Un terrible comienzo da un trágico final

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- Ya pasaron dos meses desde que se empezó a filmar y la señorita Romanov no ha vuelto a aparecer 

- Escuché que dejaron la compañía Romanov fuera del proyecto, el presidente de LME declaró que solo trabajaría en familia diciendo que la compañía rusa era aún una desconocida a diferencia del Sr. Smith que al parecer es muy allegado a la familia Takarada

- Tú siempre tan informada Yuuki - sonrió Yoss la modelo americana que había sido invitada para participar en algunas escenas de la película, al saber que Kyoko sería la protagonista aceptó encanta, había quedado prendada de la joven japonesa al verla actuar y además quería preguntarle por su hermanito...

- No es para tanto Srta. Thompson, es solo que como maquilladora siempre trato con muchas personas y dicen esas cosas... Como me hubiera gustado que esa señorita participara de este proyecto, en América es muy famosa porque parece un amuleto de la suerte, siempre hace que los proyectos tengan éxito

- Si he escuchado mucho de ella, por cierto Yukki deja de llamarme por mi apellido, solo dime Yoss - la modelo guiñó un ojo a la oyente - no entiendo esa obsesión de los japoneses por ser tan formales, como que crean una brecha entre las personas para no acercarse... ¿Tú que crees Sarah? -Sarah estaba sentada al pie de ellas mientras arreglaban su cabello, esta fingía no oírlas mientras simulaba oír música con los audífonos puestos y un libro abierto, de vez en cuando tatareaba alguna melodía clásica para dar más crédito a su acto

- ¡Sarah! - llamó nuevamente pero esta vez un poco enojada porque esta no le prestaba atención ya se conocían de antes, pero Sarah parecía siempre concentrada en su mundo - ¡Sarah préstame atención! - le tiró una toalla para que la aludida le prestara atención

-¿Ah? ¿Disculpa? - volteo a mirar mientras se quitaba los audífonos - ¿Qué quieres?

- Preguntaba por que los japoneses son tan distantes 

- Bueno imagino que eso les ahorra tiempo y dinero en las festividades, no tienen que ser hipócritas con tanta gente solo con su familia

- ¡Eres una odiosa! ¡Como siempre! 

- ¿Para que me preguntas estupideces? ¡Al menos intenta aprender el idioma para que no tengas que estar con la pobre maquilladora como tu asistente personal! Por cierto tú deja de consentir esta inútil al fin y al cabo casi todos hablan los dos idiomas!

- Sé algunas frases, pero es complicado ¡ey! ya te fuiste del tema, ¿conoces la compañía de Romanov?

- ¿Romanov? No ¿Quien es?

- Olvídalo, le preguntaré a Kyoko, ella al menos si vive en este mundo

- Eso es lo que tú crees... hablando de eso, tengo que irme le prometí que ensayaríamos ¡Oh ahí viene! Kyoko linda, ¡sácame de aquí!

-Hola chicas ¿algo nue... - Kyoko como siempre se acercó a saludar pero Sarah la tomó del brazo sacándola del lugar 

 - ¿Que te pasa Sarah? - preguntó en voz baja casi susurrando

- Nada solo que no me gusta que estés cerca de esa... chica, ha estado infiltrando información de Irina, buscando la manera que entre al proyecto, pero ya sabes que por nada del mundo dejarán que este cerca de nosotros, al menos no mientras estés tu aquí

- No me preocupa que infiltre información, sino las personas que están con ella, quiero saber quienes son sus aliados, hace unos días un supuesto periodista preguntaba en mi antiguo apartamento por Haru, ese es un límite que no dejaré que pase esa horrible mujer

- Kyoko, a esa clase de mujeres se les llama ¡PERRAS! no horribles - ambas se empezaron a reír a carcajadas

- Eres muy mala onee-chan, pero aún así yo tengo que ser una niña buena 

Detrás del escenario!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora