little boy × vminkook

40 ilysb parte dos

nota: pongan la canción desde ahora ya y si se acaba la ponen de nuevo.

JungKook besó la nunca de JiMin, lo que dejaba libre la máscara, despacio y con dulzura, logrando que el rubio se estremeciera en su puesto. Sentir sus labios era como probar nuevamente aquella droga que te mantuvo por mucho tiempo en síndrome de abstinencia, pero no era algo tanto terrible. Park quería quitarse la máscara y que le besara los labios, pero no lo hizo debido a que no sabía cuáles eran las intenciones del pelinegro.

-JiMin hyung- susurró Jeon -¿Po-podemos ir a su departamento?

-Debo hablar con mi jefe, pero sí, sí podemos.- habló desde dentro de la máscara temiendo a que no se escuchara lo suficiente. -¿Qué pasará con tu turno?

-De hecho, yo debí terminar mi turno luego de tomarles la orden - río contra su piel y se estremeció -Quería hablar con usted.

-¿Eso era lo único que querías hacer?- preguntó JiMin con una sonrisa en su rostro, disfrutando de que esta no podía notarse debido a la máscara.

-No, hyung- JungKook volteó a su hyung y posó ambas manos en la máscara -Quiero besarlo, quiero besarlo mucho.

Jeon quitó la máscara del rostro de JiMin y este último se lanzó hacia el para besarlo, pero el menor fue más rápido y lo sujetó de los hombros suavemente. El rubio le miró confundido, sentía que no podía leer completamente a su contrario. Sus ojos decían algo, pero sus acciones otra cosa.

-Pensé...

-Aún no, hyung.- El pelinegro besó la frente de JiMin con delicadeza dejando que sus labios rozaran aquella parte luego de la acción-Porque siento que cuando comience ya no podré detenerme.

Como un helado, JiMin se sentía como un helado expuesto al sol en pleno verano. Las palabras de JungKook simplemente lo derretían, pero el contacto de sus labios contra su piel era algo que no podía definir en palabras. Necesitaba más, necesitaba más de JungKook por lo que le pidió solo con la mirada que desbloqueara la puerta y este pareció entender, pues en menos de cinco segundos ya estaban fuera del baño. JungKook quitó el cartel que decía "en mantenimiento" de la puerta y miró a su hyung con una tierna sonrisa en el rostro.

-Vigilé quien entraba y salia del baño por un rato. Entré cuando noté que no había nadie más que usted en el.

JiMin asintió dándose cuenta no había notado nada de ello y ni siquiera le había importado si alguien estaba en el baño en el momento en que hablaron. Toda su atención estaba puesta en nadie más que en JungKook.

Se volteó en dirección a dónde estaba la mesa ocho, pero notó que estaba vacía. Su cuerpo se tensó y se vió a sí mismo siendo amonestado por su jefe y luego despedido. No quería eso, a él le encantaba su trabajo, pero, de todas formas, no tenía nada que reclamar. Ambos chicos se acercaron a la mesa y lograron ver que había un papel en esta. JiMin lo tomó entre sus pequeños dedos, en comparación con los de Jeon, y leyó lo que decía.

-Soy mejor que el FBI- pronunció el rubio con los ojos fijos en la nota.

Entonces recordó la extraña actitud de su jefe en el último tiempo. Como lo llenaba de preguntas de repente, cuando inventó el día sin teléfono después de que le pidiera de manera algo extraña que desbloqueara el móvil frente a él y así un montón de cosas más que JiMin definió como abuso de poder más que técnicas de investigación. Suspiró relajado, aún mantenía el trabajo y debía darle gracias a su jefe.

-Tu jefe está demente, pero es un genio - habló JungKook mientras releía la nota mentalmente.

-Sí, puede ser, pero se le olvidó algo importante. Dejé el carro en casa- JiMin hizo un puchero mientras miraba directamente a los ojos de JungKook. Este no espero más y lo abrazó -Ahora debemos llamar a un taxi.