Siento como mis piernas se vuelven débiles, como si perdiera el control de mi cuerpo con esa confesión y agradezco que me esté sosteniendo de la cara porque si no ya estuviera desmayada en el piso. ¿Cómo puede decirlo tan serio y sin sentir vergüenza?
Obvio es un adulto, ya es una persona madura Sofía ¿qué pensabas que estabas tratando con un ñiño de 3 años¿ ¡ps no!
Me rio nerviosa y no puedo seguir viendo sus ojos, así que rompo el contacto visual, el me suelta feliz.
-La próxima vez que te moleste algo, solo dímelo, porque no soy adivino Sofí- ordena, yo solo escucho y asiento como si estuviera en automático
-Bueno es hora de que regreses, no quiero ser la causa por la cual mañana no te quieras levantar-
Si supiera que me levanto solo porque lo veré en la escuela
Nos damos un último beso, antes de regrese a la casa, parece que estoy volando en una burbuja, estoy más que feliz.
Han pasado ya un mes desde que Jace me confesó que le gustabá, nos hemos estado viendo en su departamento, o pequeños ratos en la noche en la parte trasera de la casa, si es una lástima que no podamos salir por las calles como una pareja normal, si eso me gustaría ser una pareja normal pero no me quejo y pensándolo bien qué más puedo pedir.
Hoy era viernes el día que daba pie a estar con Jace mas de par de horas, llegue a su departamento me recibió con un pequeño beso, creo que nunca me iba acostumbrar a las sensaciones que me producía.
Me dirigí a la sala, sentándome como indio en la sofá, cuando Jace entro a la sala con un tazón de palomitas y par de sodas que dejo en la mesita del centro, tomo el mando de la televisión para meterse a la aplicación para escoger una película.
-¿Qué película quieres ver Sofí?-dijo dándome una tierna sonrisa
-Mmm...No sé.. sorpréndeme- sonreí divertida –No soy una miedosa así que puedo aguantar todo-
-Eso ya lo veremos princesa…- dijo seleccionando la película
Respire profundo cuando la pantalla se ilumino con el nombre “the unborn”.
No sé en qué momento paso pero termine arriba de su regazo acurrucada, él está todavía prestando atención a la película, yo ya no tanto, me concentro en su cara levanto mi mano y la paso suavemente por su mejilla, el cierra los ojos al sentir el toque, repite mi acción hasta llegar a sus labios que son finos y suaves los cual muero por besarlos, y no aguanto más coloco ambas manos en su cara me acerco dando pequeñas mordiscos y besos por su mandíbula sintiendo su corta barba.
Sigue con los ojos cerrados pero abre su boca para decir algo, pero rápidamente lo silencio con un beso ahogado, el cual no rechaza lo cual me da confianza.
El coloca sus manos en mi cintura, pero no se anima a moverlas, y yo quiero que lo haga, quiero sentir su toque, mis manos están en su pecho tocándolo lentamente, después acaricio sus brazos y tomo una de sus manos y la voy bajando lentamente hasta que él se detiene.
-Sofí, no- intenta resistirse pero no me doy por vencida
-No estamos haciendo nada malo-
-No, no- se lamenta-
-¿Por qué no?- digo dándole pequeños besos- Yo quiero que me toques- y vuelvo a besarlo-
Está tenso puedo sentirlo pero necesito que se relaje, no estamos haciendo nada malo, no es algo que yo no quiera, y sé muy bien que él nunca me haría daño, parece pensarlo una eternidad pero la chispa vuelve aparecer cuando coloca uno de sus manos para atraerme más hacia él, mientras que la otra empieza a recorrer mi cuerpo poco a poco justo como quiero.
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Mi querida princesa
Novela JuvenilTodo cambia una noche cuando Sofía James, una chica hermosa de 17 años que le gusta romper las reglas o van más allá de los límites una veces al año, tiene un encuentro inesperado con un apuesto joven que piensa que no volvera a ver, pero dicen que...
