• Los juegos de mi PRIMO • © COMPLETA.

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Después de dar vueltas en mi cama tratando de dormir un poco más, desistí de intento. Me desperté él viernes a eso de la 5:30am, él cambio de horario apesta. Chicago y Carson City tienen dos horas de diferencia. Me levante y decidí salir de mi habitación, no me importo llevar puesta mi pijama, después de todo ¿Quien estará despierto a esta hora?

Mi pregunta fue respondido cinco minutos después. Ese fue él tiempo que me tome bajar la escaleras, caminar hacia la cocina y encontrar a Poncho bebiendo un vaso de leche sentado en una de la sillas altas del mesón. De todas la personas de esta casa, él tenia que estar despierto a esta hora.

Alfonso: Lindo pijama –saludo ante de que yo pudiera decir los buenos días.

Lo fulmino con la mirada.

Anahi: No te burles. Es muy cómodo.

Alfonso: Esos ositos se ven cómodos –replica.

Anahí: Lo son.

Me doy vuelta y abro la nevera, encuentro la caja de leche y alcanzo un vaso. Decido imitarlo y me siento a su lado bebiendo mi leche.

Anahí: ¿Tampoco pudiste seguir durmiendo?

Toma un trago de su vaso antes de contestar.

Alfonso: Diferencia horaria.

Anahí: ¿Donde vives ahora después de todo? – pregunto frunciendo el ceño.

Alfonso: ¿Ahora te interesa? –pregunto con desdén –Digo después de todo él tiempo que pasaste evitándome e ignorandome.

Anahi: Poncho no es...

Alfonso: Londres, vivo en Londres, momentáneamente. Tengo un proyecto que terminar y estoy allí desde hace un año y medio.

Me quedo callada ante su cambio brusco de conversación. Me hace sentir culpable él hecho que en realidad no se nada de su vida.

Anahi: Lo siento por alejarme de ti de esa manera – le digo antes de perder él poco coraje que tengo –Yo, necesitaba despejar mi mente. Hacerme entender que lo que me hacias sentir... 

Alfonso: Por favor no empieces de nuevo con lo que no estaba bien.

Anahi: ¡Pero es que no lo esta!–exclamo frustrado.

Ya no se si quiero que él lo entienda o quiero hacérmelo creer. Poncho me arrebata él vaso de leche y lo hace aun lado y luego me toma por mi cintura y me sube al meson quedando él entre mis piernas.

Anahí: ¿Que demonios...? –digo cuando siento su respiración en mi cuello.

Alfonso: Shhh. Quiero descubrir que es exactamente eso que tu dices que no esta bien.

Anahí: Poncho –le digo con mi voz temblorosa.

«Porque no puedes cerrar esa boca y disfrutarlo. ¿Estas lenta o que? Con semejante hombre y poniendo peros»

Me callo y me dejo hacer. Puedo sentir los besos de Poncho por todo mi cuello y sus manos recorre mi espalda antes de llegar al borde de mi blusa y entrar por debajo de esta. Sus manos se siente muy bien en mi espalda y un gemido involuntario se escapa de mi, tarde me doy cuenta que no traigo puesto sostén y que él ya lo ha descubierto. Me da una sonrisa juguetona justo antes de mover sus manos hacia delante y posarla en mis senos ¡Me estoy dejando manosear por mi Primo!

Alfonso: Mmm.. Sigo sin descubrir que esta mal–dice con voz ronca.

Anahí: Poncho..

Intento hablar pero en ese momento él aprisiona uno de mis pezones entre sus dedos y mi protesta muere en mi labios. Empieza a intercalar las caricias con pellizcos y siento como mi libido sube. La humedad en mi entrepierna da fe cuando me esta gustando. Él acerca su entrepierna a la mía y me deja sentir cual afectado esta por la situación.