Mudanza de Poncho.
Anahí.
Hoy era él dia, por fin después de tanto esperar. Revise mi reloj por quinta vez desde que me desperte y solo habia pasado una hora, eran las 08:05 de la mañana del jueves y yo no podia estar mas nerviosa.
Dulce: ¿Podria por favor concentrarte? - me pidio.
Anahí: Lo estoy haciendo.
Sabia que era una reverenda mentira. Desde hace unas semanas mi mente esta ocupada en una cosa: Poncho se muda a Chicago.
«Que no se note él hambre»
Dijo Anita. Bufé, como si fuera tan facil.
Dulce: Entonces pasame él archivo.
¿Archivo? ¿Que archivo? ¡Mierda!.
Anahí: Bueno, este....yo...- no encontre una excusa rápidamente.
Dulce rodo los ojos.
Dulce: ¿Sabes que? Olvidalo, así no vamos a terminar nunca, mejor ve tu al archivador y trae las carpetas que faltan.
Me levante del asiento murmurando una disculpa y fui hasta él archivador sin dejar de pensar en que hoy por fin Poncho llega para quedarse.
Luego de cinco meses, Poncho ha podido terminar su parte en él proyecto de Londres. Aunque al principio no estaba muy seguro de lo que conseguiría en los Estados Unidos las ofertas de trabajo no han hecho falta. Y no es porque sea mi novio pero Poncho es un muy buen arquitecto.
Razón por la cual abrirá un estudio de arquitectura en Chicago, el quiere tener su propia oficina. Yo por mi parte no podría estar mas dichosa, ya que eso significa que por fin viviremos juntos y no tendría que esperar para verlo. Ya hasta tenemos que empezar a buscar apartamento.
Sera genial, aunque intento que los demas no se enteren cuan feliz y nerviosa estoy por este momento.
«Como si tu cara de mensa no lo dijera todo»
Rodee los ojos sin prestarle mucha atención a Anita.
Llegue hasta los archivadores y olvide por completa que era lo que tenia que venir hacer.
«Las carpetas idiota, las carpetas »
Ah si, eso.
Empecé a buscar por los archivadores los nombres de las últimas personas con las que habíamos finalizado contrato y me di cuenta que no era la unica en la habitación.
Anahí: ¿Que haces aquí Maite?
Ella se sobresalto pero se tranquilizo al darse cuenta que era yo.
Maite: Hola Any - me saludo de vuelta - Solo buscaba el contrato de Samanta.
Yo frunci él ceño. Samanta había dejado de trabajar con nosotros hace cuatros meses.
Anahí: ¿Y eso?.
Maite: Sabes que hace casi tres meses tuvo a su bebé y no la he ido a saludar ni siquiera. Quiero saber su dirección o por lo menos su teléfono ¿Puedes creer que no lo tengo?
Yo asiento y la dejo para que siga con su trabajo, pero cuando me voy a retirar ella me llama de nuevo.
Anahí: ¿Si? - le digo volteando.
Maite: Hoy llega tu primito. ¿Verdad?.
Me sonrojo hasta la medula.
Anahí: Hoy llega Poncho, si.
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• Los juegos de mi PRIMO • © COMPLETA.
Randomhot 🔥 (+18) [Aclaración: Esta historia no es mía todos los derechos quedan reservado a la autora Nanita ]