❝ ━Por favor, déjeme salir.
━¿Crees que soy idiota? Jamás lo haré. Eres mi juguete.
━P-Por favor, Jungkook.❞
✧taehyung, un adolescente normal.
✦jungkook, trabajador de una de las empresas más peligrosas de prostitución en corea.
━portada hecha por:...
Dios, su cuerpo estaba lleno de hematomas, varios moretones y bañado totalmente en sangre.
¿Por cuánto tiempo había estado inconsciente? ¿Un día, dos, una semana? No lo sabía, solo sentía que su cuerpo moriría por el exceso de golpes.
Su recuerdo era nulo, había sentido un fuerte golpe en la cabeza y muchos de estos después, pero hasta ahí.
—M-Mi cabeza, ah. —quiso quitársela y lanzarla.
No podía levantarse, sus piernas no le funcionaban.
Ni sus brazos, que al verlos pegó un grito estruendoso.
Se sostuvo de la cama y cayó de nuevo, ¿para qué lo intentaba si no podría hacer nada después?
—Mierda. —gimió. —¡A-Ayuda! —sollozó. —¡Por favor.. Por favor, sálvenme! —gritó más fuerte, pero fue en vano. Su cuarto tenía llave y el hueco pequeño de este había sido tapado.
Se rindió y prefirió dejar caer su cuerpo por el suelo junto a las machas de sangre.
Recordó a Jeon Jung Kook. Ese hijo de puta lo había metido en todo este lío. Pero, ¿era él el que lo había golpeado? Y no, se dio cuenta que no.
Prefirió pasar de alto la parte de recordar y sollozó en silencio.
—Y-Yo no quiero es-estar aquí más. —pronunció titubeante por el frío. —Quie-Quiero a mi mamá, qui-quiero q-que esté bien. —abrazó sus piernas y se dejó caer en la inconsciencia de nuevo.
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Flashback
—¡J-Jefe ya no! —gritó—¡Me duele mucho, pare por favor! —gimió en lo alto.
Después de que el azabache muchacho se fuera, el Jefe no desaprovechó un segundo más. Digamos que poseía algo en la sangre llamado: sadomasoquismo.
Cuando despertó de su sueño por aquel golpe del fierro, el viejo traía consigo distritos materiales como fustas, látigos y esposas.
Agarró sus brazos y en las muñecas colocó las esposas.
—Para que no se te ocurra ninguna otra estupidez. —escupió.
Volteó al castaño dejando su trasero a la vista de cualquiera.
Agarrando el segundo de aquellos objetos dio diez firmes látigos.
