Mi Estupido Jefe

23. Viaje

—Megan, lo digo enserio, si me invitas y Derek también va juro que me muero del asco, no me gusta ser la sujeta velas o la tercera rueda o como quieras llamarlo.— lloriqueo

—Hay, sabes que somos tus mejores amigos, haremos lo posible para que no estés incomoda amor. Ademas, le e dicho a Derek que invite a quien quiera.— me lanza una mirada picara.

Resoplo y ruedo los ojos, si supiera que solo me interesa una persona.....

—Valee... Iré.

—Bieeeeen!— grita dando saltitos.

—No te acostumbres.

A quien se le ocurre irnos tres días de viaje. Iremos a París. Si, París, otro continente, y yo sin saber ni papa de Francés, pero ahora que lo pienso, esta al lado de España, supongo que mezclando palabras nos entenderemos.

—Maggie, no crees que tres días es muy poco para ir a París?

—Noup, por la sencilla razón de que nos la recorreremos en un día y el segundo será improvisado— se encoje de hombros— Importante, llevaté este vestido, creo que allí son muy arreglados para ir a cenar a un sitio caro.

—Yo con un Mcdonalds me conformo.

—No de eso nada.

Vuelvo a resoplar. Que amiga mas cansina que tengo. Salimos hoy viernes. Y volvemos el domingo por la noche. Van a ser unas vacaciones raras, al día siguiente tenemos que trabajar.

Busco algo por lo que pueda remplazar el incomodo traje del trabajo, saco unos vaqueros con florecitas y un crop top negro y me pongo mis vans preferidas.

[...]

—Este Novio mio es un impuntual de la leche— se queja Taconeando en el suelo.

La espera de Derek y su amigo se hace eterna, luego dicen que las chicas tardamos.

—Este novio tuyo no tiene la culpa.— dice alguien detrás nuestra.— es culpa del Tardón millonario.

Drew.

Me giro y lo veo, tan guapo como siempre, no entiendo como todo tipo de ropa le queda tan bien. Si va con traje es todo un playboy, y si va con ropa normal es un Badboy.

—Si seguís mirandoos así mas rato perderemos el avión — dice Megan a mi lado.

Muevo la cabeza eliminando los pensamientos impuros y le sonrió a Megan.

Los cuatro caminamos hasta los asientos para esperar a la llamada de nuestro vuelo hasta París.

Media hora después aun seguimos esperando en los incómodos asientos del aeropuerto. Meg y Derek están acarameladitos a mi lado y me están dando arcadas.

—Crees que se pondrán a hacerlo aquí mismo?— le susurro a Drew.

—Creo que no quieren traumar a esos pobres niños.— señala a un niño de unos 14 años y a una de siete que no dejan de mirarlos.

—Pues el mayor no parece poner ningún problema —me rio.

Lo mira y luego me mira a mi antes de reírse a carcajadas, haciendo que el chico ese nos mire.

—Me aburro.— se queja— jugamos a algo?— asiento en cogiendo me de hombros— vale, serán retos, haremos tres cada uno, y ya sabes, quien gane dirá un precio y quien pierda tendrá que hacerlo.

—Parece que lo tenias muy pensado— me rio— acepto— le doy la mano.

—Vale, tu primer reto sera....

—Espera, antes tendré que saber que gano cuando pierdad— digo obvia.

—Yo ganaré un dulce beso por tu parte.— lo miro riendlme.

—No vas a ganar ningún beso porque voy a ganar yo— me río.

Niega con la cabeza y se ríe.

—Anda, piensa lo que quieras. Tu primer reto es fácil, ves aquel grupo de tíos?— asiento— ves, Tienes que herir el ego de por lo menos tres vale?

Asiento, tarea fácil, hay cinco, cuatro guapísimos y atléticos, acostumbrados a que ninguna chica les diga que no. Y luego esta la excepción, un chico bajito, delgaducho, feo, con dientes de caballo y una berruga en la nariz. Ya se sabe lo que voy a hacer no?

Me levanto del asiento llamando la atención de los cinco chicos. Suerte que estos pantalones y top dejen poco a la imaginación.

—Hola, te estaba viendo desde allí y me has parecido muy mono— digo parándome delante de los chicos.

—Lo se, soy un play boy— dice uno rubio.

—Contigo no hablo, brazo globo — le toco el musculo y me río.

—Deja a mi amigo, es un ingenuo, esta claro que me hablabas a mi — dice uno latino.

—Noup, me gustan los latinos, pero tu no, eres demasiado tipo el Bryan—

—El Bryan, Estoy mas arriba de ese de lo que te piensas.

—No creo. Y para aue loa demas lo sepáis, estaba hablando con el— señalo al feillo.—Bueno chicosme voy mi novio me espera en París. La ciudad Del amor.

Vuelvo riendome hasta Drew. Este me mira riendo.

—No pensé que fueras a hacer eso— se vuelve a reír.

Después de que el tubiera que ligar con una mochila y liarse con un pilar, y que yo hubiera que ligar con un viejo con bastón —Cosa que no e echo— y que tubiera que interrumpir a alguien que estuviera besandose por un ataque de celos. Va la prueba definitiva.

—Te toca — le doy un golpe en la rodilla— quiero que hagas algo para que todos los de aquí — señalo todo lo que nos rodea— se te quede mirando.

Sonríe de oreja a oreja y me lanza una mirada picara. Puedo asustarme ya?

—PEQUEÑA, YA NO PUEDO ESPERAR MAS,— grita captando la atención de todos— PENSABA DECÍRTELO DEBAJO DE LA TORRE EIFFEL, PERO TE LO DIRÉ AHORA. QUIERES CASARTE CON ESTE ESTUPIDO EBAMORADO?— dice arrodillandose y ccogiéndome de la mano.

me pongo roja como un tomate, como se le ocurre hacer estas cosas? Y Ahora que le digo?

—Si dices que no me miraran con Pena—Susurra.

Lo asesino con la mirada y el se ríe aun sujetando mi mano. Suspiro hondo.

—Si quiero— murmuro rodando los ojos.

Todos nos aplauden y el me abraza.

—Creo que e ganado por goleada — se ríe.— quiero mi besito.

—Aggh en que momento se me ocurrió jugar contigo?

Aun sigo rodeada por sus brazos y todos esperan el beso de pedida de matrimonio, así que no les haré esperar.

«Os cuento un secreto, pero shhhh. Si yo ganaba también iba a ser un beso, no digáis nada, Shhhh»

Estampó mis labios con los suyos y los aplausos se hacen mas fuertes, oigo ka risa de Derek detrás de nosotros, pero la ignoro, ahora estoy en el séptimo cielo.

Nos separamos por falta de aire y justo en ese momento habla el megáfono.

—Ultimo aviso para el vuelo a París vayan a la puerta de embarque numero 10.

Cojemos nuestras mochilas y vamos a la puerta de embarque rumbo París.