V I A J E

2.9K 284 71
                                    

(...)

     —Tengo una duda —dije a Alonso

     La película que habíamos visto recién había terminado y yo estaba recostada sobre sus piernas.

     — ¿Cuál es tu duda? —Preguntó Alonso mientras acariciaba mi cabeza con su mano

     — ¿Cómo le haremos mañana para ir a la escuela?, digo, las personas pueden pensar muchas cosas si llego con la misma ropa del día anterior y de la mano de mi novio

     —Cierto, entonces... No vayamos a la escuela

     —Suena razonable

     —Lo sé, soy un genio

     —Y a ver querido genio, ¿qué haremos mientras no estamos en la escuela?

     —Una fuga exprés

     — ¿Fuga exprés?

     —Ya sabes, un viaje improvisado

      — ¿A dónde?

     —Eso es lo que lo hace improvisado

      —Bien pero... ¿En dónde piensas viajar?, no me digas que Sabrina también tiene el auto el cual puedes tomar

      —No pero tenemos tu camioneta

      — ¿Mi camioneta?, pero... ¿Qué no se quedó afuera de aquel bar?

     — ¿En qué crees que te traje hasta acá?, no aguantaría traerte cargada desde allá

     — ¿Me estás diciendo gorda acaso?

      —No te dije gorda, quise decir que la distancia es muy larga pero como sea, ¿quieres fugarte conmigo?

      Clavó su mirada azul sobre mis ojos lo cual hizo que quedara completamente embobada.

     —Normalmente diría que es una muy mala idea pero no puedo decirte que no si me miras de esa manera —dije mientas miraba el azul de sus ojos

     —Entonces es un: "Sí Alonso, quiero ir contigo" —Dijo limitando mi voz de nuevo haciendo que ambos riéramos levemente

      —No sé qué haría sin ti —le dije

     —Probablemente estarías en casa durmiendo y no te culparía, ya es tarde

     —Cierto —hice una mueca— ya deberíamos de ir a dormir si mañana pensamos hacer tu "fuga exprés "

     —Tienes razón —me quité de sus piernas para posteriormente pararme, él me siguió— te acompañare al sótano

     —No quiero dormir sola allá abajo —hice un puchero

     — ¿Por qué no?, tú misma viste que ese lugar es genial

     —Sí pero quiero estar contigo

     —Está bien, no complicaré más esto, Ámbar, ¿quieres dormir conmigo en el buen sentido?

     — ¡Sí!

     —Ok —me dio la espalda— sube a mi espalda

     — ¿Qué?, pero si yo puedo caminar sola

     —Bien, si no quieren no...

     —Sí, ¡cargame!

     Me subí a la espalda de Alonso y este me cargó.

PsicópataDonde viven las historias. Descúbrelo ahora