Capítulo XXIII (Parte 2) ☾

50 10 0
                                    

— Chicos, es hora — nos informa Warrick en tono neutro mirándonos de hito a hito, la seriedad en él es tan poco común que eso activa mis alarmas.

Un escalofrío cruza mi espalda al entender sus palabras pero no dejo ver mi temor, aunque parece que de igual forma Zach lo nota pues toma mi mano dando un pequeño apretón en ella. Sin más, salimos al patio seguidos de todos los guardianes, en ningún momento suelta mi mano, solamente nos dedicamos a escuchar las órdenes de Sal quien nos indica por donde saldremos.

No puedo evitar mirar el cielo despejado en donde las estrellas junto a una luna de color rojizo iluminan el paisaje a nuestro alrededor. Tengo que dar un par de respiraciones para calmar mi ritmo cardíaco, aunque a decir verdad no sirve de mucho. Dejo de mirar la Luna que sólo me hace saber que esto de en realidad está sucediendo, que no es un sueño.

Observo al hombre a mi lado y llamo su atención dando un apretón en su mano, cuando sus ojos azules se topan con los míos olivas no lo pienso dos veces y lo tomo de su chaqueta hasta acercarlo a mí para así unir nuestros labios en un beso apasionado, él sólo tarda un par de segundo antes de reaccionar y devolverme el beso con la misma ferocidad. Sus manos toman mi cintura con posesividad mientras yo entrelazo mis manos detrás de su nuca atrayéndonos más a nuestros cuerpos sin dejar que ni el aire pase entre nosotros.

— Te amo — musito dejando pequeños besos en su boca después de que el beso baja de intensidad.

— Yo también te amo, Olive — dice de la misma manera —. Nunca lo olvides — murmura tomando mi rostro entre sus manos mirándome directamente a los ojos.

— No lo hagas — suplico con voz débil negando haciendo que frunza levemente el ceño.

— ¿Qué?

— Despedirte — indico en una mueca —. No lo hagas.

Por un momento parece querer decir algo pero no lo hace, en cambio deja un corto beso en mis labios antes de unir nuestras frentes, cierro mis ojos mientras siento como su nariz acaricia la mía; simplemente me olvido de todo a nuestro alrededor y dejo paso a los recuerdos que he vivido con este hombre al cual amo. Invoco cada momento aferrándome a ellos, deseando que nuestra historia fuera lo suficientemente distinta como para no tener el final que quizás se acerca.

Ya no me quedan muchas fuerzas como para seguir siendo positiva.

El sonido de una trompeta o algo parecido, un cuerno creo, me regresa al presente. Miro en dirección de dónde provino el sonido y noto como todos se preparan para adentrarse al bosque por lo que comprendo que esa ha sido la señal de nuestra salida. Rápidamente nos acercamos al grupo, Zach me da un casto beso antes de irse a tomar su lugar, el cual es junto a los guardianes que entrarán primero al bosque. Un nudo se forma en mi estómago observo como se aleja.

Espero que todo salga bien.

Tomo un par de respiraciones antes de acercarme a algunos de los que partirán de atrás cubriéndoles las espaldas a los primeros guardianes. Los únicos que logro ver son a Warrick, Kyra y Bill, por lo que supongo que el resto se encuentra junto a Zach.

— ¿Listos? — pregunta el pelinegro obteniendo una respuesta afirmativa por parte de todos.

Decido tomar las armas que me extiende el castaño para después empezar a dirigirnos al gran bosque frente a nosotros. Con cada paso que doy mi ritmo cardíaco aumenta obligándome a tener que tomar varias respiraciones para tratar de regularizar mis latidos.

Cuando estamos un poco más adentro las sombras hacen acto de presencia moviéndose de formas rápidas entre los árboles. La densidad en el ambiente deja en claro la presencia de estos seres oscuros y no es extraño notar la incomodidad ante este cambio de atmósfera pero nadie se detiene. Tomo con fuerza la daga al sentir mis manos temblar por el miedo y la adrenalina.

Custos Lux [#1 Saga Fantastic Creaturae]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora