, cuidada pero sobre todo amada.
Nunca pensé amar con tanta intensidad en tan poco tiempo. Si algún día llegará a perder a Francisco, perdería mi razón de amar y sonar.
No imagino mi vida sin él.
Hola chicos, aquí les dejó un capitulo corto. Es el resumen de la relación de Claire con Francisco. Muy pronto tendrán mas detalles.
Besos...
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Icewoman
Teen FictionConoce a Lena, Raychel, Claire y Camila... 4 personajes, 4 historias, 4 países pero con algo en común: un corazón frío y gélido que solo puede ser derretido ante las llamas del amor. nadie nace siendo frío, pero las experiencias las han enseñado a...