Mi Estupido Jefe

2.Mi jefe

Mark insistió en pagarme la ropa que utilizaría diarimanete. Me negué como siete veces, pero tuve que aceptar. En mi vida había visto a un señor tan cabezota como Mark Collins.

Después de una larga tarde/noche de compras con Megan, que resulta ser una de las chicas mas simpaticas de la historia, ya vuelvo a mi dulce hogar.

Voy cargada como una mula llena de bolsas, llevo hasta una de Victoria's Secret por culpa de Megan, quien dijo que era un regalo de bienvenida de su parte.

Es de lo mas complicado esquivar a todas las personas que hay por las calles, voy haciendo zig-zag con todas las bolsas hasta que ocurre una desgracia.

-Tu eres idiota?- me grita el chico.

-Me lo dices a mi?! Acabas de derramar tu café en mi camisa- grito al igual que el.

-Querras decir que tu te has derramado mi café en tu camisa! Enserio por dios!- grita levantando los brazos.

-Espero no volver a verte estúpido. Donde quedaron tus modales? Una disculpa serviría - ruedo los ojos.

-Perdona niña pija, pero no tengo porque disculparme. Toda la culpa es tuya.

Ruedo los ojos y lo ignoro completamente. Retomo mi camino hacia mi casa sin mirar atrás. Y empiezo a maldecir al estúpido chico de ojos grises.

Llego a mi piso y dejo todas las bolsas en el sofá de la entrada, me cambio la camisa manchada por una sudadera simple. Todo seguido me voy a casa de los Parker a cenar.

Cuando llamo a la puerta no me abre Janin, me abre un chico muy alto, por lo menos dos cabezas mas alto que yo, de ojos azules y rubio.

-Emm....

-Mak! Porfin llegas- dice Janin poniéndose al lado de el chico.-Pasa. Te presento a mi sobrino Derek. Derek ella es la vecina y la que quida a los niños en su tiempo libre.

-Encantado- dice y levanta su mano.

Yo la estrecho y murmuro un encantada.

-Hola diablillos- me siento entre los dos.

-Hola Mak.

-Mak, que tal la búsqueda de trabajo- pregunta Janin detrás de nosotros.

-De maravilla. Trabajo en industrias Collins - digo de lo mas tranquila.

Derek y ella abren los ojos como platos.

-Pues Makenzie, somos la competencia- sentencia Derek sentándose a mi lado.

Lo miro y le sonrió. Ya tengo un amigo de la competencia. Cada día esto mejora.

[...]

La alarma de mi reloj resuena por todo mi apartamento. Parece que las sabanas no quieran despegarse de mi.

-Sabanas, OS amo, pero necesito ir a trabajar- las susurro.

Me levanto a duras penas y me ducho. Me maquillo lo menos posible, solo un poco de rímel y corrector, y me pongo el modelito que me dijo Megan. Una falda de tubo negra y una blusa blanca amopañado de unos tacones.

Me preparo algo muy ligerito para el desayuno y espero a que Derek venga a recogerme.

El y yo acordamos ser mejores amigos por la sencilla razón de que nos caímos bien y que somos la competencia.

Mi timbre suena y cuando abro aparece un trajeado Derek.

-Te queda como un guante- digo riendo - me gusta mas tu estilo bad boy.

-A mi también, pero el trabajo es el trabajo- se encoje de hombros.

Me rio, este chico es lo mas de lo mas, tiene tres años mas que yo. Pero parece que tenga la edad de mis hermanos.

Nos subimos en su coche y el conduce con agilidad por las transitadas calles de la gran manzana.

Enchufo la radio sin ningún permiso y empieza a sonar "Dangerous woman" de Arianna grande.

-No sabia que te gustaba- digo y me río.

-Hay muchas cosas de mi que no sabes- me guiña un ojo y yo ruedo los mios- por ejemplo, quiero que me hagas un gran favor.

-Que favor?

-Que me consigas una cita con una chica de tu empresa.

-Solo conozco a una.- en arca una ceja y sigo- Megan Morrison.- se le iluminan los ojos.

-Perfecto!! Es ella! Quiero que hagas algo para acercarnos porfavor- me lanza unos ojos de cachorito imposible de contenerse.

-Ughhh, valeee.

Aplaude cual niño pequeño y empiezo a pensar que hacer para que Megan lo conozca.

-Anda adiós pequeñin- le rebuelbo el pelo y el se queja.

-Soy tres años mayor que tu amor- me lanza un beso y vuelvo a rodar los ojos.

-Eso no importa PEQUEÑIN- digo para molestarlo. - Te espero cuando acabe. No te olvides o me enfadaré.

-Si torera.

-No me llames así- se ríe y miro mi reloj- ostia! Llego tarde mi primer día. Adiós pequeñin, no me eches de menos.

-No lo dudes torera.

Salgo del coche a toda velocidad rodando los ojos. Entro al gran edificio y saludo a Megan que me guiña un ojo. Subo hasta el ultimo piso. Cuando las puertas de el esplendido ascensor se abren me quedo embobada, el pasillo tiene cuadros preciosos- y seguro que son caros- y varias puertas que supongo que serán las oficinas. Llego hasta la que Megan me ha indicado y llamo a la puerta, la abro cuando oigo "Adelante"

Mark se encuentra solo y recostado en una silla con pinta de ser cómoda.

-Veo que Megan te ha echo una buena elección para la ropa- me escanea de arriba a bajo.- Bueno Makenzie, trabajaras en la oficina con papeleo y también serás mi traductora vale? - asientl- también ayudarás a mis dos nietos, tus otros dos jefes.- vuelvo a asentir.- Vale, ahora nec....

No puede acabar la frase porque dos hombres han entrado en la habitación, no me he girado a verlos, pero intuyo que serán mis otros dos jefes.

-Mak, ellos son tus Jefes, Devon y Drew. - asiento y ahora si que me giro.

Casi se me desencaja la mandíbula al ver esos ojos grises y ese pelo castaño.

-No me digas que ella es la nueva.- dice el estúpido.

-"La nueva" tiene nombre sabes?- digo con mucho asco.

-Drew, comportate, ella es Makenzie.

El rueda los ojos y todo seguido sale sin decir ninguna palabra.

El estúpido que me tiró el café tiene nombre, Drew Collins, y es mi estúpido jefe.