Look at Me- Greyson Chance | EDITANDO|

Capítulo 02: "sun"

Caminé hasta poder dar con un lugar tranquilo, en el que una silla plegable para tomar sol me esperaba. Me recosté, con cuidado, cerré mis ojos y suspiré se sentía bien. oh dios mío. fruncí el ceño cuando esa sensación desapareció. 

subí una mano y la utilicé como si fuese la visera de alguna gorra, cubriendo el sol de mis ojos y los entreabrí. había alguien ahí

¿quién se atreve a interrumpir mi bronceado?

—uh, me estás tapando el sol -murmuré incómoda, pero la sombra no se movió-  

—seh, es a propósito -rió, eso me causó escalofríos y era una voz extraña. intenté no reírme-

—uh -gruñí, volví a entreabrir un poco los ojos, sin poder apreciar bien el rostro, solo se que es un chico, casi de mi mista edad, y joder, alto. - ¿te mueves? 

—pero qué mal educada -murmuró, como si estuviese sorprendido e hice una mueca, su voz comenzaba a darme risa- 

—¿Te puedes mover? por favor -sarcásmo, te invoco-

—¡claro que sí! no hay ningún problema -su risa resonó en pequeñas carcajadas. la luz volvió a calentar mi cuerpo y entonces oí como resonó la silla junto a mi. se había sentado- las cosas se piden bien -murmuró- ¿qué haces aquí?

—huh, ¿debo contestar? -fruncí el ceño- ¿por qué preguntas?

—Porque estoy aburrido, no hay nada más que ancianos con dinero por aquí, créeme, ya lo he recorrido entero y hay solo gente engreída, es una molestia, oh; espera, ¿Eres pariente de alguno de los que acabo de insultar? -reí y negué- 

—viajo sin familia, he ganado un concurso

—oh

—Gané ir en estre crucero, y la posibilidad de conocer a Greyson Chance -el tan solo decir su nombre, hizo que mi estómago se contrajera, Greyson era el ídolo perfecto. mis mejillas quemaron-

—¿enchancer? -su voz divertida me provocó una pequeña carcajada y asentí-

—seh -me encogí de hombros, debo verme completamente ridícula hablando con los ojos cerrados, dios- lo soy desde hace como alrededor de dos años -mis mejillas quemaron con mayor fuerza entonces- 

—¿de dónde eres?

—podrías ser un asesino, no te diré de donde soy -reí y negué- pero vengo de américa del sur. 

—Oye -el chico volvió a reír, pero ahora a carcajadas, me estremeció, era una risa hermosa- ¿eres latina? eh, por lo tanto, hablas español ¿verdad?

—Muy bien, has acertado, en serio, tus habilidades de lógica están por sobre lo normal, mereces un premio o algo, o dios. hay que llamar a los rusos  -reí de mi propia broma- ¿Qué clase de latina sería si no supiese español?

—podrías, uh, ¿decir algo en español?

—¿Algo como qué? -reí-

—tú eres la que habla español, no lo sé -rió y sonreí

—no lo sé 

—huh, ¿que significa eso?

—no lo sé alcé una ceja- 

—¿no lo sabes?

—significa no lo sé -reí cuando intentó hacerlo, en algo que en realidad fue incomprensible- tu español apesta -reí y él también. su risa sonaba extraña, pero era agradable- bueno, tengo que irme -murmuré-