• Los juegos de mi PRIMO • © COMPLETA.

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Anahí.

Nunca pense que Poncho me traeria a un restaurante tan elegante, gracias a dios y había escogido una vestimenta mas o menos apropiado. Aquí estábamos, mi primo y yo, en un restaurante italiano en una extraña primera cita esperando que él mesero nos trajera nuestros pedidos y disfrutando de una copa de una champagne mas cara de lo que debería.

Alfonso: ¿Me hablarás de tu trabajo? - preguntó por segunda vez en la noche.

Deje mi copa con cuidado sobre la mesa mientras pasaba él liquido a traves de mi garganta para responder.

Anahí: No hay nada muy interesante para decir.

Alfonso: Sin ánimo de sacarlo en cara - aclaro - Han sido cinco años, algo interesante debe de haber.

Anahí: Bueno, trabajo en una agencia de publicidad muy solicitada, estoy en la oficina de relaciones internacionales. Al terminar la universidad puede empezar mis prácticas allí, y debido a mi desempeño me he ganado él puesto.

Alfonso: Siempre has sido hábil para los negocios - remarco.

Anahí: Tengo días amigas, Maite y Dulce. Maite ha estado conmigo desde la universidad y tuvimos la suerte de quedar trabajando en la misma empresa y a Dulce la he conocido durante las prácticas.

Alfonso: ¿Cuando conociste a tu novio? - preguntó. Me fije en él desden con él que pronunciaba Novio.

Hablar de Cristián a mi primo, con él cual me estaba acostado, me hacia sentir escalofríos.

«Eres una perra sin remedio» No es él momento querida Anita.

Me aclare un poco la garganta antes de empezar.

Anahí: Fue en una de las reuniones en la empresa. A penas estaba empezando mi trabajo de verdad y me vi obligada a ir para ganar conexiónes importantes. Durante la noche nos presentaron y estuvimos hablando durante él resto de la velada. Al final de la noche había conseguido mi número y se había ofrecido a llevarme a casa.

Alfonso: ¿Te acostaste con él esa noche?.

No pude evitar que los colores se me subieran a la cara, pero esta vez no era por vergüenza, esta vez era por enojo.

Anahí: No soy una puta que se abre fácilmente de piernas si es a lo que te refieres - le respondí ofendida.

Alfonso: Lo siento, Anahí - parecía realmente arrepentido - Eso ha estado completamente fuera de lugar.

Anahí: Si lo ha estado - respondí seca- Además no veo en que te incumbe eso.

Sus ojos se endurecieron en una mirada fría y distante.

Alfonso: ¿Tu no tienes idea, verdad?

Antes de poder responderle nada, él camarero interrumpió con la llegada de los pedidos, por lo cual pasamos de hablar del tema. Luego de unos minutos en un silencio incomodo debido a nuestra pequeña discusión previa, retome él hilo de la conversación antes de su estúpido comentario sobre mi siendo una puta fácil.

Anahí: ¿Y que hay de ti? - devolví la pelota- ¿Que ha pasado durante este tiempo? He sabido por mamá que te ha ido muy bien en él trabajo.

Alfonso: No hay mucho que decir. He tenido suerte y me he esforzado para ganarme mi prestigio. También he viajado mucho desde que termine la universidad buscando mi lugar en él mundo.

Anahi: ¿Lo has encontrado?.

Me miro por unos segundos antes de responder.

Alfonso: Siento que estoy cerca de encontrarlo.