Capítulo XVII ☾

78 10 0
                                    

Me siento ansiosa. Muy ansiosa y nerviosa. Tanto que tengo ganas de vomitar, y es que hoy es sábado. Hoy tendré mi primera cita con el hombre de asombrosos ojos azules. Aunque ¿sigue siendo una cita? Eso creo.

No puedo dejar de moverme de un lado a otro mientras muerdo la uña de mi dedo pulgar con nerviosismo. Tengo muchos pensamientos en mi cabeza que me están mareado y mi corazón no para de latir con rapidez amenazando con salir de mi pecho de un momento a otro.

¿Que por qué estoy nerviosa? Porque no quiero arruinar toda la cena con la familia de Zachary. Sí, él muy condenado me aviso el miércoles por la tarde, cuando pasaba a buscarme a la Universidad como se le está haciendo costumbre, lo cual es muy lindo pues puedo verlo recostado de su Harley mientras me espera en la salida y....Esperen, ¿de qué hablaba? Ah sí, de la cita. La cosa es que me dijo que nuestra cita sería en la casa de sus padres pues él les hablo sobre mí y ellos, sorprendidos y entusiasmados, palabras de Zach, lo obligaron a convencerme de ir a visitarlos éste sábado. Y me convenció luego de una ardiente sesión de besos.

Lo sé, es un tramposo.

En fin, ahora me encuentro totalmente lista esperando en la sala. Y cuando digo lista me refiero a mi vestimenta pues mentalmente no estoy preparada.

Rayos.

— Quédate quieta, mujer. Me estás mareando — dice mi amigo que se encuentra con su entrecejo levemente fruncido recostado del marco de la puerta de la cocina mientras se come unas golosinas que de seguro saco del refrigerador sin permiso. Normal en Alex.

— ¿Cómo puedes pedirme que me quede quieta cuando estoy a punto de sufrir un paro cardíaco? — medio grito sacudiendo mis manos.

Tal vez estoy exagerando pero no me importa. Estoy de verdad hecha un manojo de nervios justo ahora.

— No digas tonterías — musita mientras pasa por mi lado para tomar asiento en el sofá y mirarme desde él con diversión. Está disfrutando de mi desgracia —. Estoy completamente y absolutamente seguro que ellos te amarán — se encoge de hombros regalándome una sonrisa sincera.

— ¿Tú crees? - cuestiono mientras tomo asiento a su lado y comienzo a morder mi uña, de nuevo.

Mala manía, también lo sé.

— Estoy convencido — contesta sin borrar su sonrisa, ésta vez si logra contagiarme por lo que aparto mi mano de mi boca para sonreírle con agradecimiento sintiéndome un poco más relajada, sólo un poco —. Además, ¿no dijo él que eras la primera chica que lleva con sus padres? — formula haciendo que de nuevo me sienta peor que antes.

— Eso no ayuda, Alex — indico en un gruñido.

— Lo siento — farfulla con una sonrisa que pretende ser inocente —. Lo que trato de decir es que si él te quiere presentar a su familia es porque de verdad quiere algo formal contigo, algo serio. Y debes recordar que estas saliendo con Zachary no con sus padres. Ese hombre te quiere tal y como eres. De verdad lo hace.

Sus palabras logran tranquilizarme por lo que tomo un par de respiraciones hondas para terminar el propósito de sus palabras.

— Eso es muy lindo, Alex — susurro dándole un rápido abrazo —. Tienes razón — asiento con la cabeza mientras sonrío.

— La tengo — se encoje de hombros con falsa modestia haciéndome rodar los ojos antes de reír.

En ese momento la puerta principal suena dejándonos saber que alguien está entrando, de manera inmediata nuestras miradas van hacia las dos personas que entran con una sonrisa, una más grande que la otra.

Custos Lux [#1 Saga Fantastic Creaturae]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora