Qué pasaría si...
Tu novio te deja el día de tu cumpleaños, encima se pone a llover y no llevas paraguas, vuelve tu ex-novio y necesitas compañero de piso porque tus padres se niegan a ayudarte para que vuelvas a casa con ellos. Y todo esto en menos...
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7 de enero
Ya habían pasado las vacaciones de navidad y volvía a casa. Me fui a pasar las vacaciones con mi famila. Aproveche para aclarar todos mis sentimientos, habían pasado muchas cosas últimamente que no entendía. Pero ahora ya estoy segura y creo que podría ser la primera vez que de verdad lo siento.
Abrí la puerta y solté las maletas de golpe. Miré toda la casa conteniendo la respiración, atemorizada por lo que venía procedente de mi garganta.
No lloraré. No lloraré. Repetía mi subconsciente. Mi mano se acercó a su puerta temblando y la empujó.
No, no, no... Otra vez no. Me arrodillé y apoyé mi cabeza en la pared. Él no podía hacerme esto... Se lo conté todo. Miré la mesa que compramos, tenía una carta de color azul. Me quedé mirando ese papel hasta que se volvió borroso y todas las cosas de alrededor se desdibujaban. Me levanté del suelo con lágrimas silenciosas corriendo por mis mejillas.
Agarré la hoja y cerré los ojos con fuerza. Mi cuerpo entero empezó a temblar y brotaban de mí los sollozos que antes intentaba controlar.
Va, Eleonor, si sigues llorando como una estúpida no podrás leer ni una palabra.
La furia y la impotencia me corrompieron. Abrí los ojos y vi a una chica desconocida en el espejo. Apreté los puños arrugando la hoja entre mis manos y busque deseperada algo que pudiese lanzar. Cogí una de las almohadas y se la tiré al espejo. "Adiós hermosa" lo primero que me dijo... Ya hermosa, la chica de ese espejo no es hermosa decía mi mente. Nos acercamos una a la otra hasta que por fin nuestros puños se abalanzaron contra el cristal. La veo caer en el suelo en pequeño trocitos brillantes. Me giré a buscar la carta y con todas mis fuerzas intenté romperla en trocitos. Pero no podía. Mi mano fue a uno de esos cristales llevándose un corte.
-¿Leona? ¿Estas ahí?
Al rato sentí como los brazos de Mason me rodeaban desde atrás, tan fuerte que impidía que me pudiera mover. Me sacudí intentando librarme de su agarre pero era imposible.
-Ey, pequeña ya basta.- me pidió con voz tranquila y dulce.
Lo oí pero fingí no hacerlo. Y me seguí moviendo, cuando abrí la boca para replicarle un sabor salado se metía en mi boca.
-¡Sueltame! Por favor, por favor- Poco a poco dejé de intentar soltarme y simplemente me giro para llorar en su hombro.
Me he dejado vencer. Me he rendido. Me encuentro débil y cansada.
Mase acercó sus labios a mi frente y me cogió como una princesa.- Ele - Dijo con voz firme.- Sal un tiempo de esta casa, vente con nosotros.
-No he llegado a leer la carta.
-No te preocupes por eso pequeña.- Me metió en el coche y aceleró hacia su casa.
☔☔☔
15 de enero
-Eleonor tienes visita- La voz de Abril llegó hasta nuestra habitación.
-¿Es él?- Dije nerviosa.- Bueno en verdad no me importa.
-No cariño, es Frank.- Fruncí en ceño. Iba a abrir la boca para preguntar pero Abril me respondió antes.- No se que quiere. Me ha dicho que solo hablará contigo.
-Bueno, en cinco minutos estoy.
Bajé las escaleras y encontré a Frank apoyado en la puerta.
-Hola Frank- Le di dos besos y le cogí la mano que me ofrecía.
-Leona, ¿cómo estas pequeña?
-Bueno, he estado mejor, ¿y tu?
-Pues, he estado pensando en muchas cosas... Como lo nuestro, en Noruega, en mi vuelta, en los cambios, en todo eso.
-Oh, vaya... ¿Y a qué conclusión has llegado?
-Em, no se si decirte.- Se rascó la nuca nervioso.- Bueno, pues, que yo... Te amo Eleonor, te amo desde siempre y no dejé de hacerlo nunca.
-Pero... Yo
-No, no lo digas.- Soltó una risa triste.- Sabes... A veces conocer la verdad resulta mucho más doloroso que creer las mentiras. Así que no lo digas, y mienteme por favor... ¿Crees que podrías darme una oportunidad, solo para demostrarte que todo lo que he dicho es verdad?
-Si - Dije asintiendo, me frote un ojo antes de que una lágrima cayese.- Si te la doy- Dije convencida. A lo lejos vimos a Thalia con un chico del brazo.
-Hola Frank, guapo.- Se le acerco a dar un beso.- Ah... Eleonor.- Dijo como enfadada.- Este es... ¿David?
-Damian, encantado- Me dio dos besos y le apretó la mano a Frank.
-Bueno nosotros nos vamos, ¿verdad David?- Le cogió de la mano y tiro de él.
-Que raro, ¿por qué esta enfadada contigo?- Me preguntó mi acompañante mientras veíamos como la pareja se iba. Me encogí de hombros y no le di importancia.
Lo siento, pero bueno os traigo un maratón de 3 días seguidos y últimos capítulos siento decir. No creo que cuando acabe haya extras pero nunca se sabe.
Os amoo. Chao ❤❤(Editado)
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